Juan Antonio Rosado

Recientemente, gracias al esfuerzo de la compositora e investigadora Lucía Álvarez, y a la Escuela Nacional (ahora Facultad) de Música de la UNAM, aparecieron quince partituras, un disco compacto doble y el Catálogo de la obra musical de Juan Antonio Rosado Rodríguez (1922-1993), compositor puertorriqueño que radicó en México desde 1948 hasta su muerte. Como ha ocurrido con gran número de artistas en este país, el reconocimiento llega tarde, sobre todo cuando se trata de artistas modestos, alérgicos a la excesiva fama y que crean por un impulso natural, porque esa es una de sus razones de ser y de vivir.

Después de la semblanza y algunos textos introductorios, el Catálogo describe 104 obras del músico y cierra con un anexo con algunos documentos personales y apuntes manuscritos, entre los que se encuentra una partitura para piano (“Hoja de álbum”, de 1957). Hijo de Juan Rosado, pintor independentista y bohemio, escribió sus primeras obras a los 14 años. Desde entonces, nunca interrumpió su labor creativa. Colaboró con su padre en el taller de pintura, oficio en que se desempeñó con agilidad. En su adolescencia formó, con los pintores Rafael Tufiño y Tony Maldonado, el cellista Luis García y el pintor y cantante Luis Burgos, un grupo dedicado al cultivo de las artes: L’Atelier.

Tras dos años en la carrera de arquitectura y de haber residido por un tiempo en Nueva York, en 1948 llega a México para consagrarse a la composición. Se incorporó a la Escuela Nacional de Música, donde tuvo como maestros, entre otros, al fundador de la misma Escuela, Estanislao Mejía. Obtuvo una beca del Instituto de Cultura Puertorriqueña para estudiar con Rodolfo Halffter y fue tenor en la Sociedad Coral Universitaria.

Como mencioné, gracias al esfuerzo de Lucía Álvarez, se grabaron 15 obras en un CD doble. El primer disco se inicia con un fragmento de la entrevista realizada en Radio Educación en 1983, en el programa Los nuestros. Luego siguen “Intimidad” (1960), para guitarra; “Mutaciones” (1972), para piano; “Chismografía” (1960), canción humorística; “Tres piezas” (1972), para flauta, violín y piano; “Transmutaciones II” (1980), para clarinete y piano; “Remembranzas I y II”, para piano; “Divertimento I” (1959), para quinteto de alientos; “Suite contrastes”, compuesta por cinco piezas para distintos instrumentos; “Divertimento III” (1962), para quinteto de saxofones; “Caricaturas mexicanas” (1958), para piano; “Sonatina” (1961), para clarinete y piano, pieza que, por cierto, fue tocada durante muchos años por Radio UNAM; “Divertimento IV (1963), para flauta, cello y piano; “Divertimento VII” (1967), para quinteto de alientos; “Romance” (1957), para flauta, trombón y piano, y la “Rapsodia callejera” (1956), para trece instrumentos, dirigida de forma magistral por el maestro Sergio Cárdenas. Rebasaría el espacio de esta nota si enumerara a cada músico que intervino en estas grabaciones. Cada uno dio lo mejor de sí de manera desinteresada y el audio es de gran calidad.

 Juan Antonio Rosado Rodríguez (1922-1993), Catálogo. Lucía Álvarez Vázquez, responsable académica del proyecto; María del Carmen Betancourt Suárez, corresponsable, UNAM/ Escuela Nacional de Música, México, 2014; 84 pp.