Duelo Cortesano

Me pregunto hasta cuando será el próximo “agarrón del chongo” entre empresarios y los gobernantes 4T. Si usted conoce la lucha libre clásica mexicana, algo así entre el enmascarado endiablado y el héroe de los caireles. Nada más que en esta ocasión las patadas, llaves, torzones, mordidas de orejas y demoledoras no se vale ocurrieron entre el Presidente de la República, su ilustre director de la CFE y el sector privado dueño de gasoductos.

Le comentamos en el artículo anterior, que para el jueves 22 se tendría que haber llegado a un acuerdo razonablemente favorable para ambas partes. Muy bien. Llegó prácticamente apenas el pasado martes 27, cuando en la “mañanera” palaciega, tanto AMLO como Carlos Slim, concluyeron que se llegó a un acuerdo ganar-ganar para todas las partes. Es decir que dueños de gasoductos y gobierno decidieron dejar de ladrarse, darse un abrazo y solventar el asunto antes de que el país quedara en una compleja situación de abasto de gas, y lavando la ropa sucia en casa, en vez de acudir a arbitrajes internacionales.

Carlos Slim explicó en un lenguaje picaresco cantinflesco: “La parte relevante fue que se  hicieran en lugar de tener rentas crecientes, rentas iguales. Esto por un lado ayuda a que la CFE pague un importe menor al final del día por las rentas (de los gasoductos), y que también, dadas las tasas de interés bajas que hoy hay en los mercados mundiales, pueda tener un efecto desde el punto de vista de Valores Presentes. Y para la empresa, en el caso nuestro (de Carso Energy), que al haberse hecho la renta pareja a lo largo del plazo, nos permita financiar más proyectos, hacer mayores inversiones”.

A decir de AMLO, el nuevo acuerdo resultará a la larga en ahorros por 4 mil 500 mdd para el gobierno, es decir más del 30 por ciento de lo que el gobierno estaba obligado a pagar bajo los esquemas originales de contratación. La verdad es que “a Valor Presente” y a decir de los especialistas, la cifra de ahorro para el gobierno nominal será de unos 600 mdd, cifra sensiblemente menor a los cálculos del Presidente.

Lo cierto es que se resolvieron varios problemas que tenían mutuamente gobierno y empresas:

  • Al gobierno se le iba a agotar rápidamente el flujo, para hacer pagos crecientes anuales por las rentas de los gasoductos. Estaban bien calculados los flujos en las proyecciones originales, pero con el desorden financiero de Palacio Nacional, el gobierno tendría una nueva presión financiera anual creciente. Ahora se vuelven tersos los pagos, y se aprovechan por lo menos en el corto plazo, las bajas tasas de interés de los mercados financieros internacionales.
  • Después del corto plazo, es decir después del 2020, vaya usted a saber cómo seguirán las tasas de interés, y cuáles serán las presiones inflacionarias en nuestro país. Así es que si llegan a subir de forma importante esas tasas no habrá tal ganar-ganar. El gobierno tendrá que poner más dinero. Pero la expectativas es que para cuando llegue ese momento, la sequía financiera que aqueja a este gobierno se supere, y puedan hacerle frente a la presión de liquidez actual, para cubrir las rentas anuales por el uso de los gasoductos.
  • La parte relevante para el gobierno es que los términos de los convenios se extenderán en el tiempo; es decir que envían la curva de pagos a mayor plazo, con lo que se aplanan los pagos nominales, dando un respiro temporal al gobierno.
  • Todas las partes ganan, dado que se evitan arbitrajes internacionales, que son costosos en dinero, además de en tiempos. El país hubiera tenido un doble costo de abasto de gas, más oneroso para habitantes, gobierno, empresas dueñas de gasoductos.
  • Se convenció al presidente para que se se encargara de bajarle los humos a su terrible dragón anti iniciativa privada, pro nacionalización de todo lo que él considera son sectores prioritarios que deben de estar en manos del gobierno, Manuel Bartlett Díaz, así como su director de finanzas en la CFE.
  • ¡Vaya tarea que tuvieron que llevar a puerto razonable Carlos Salazar del CCE, Antonio Del Valle Perochena del Consejo Mexicano de Negocios, y Alfonso Romo Jefe de Oficina de la Presidencia de la República! Ellos desarrollaron las ecuaciones para destrabar el problemón que armó Manuel Bartlett Díaz de la CFE, al haber convencido  al presidente hace casi seis meses de detener las negociaciones con los gasoductos. La labor ha sido desde partir de una práctica ruptura, cuando se acusó a las empresas dueñas de los gasoductos de haber armado contratos leoninos, piratas, saqueadores, a las palabras tanto del Presidente como del director de la CFE de: feliz término de las negociaciones, evitar arbitrajes internacionales y una de facto aceptación que por el bien del país hubo que llegar a esta muy buena negociación.
  • Hay cerca de 1,600 proyectos de inversión que han decidido suspenderse, dadas las señales agresivas de este gobierno contra la inversión privada nacional y la IED.
  • Aunque Bartlett con cara enjuta, tal vez AMLO aprenda que la 4T no llegará. Por lo menos no como pretenden sus seguidores extremistas de la más radical izquierda.
  • Gana la IP nacional e internacional al poder seguir adelante con los gasoductos; gana el país y el gobierno, al recibir cerca de un 40 por ciento más de abasto de gas, que ya es escaso de gravedad en algunas regiones del país; gana la IP, que sabe manejar muy bien el concepto de Valor Presente, y bien convenció al gobierno, que un descuento en el enganche y pagar más abonos pequeños en los primeros años ahorrará en serio el costo total de los gasoductos. Aquí todos ponen, y todos ganan.
  • Todos jugaron el mismo juego: se dijeron hasta de qué se morirían, y al final a través del diálogo churrigueresco que tan bien manejamos los mexicanos, se llegó a un feliz acuerdo.
  • Este gas servirá para alimentar las plantas generadoras de energía eléctrica, y también a la industria productiva del país.
  • Esperemos que ahora sí no haya pretextos, para que la CFE abastezca con alta eficiencia la electricidad demandada por todo el país. También que apliquen la fórmula de inversión 51-49 por ciento gobierno-IP que parece satisfacerle al señor Bartlett, y comenzar las reinversiones en infraestructura generadora de electricidad, que se encuentra en una situación urgente de actualización, para los estándares que demanda el tamaño de economía y de la sociedad de nuestro país. Así evitar los graves apagones que hemos vivido en regiones tan importantes como la Península de Yucatán, B.C.S. y otras regiones de nuestro país. Ojalá la CFE y su director general sepan aprovechar la ventaja que nos implica recibir el gas natural más barato del mundo, que es el proveniente de EEUU.

