¿Y de dónde proviene tanto amor a la música? Pues no hay más que una respuesta. A que su padre fue violinista y su madre pianista, de tal modo que cuando él, Eusebio, oye música, “es como si regresara a la placenta”. 

Con esta pequeña descripción, el escritor Eusebio Ruvalcaba da la bienvenida en su blog personal, en donde mostraba su muy particular estilo de concebir e interpretar el mundo, ganándose adeptos de diversas generaciones, teniendo entre los adolescentes a sus seguidores más asiduos; ejemplo de ello, fue su participación en la sección homónima (Un hilito de sangre) en la revista mensual especializada en música rock “La Mosca en la pared”, donde compartió espacio con el también escritor mexicano, José Agustín.

Su incursión en el mundo digital llevó a Ruvalcaba a reunir parte de su obra en su portal, entre los que se destaca El silencio me despertó, que da cuenta de una larga convivencia del autor con la música y la literatura, para compartir así las emociones que ambas expresiones pueden provocar.

La presentación de este texto se llevó a cabo en Palacio de Bellas Artes, un lugar que a Ruvalcaba le traía  muchos recuerdos, pues de niño pasó ahí mucho tiempo, viendo a sus padres interpretar obras de Schubert, Tchaikovsky, Bach o Brahms.

“Mi gusto por la literatura llegó después pero de esa época tengo muy gratos recuerdos, pues tenía como diez años y en muchas ocasiones tuve que ayudarle a mi madre a cambiar las hojas de la partitura que interpretaba al piano… esas experiencias me marcaron profundamente”.

“Estos ensayos están llenos de recuerdos, pero sobre todo de la idea de compartir con el lector las emociones de leer, y de escuchar música, una combinación que es ideal para reunirlas y disfrutar de ambas expresiones”.

Los ensayos contenidos en El silencio me despertó fueron publicados por el autor entre los años de 1995 y el 2005 en el periódico El Financiero y en la revista Vértigo.

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Apasionado de la música

Nacido en la ciudad de Guadalajara en 1951, Eusebio Ruvalcaba se dedicó a escuchar música. Pese a que publicó grandes títulos como Pocos son los elegidos y El frágil latido del corazón de un hombre, Eusebio concebía el arte de escribir como una forma de la creación musical. Sostenía repetidas veces que había una diferencia clara entre ambas: “La música no apela a la inteligencia o a la compresión del mundo, sino al vínculo con los estímulos que te rodean. La literatura exige una disposición, un conocimiento”.

Por otro lado, Eusebio Ruvalcaba fue escritor, poeta, ensayista y periodista mexicano. A finales de los ochenta, se incorporó al suplemento “La Cultural en México”, de la  Revista Siempre! En el semanario escribió notables artículos propagando su devoción por la música. Ejemplo de ello, fue su texto de finales de 2016, La música en la vida cotidiana. Eusebio asevera que no había ser humano que no escuchara música.

“No hay quien no oiga música. Cualquier tipo de música. Por ejemplo, en el puesto de jugos. En el taxi. En el taller de carpintería. O en el de mecánica automotriz. Porque hace la vida más soportable. Todos los días sobrevienen malentendidos imposibles de resolver. Es entonces cuando la música —insisto, cualquier tipo de música— constituye una bendición”.

Así lo recuerdan algunos amigos y escritores:

-Carlos Martínez Rentería, escritor y director de la revista Generación: “La dignidad intelectual de Eusebio Ruvalcaba ya la quisieran esos trajeados burócratas del poder. ¡Que viva Eusebio!”.