Por Juan Pablo Aguirre Quezada*

Si tuviera mil ideas y sólo una resultase ser buena, estaría satisfecho”. Alfred Nobel.

 

Suecia es un país del norte de Europa que se ha caracterizado por un desarrollo de la tecnología con marcas reconocidas en materia de aeronáutica, camiones pesados, maquinaria, automotriz, telefónica, entre otros. En conjunto, la producción de estos productos es uno de sus principales ingresos de divisas del exterior, junto con la explotación de madera y sus derivados como muebles, o la venta de mercancías musicales.

Estos resultados han permitido un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) constante en los últimos años, ejemplo de ello es que de acuerdo con el Banco Mundial en 2013 su indicador fue de 1.5%, superando a países vecinos como Noruega o Dinamarca que tuvieron decrementos de alrededor de medio punto porcentual en dicho año. Cabe destacar que otras estimaciones de organismos internacionales calculan que en 2015 el crecimiento del PIB sueco fue de 4.1%.

SueciaUn país que se caracteriza por una gran cantidad de lagos y grandes extensiones de bosques ha sido capaz de posicionar sus marcas tecnológicas por gran parte del mundo, y de hacer grandes alianzas con otras firmas que le han permitido expandir sus mercados. La estabilidad de estas compañías es importante si comparamos que la oferta y demanda ha desplazado a otros competidores europeos. Pese a que algunas firmas suecas -principalmente en la rama automotriz- han entrado en dificultades, otras se han mantenido y son una referencia en sus sectores. Ejemplo de ello es el uso de autobuses pesados como transporte de pasajeros tal como sucede en México. Cabe destacar que la industria genera uno de cada tres empleos que existen en el país escandinavo.

El desarrollo especializado en Suecia ha permitido propiciar un gasto del 3.28% del PIB para ciencia y tecnología, superior al promedio mundial de 2.17 en 2012. Asimismo, sus exportaciones de productos de alta tecnología se incrementaron de 13 mil 880 millones de dólares en 1999 a 16 mil 556 millones en 2014. Si bien el crecimiento no ha sido tan vertiginoso como los indicadores de otros países, los excedentes suecos han superado diferentes momentos de crisis económica y han atraído ganancias al país.

Otro dato a destacar es que Suecia tiene 5 mil 256 científicos dedicados a investigación y desarrollo por cada millón de personas, mientras que el promedio mundial –de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO)- es de mil 268. El número alcanzado por Suecia únicamente es superado por Finlandia (7 mil 717), Dinamarca (6,774), Singapur (6,307), Noruega (5,408), y Corea del Sur (5,380); por lo que este tipo de profesionistas es un soporte para el porvenir del país en materia de tecnología al tener un cociente mayor a otros países avanzados como Alemania, Holanda, Bélgica, Japón, entre otros.

El desarrollo tecnológico sueco no podría ser aprovechado por el resto del mundo si no fuese por la diversidad de mercados a los que pueden llegar sus productos. Empresas suecas presumen en sus páginas de internet que sus productos están en servicio en más de 100 países, aunque los principales socios comerciales de la demarcación son: Noruega, Alemania, Estados Unidos, Reino Unido, China, Finlandia, Francia, Holanda, Bélgica y Dinamarca, principalmente.

La combinación de tecnología y naturaleza han hecho posible que Suecia pueda colocarse entre los diez países exportadores más importantes en la materia. Con ello también han reducido las emisiones contaminantes ya que es uno de los países con menos dependencia de los combustibles fósiles para generar electricidad en todo el orbe.

SueciaSin embargo, pese a las alternativas eólicas o hidroeléctricas, todavía el país depende mucho de la energía nuclear para su abastecimiento, hecho que le presenta ventajas y desventajas por los riesgos que implica esta tecnología. En ese sentido, cabe recordar que fue un equipo de seguridad sueco el que detectó la alta radiación que en 1986 dio a conocer el desastre de Chernóbil a todo el mundo, lo que refiere del cuidado que se tiene en este proceso de generación de electricidad.

Este país de menos de 9.6 millones de habitantes distribuidos en 450 mil kilometrosapostó por políticas que le permitieran mejorar aspectos relacionados al Índice de Desarrollo Humano como los rubros de educación, trabajo o seguridad social. El impulso de la tecnología en Suecia coadyuvó a que su sociedad tuviera mejores ingresos con el desarrollo de grandes empresas relacionadas a productos como dinamita, electricidad, telefonía o transporte. La aportación de los científicos y técnicos suecos al desarrollo de la humanidad ha sido de gran relevancia, con productos competitivos pese a la competencia generada por la apertura de mercados y la globalización.

Los retos del futuro para Suecia no sólo implican la competitividad tecnológica, sino fortalecer la sustentabilidad energética que coadyuve a este desarrollo de forma eficiente. A diferencia de su vecino Noruega, los suecos no son productores de petróleo, por lo que su tecnología e innovación dependerá de la electricidad que ellos mismos puedan generar.

*Doctor en Humanidades, Universidad Latinoamericana.