Por último y muy importante, al destrabar este tema de los gasoductos, hablamos de cuatro empresas diferentes: TC Energy de Canadá, Carso Energy, IEnova-Sempra Energy y esperemos que muy pronto se resuelva la situación de Fermaca.  Por lo pronto las empresas con las que ya quedó el acuerdo, liberarán el respiro que se tenía detenido y pendía sobre el T-MEC. Los ojos del resto de Norteamérica (Canadá y EEUU) nos miraban con gran detenimiento. Sin gasoductos se entramparía aún más el T-MEC.

El caso de Fermaca seguro que saldrá. Pero tiene que ser revisado de manera particular. El margen de ganancia que cargaba el contrato original de por sí estaba ajustado. De negociar más plazo y menos rentas anuales, el gasoducto Fermaca resultaría en pérdida para la empresa mexicana. Eso nadie lo quiere. De ahí que se resolverá por separado.

Con el tema de los gasoductos se avanzó de manera importante en la relación IP, IED, gobierno federal. Quedan muchos abrojos por superar: La duda, la desconfianza sembrada alrededor de este gobierno, el acento del Primer Informe de Gobierno que precisamente conoceremos el próximo 1 de septiembre; la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos 2020 que serán presentados el próximo 8 de septiembre; la operabilidad misma de los gasoductos, incluyendo el de Fermaca. ¿Será este momento el inicio de un diálogo serio con los sectores productivos, para su involucramiento de nueva cuenta en toda la nueva matriz económica y de negocios energética de México, con una reexpresion de la reforma energética, en vez de su cancelación, para regresar al gobierno el monopolio de una matriz, insisto, que ya no saben cómo operar? Esa matriz ha cambiado por completo hoy por hoy, respecto a la estrategia energética de los años setenta y ochenta del siglo pasado, que sueñan Bartlett y el Presidente, pero que son ya eso, un sueño imposible. ¿Qué ocurrirá con las energías de transición y limpias?

A lo anterior sume usted la ratificación del T-MEC. ¿Para cuándo quedará firmado en EEUU? Agregue a las calificadoras y el grado de inversión casi chatarrizado de la deuda Pemex. Esto bien puede llegar para el próximo mes de noviembre.

Por último, a la ralentización aguda económica en la que ya nos metió este gobierno, agregue el curso que tomará la probable recesión mundial 2020-2021, y su efecto neto sobre nuestra economía. Queda mucho camino por recorrer para afirmar que los sectores productivos recuperaron la confianza en el gobierno mexicano. Van a tener que trabajar a marchas forzadas, y dejar atrás las culpas endosadas.

