Su obsesión por recordar es lo que da a sus imágenes su humanidad. Los sufrimientos que se reflejan en ellas no se convertían solamente en estadísticas o noticias del ayer: “a veces llegaba a casa y me ponía a llorar por lo que había visto. Siempre queda una impresión, nunca lo olvidaré”, dice en su propio sitio web, Enrique Metinides, pieza fundamental de la fotografía en México del siglo XX, famoso por su trabajo periodístico de nota roja.

A los 83 años de edad, Enrique Metinides (Febrero, 1934), ha dejado una huella en la fotografía periodística. Ha demostrado la manera más precisa de exponer un suceso, de cautivar los sentimientos que los involucrados en la imagen expresan, el drama y el dolor que provoca imaginar la escena y los personajes secundarios que representan el impacto del suceso. Se debe de reconocer que lo opaco de su lente (objetivo) alentaba a la imagen a convertiste en una triste, pero inigualable obra de arte.

Actualmente, muchos de esos incidentes policiacos, suicidios, desastres o accidentes viales, vistas desde el ojo de Metinides o mejor conocido como “El niño”, las podemos ver en la exposición “Una crónica de la nota roja en México. De Posada a Metinides / Del Tigre de Santa Julia al crimen organizado”, en el Museo del Estanquillo, a través de la colección del propio recinto.

“Me atropellaron dos veces, me caí a barrancos, tengo nueve costillas rotas, un infarto, todo esto trabajando. Estuve en balaceras donde incluso veía caer a los muertos, en total tengo 19 accidentes mortales”, narró el decano de la foto policiaca, durante el recorrido inaugural por la muestra llevada acabo en el mes de abril.

La exposición a manera de homenaje a Metinides, esta integrada por más de 350 piezas, entre publicaciones, grabados, maquetas, fotografías, hojas volantes y memorándums relacionados con la nota roja, y con un número considerable de fotografías de época de El niño, que algunos investigadores daban por perdidas.

En aquella ocasión, Metinides, recordó muchas de sus anécdotas que tuvo durante más de cincuenta años en su carrera fotográfica. Entre ellas, la de aquella madrugada del 28 de noviembre de 1948, pues con tan solo 14 años, retrato una de las mayores tragedias hasta ese momento en la Ciudad de México: el incendio de la famosa tlapalería y ferretería La Sirena.

El suceso es uno de los muchos que ha acumulado el también periodista, e hijo de inmigrantes griegos, que inicio tomando fotografías de accidentes viales a los 9 años con una cámara que su padre le obsequió.

Su infancia fue fuertemente influenciada por películas policíacas y de gángsters, por lo que decidió tomar fotos en la calle, los accidentes automovilísticos, las delegaciones o en incendios y retratar los acontecimientos como en los filmes que veía, así pudo vivir las aventuras al estilo Al Capone que mostraban en el cine.

Publicó su primera fotografía a los 12 años por lo que ganó el apodo de “El Niño”. Trabajó inicialmente como ayudante de un fotógrafo para el periódico sensacionalista La Prensa, para el que trabajó posteriormente por varias décadas. Contó con un permiso especial de la Cruz Roja Mexicana para trabajar e incluso el sistema de claves radiales que se usan en la actualidad.

Ya para entonces, Metinides lograba no sólo capturar la escena trágica y al público espectador, dejó de lado el morbo de la toma, lo explícito de un cadáver, un accidente, por lo que medios extranjeros llegaron a ver sus fotos como artísticas, pese a que medios locales no publicaron su trabajo por censura.

Una de las fotografías más famosas es “Adela Legarreta Rivas atropellada por un Datsun”, tomada en 1979, la cual explica en buena medida el estilo de Metinides: la exposición de emociones de situaciones límite de tragedias humanas, tomadas con talento y recursos artísticos fotográficos.

La Casa de América, en España, la Central de Arte Guadalajara, México, así como The Photographers´Gallery en Londres y la Galeria Anton Kern de Nueva York, son algunos de los recintos donde se ha expuesto su obra con gran audiencia y reconocimiento.

En 1997, el Centro de la Imagen le otorgó el premio de Espejo de Luz y Pedro Valtierra a nombre de la agencia y revista Cuartoscuro en 2013 el premio a la trayectoria 2013. También es autor del libro 101 Tradegies of Enrique Metenides el cual contiene las imágenes icónicas que el propio fotógrafo ha elegido.

A partir de mañana, 16 de junio, se estrena en cines comerciales de México, el documental dirigido por Trisha Ziff, El hombre que vio demasiado, ganadora del Ariel al Mejor Documental y a la Mejor Música Original en 2016, que recopila y muestra la obra de Metinides, que como él mismo define, “construye un retrato íntimo del hombre detrás de la lente, de su hogar, su familia, sus múltiples colecciones, sus miedo y obsesiones”.

Tráiler “El hombre que vio demasiado” (dir. Trisha Ziff) from AMBULANTE on Vimeo.