El máximo pendiente interno: la sociedad entera votó por AMLO, como un referéndum en contra del PRI, sí, pero también para buscar otra vía que mejorara las condiciones económicas de los mexicanos, la seguridad integral, y la disminución drástica de la corrupción e impunidad, el descaro que vemos de descomposición social por todo el país, y el libre manejo a modo de los grupos del crimen organizado, que hoy por hoy ya controlan regiones importantes del territorio nacional.

Moraleja: Ojalá el gobierno deje de molestar al sector privado, evite atacar a los liberales. La verdad es que los sueños güajiros del pasado hoy son ya imposibles. La fuerza económica, financiera y productiva del sector privado nacional y extranjero en México, es casi siete veces el valor de la economía del sector público. Este último no tiene manera de generar empleos, sueldos, crecimiento económico y social con movilidad transversal para las actuales y nuevas generaciones, impulsar el desarrollo y la innovación que este país nuestro demanda, y dar el gran salto este mismo siglo, a un país semi desarrollado, con mejores estándares de vida integral, para una parte mayoritaria de la población. Necesita de los demás sectores productivos. Hacerlo implicará la mejor herramienta de combate a la violencia, a la corrupción, a la impunidad que puede heredar la generación actual en el poder, para beneficio de millones de connacionales que ya vienen atrás de nosotros en la escala generacional.

 

¡Ay mis hijos!

Pues nada, que nos pinta de la patada el resto del 2019 y “como Picasso” el 2020. Para el segundo trimestre el PIB creció un 0.0 por ciento. Los servicios avanzaron 0.2 por ciento; producción industrial (-0.2 por ciento); y sector primario (-3.4 por ciento) de acuerdo al INEGI.

Haciendo un análisis del PIB sin ajuste estacional y siempre con información del INEGI, puede deducirse que durante el primer semestre del 2019 y respecto al primer semestre del 2018, la tasa de crecimiento fue apenas de 0.2 por ciento. El sector primario tuvo un crecimiento del 3.4 por ciento (por comercio exterior); el sector terciario un humilde 0.9 por ciento de crecimiento; y el poderoso sector secundario tuvo una pronunciada caída del 1.8 por ciento, que agudiza los signos vitales de nuestra economía, al detectar que esta contracción sobre todo en la construcción y el petróleo, dos marcadores centrales de impacto agregado al grueso de la economía nacional.

Por su parte el gasto de inversión registró una caída del 6.9 por ciento anual para el último dato disponible, lo que nos permite imaginar lo que pasará si la economía exportadora sufre por una contracción de la demanda del mercado estadounidense para 2020.

Todo hace suponer que para este 2019 el PIB crecerá al 0.0 por ciento. Para 2020 existen escenarios importantes que nos permiten inferir un crecimiento negativo, debido a que a la debilidad de la economía nacional se sumará la probable recesión general que para entonces se presente en el plano global, y que tendrá un efecto directo importante sobre el valor de nuestras exportaciones e importaciones.

En fin que lo que se tiene que trabajar desde hoy es dejar las declaraciones vagas del “vamos requete bien”, estimular la inversión privada nacional, extranjera, facilitar el desarrollo de micro y pequeñas empresas, aflojar el costo de los créditos productivos, y estimular el consumo, vía una relajación de algunos tensores fiscales (gasolinas, gas, productos de consumo). Sí, el gobierno deberá apretarse el cinturón, pero estimular la actividad económica, antes de quedarse sin herramental para poder hacerlo de manera holgada.

Estimado gobierno federal: olvídense de la economía clientelar, si de verdad aman ustedes a México, a sus 130 millones de habitantes y a las nuevas generaciones que ya viven hoy entre nosotros. Lo sabremos con mayor detalle, ahora que en unos días la SHCP presente el Paquete Ingresos-Egresos 2020.

 

Los Puntos Sobre las Ies

Banxico recorta pronósticos 2019

Hace unas semanas el gobernador del Banco de México Alejandro Díaz de León admitió que la desaceleración de la economía resulta mayor a la anticipada, que nos enfrentamos a un proceso de desaceleración mayor a lo anticipado, además de que el entorno externo no ayuda, ni los  choques (comerciales, tasas, mercados, confianza internacional, calificadoras) que hemos enfrentado. A decir de Díaz de León México a la fecha se enfrenta a una capacidad no utilizada en la economía. Por supuesto esto hace que la economía no crezca.

Muy interesantes los factores que destacó el gobernador del Banxico como vitales: Corrupción (persistente agrego yo, no la del pasado), la impunidad, la inseguridad, la Falta de Estado de Derecho, y la Incertidumbre Política Interna. Así es. Los argumentos que destaca Díaz de León son los que más preocupan al Banco de México, así como a los analistas e inversionistas nacionales e internacionales. Gobernanza y Rendición de Cuentas son en suma, lo que tira el necesario crecimiento nacional por el caño.

El sabotaje legal del Presidente y sus testaferros, llevan al país y a toda su población a la antesala de un colapso general económico, social, que tardará años en recuperarse. ¿Sabotaje legal? Sí claro. Me refiero al fenómeno Baja California, a la Ley Garrote Tabasco, a los ataques continuos a organismos autónomos incluyendo ahora al INE, a la CNDH, a las ONGs, a las organizaciones de la sociedad civil, a los propios jueces y sistema jurídico nacional, incluyendo SCJN. Todo en conjunto suma esa Incertidumbre Política de la que se habla del actual gobierno en México y ya también a nivel internacional.

Como consecuencia de todo lo anterior y una vez más el miércoles 28 pasado el Banco de México difundió sus nuevos pronósticos para el cierre de este año:

Rango de Crecimiento Económico México (PIB) del 0.8-1.8 por ciento anterior a 0.2-0.7 por ciento ahora.

La demanda interna se contrae. ¿Por qué? Por más desempleados, menores sueldos reales, que en suma contrajeron esa demanda.

¿Y el empleo? Se crearán entre 450 mil y 550 mil (Informe Trimestral abril-junio), frente al rango previo de 530 mil y 630 mil anterior.

Déficit en Balanza Comercial de 7 mil 800 mdd y en Cuenta Corriente de 15 mil 200 mdd, o 0.6 por ciento y 1.2 por ciento del PIB.

Inflación: al cierre del año, 3.2 por ciento y gracias a los precios no subyacentes (agrícolas y energéticos).

IED: Cae un 20.8 por ciento la Inversión Extranjera Directa Neta del primer semestre de 2019 a 14,589 mdd en comparación con el primer semestre de 2018 de 18,416 mdd. Por trimestres el resultado se ve más grave: Trimestre II de 2018 de 7,435 mdd y de 4,034 mdd para el Trimestre II de 2019. Esto es una caída del 45.7 por ciento.

Los datos de la Secretaría de Economía son similares: 19 por ciento de reducción en los flujos de IED en el primer semestre de 2018 en comparación con el primer semestre de 2018.

 

Callar a los medios para el Gran Golpe 2021 de la 4T

Me explico. En días pasados el grupo parlamentario del Partido del Trabajo en la Cámara de Diputados anunció que buscará regular a los Medios de Comunicación en el próximo periodo ordinario de sesiones, para evitar que se conviertan en un instrumento fundamental de la derecha en las elecciones del 2021 y en las del 2024.

Oscar González Yáñez (dip. PT) aseguró que los poderes fácticos de la derecha siguen gobernando este país. Para desmantelar a ese poder, es fundamental coartar la Libertad de Expresión, para impedir que los grupos de poder ajenos a la 4T la utilicen para contrarrestarla; de ahí las izquierdas extremas llevarán su agenda a los medios de comunicación. Se trata pues de una difusión ideologizadora de estas bestias, una vez silenciada la libertad de expresión, para meter en las cabezas de todos los mexicanos mensajes ultra-izquierdosos que acaben con los mensajes neo liberales neo porfiristas, antes del 2021.

Por eso insisto que con los gasoductos no se siembra nada. Se superó un bache, porque amenazaba seriamente al gobierno. Pero hablar de que el Presidente ya entendió que el capitalismo es fundamental para este país, es afirmación una de dos, de tontos, o de patrocinados por el neo gobierno 4T.

Inconformes con las agresiones y asesinatos de periodistas, ahora van de plano por el aplanamiento de los mensajes. Seguro después vendrá el retiro de concesiones o algún otro truco, para retirar de los espacios de comunicación a la libertad de expresión. La salida de Carlos Loret de Mola de Televisa no es asunto menor. Más grave aún la anuencia de ese Grupo a su despedida. Revise otros programas de la barra nocturna de canal 4. Cambian sus estructuras de críticas a neutras, para evitar el mismo destino.

Efrén Flores es licenciado en Economía. Durante más de 35 años se ha dedicado a la comunicación en medios electrónicos impresos, con temas financieros, económicos, empresariales, estratégicos, RSE, PyMEs, y de las nuevas tecnologías que revolucionan a nuestro mundo. Es conferencista en México y en EEUU.