Entrevista con Edgardo Buscaglia, académico de la Universidad de Columbia
Lo sucedido en Culiacán, Sinaloa, continúa generando diversas interpretaciones respecto al significado de los hechos que culminaron con la liberación de Ovidio Guzmán López –hijo de Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, líder del Cártel de Sinaloa–, pero para el especialista en temas de seguridad Edgardo Buscaglia (@edgardbuscaglia), en entrevista con Siempre!, se trata simplemente de un acto de terrorismo, a pesar de todas las dudas que se han generado al respecto.
“No, no es nada enredado, es acto de terrorismo como lo que cometían los paramilitares en Colombia o las FARC en algunos casos, en donde una organización criminal –reconocida como tal en todo el mundo– usó a la población civil aplicando violencia contra la misma para obligar al Estado a liberar a uno de sus capos, esa es la definición de libros de texto, en todos los códigos penales del mundo es lo que se llama un acto de terrorismo, entonces no hay ningún enredo, el Estado se vio forzado a liberar a uno de sus capos para que no exista mayor derramamiento de sangre en la población civil y para que no masacren a sus fuerzas y eso es un acto de terrorismo, entonces el señor Marcelo Ebrard –que salió del partido único de Estado, lo mismo que el presidente– no le tienen que tener miedo a tipificar un acto de terrorismo en contra de su población civil indefensa, como siempre le han tenido miedo en México las élites que el país sea asociado al terrorismo cuando cualquier país civilizado, lo que son democracias en serio como Alemania, Francia, Japón, en la década pasada sufrieron actos similares y sus gobiernos responsablemente tipificaron estos actos como terrorismo y 72 unidades antiterrorismo del planeta le pusieron una lupa exponencialmente más fuerte para desmantelar a una organización criminal que hoy simplemente es considerada como una red criminal que trafica drogas”.
Edgardo Buscaglia, académico de la Universidad de Columbia.
Lo que sigue
De acuerdo a la experiencia del también académico de la Universidad de Columbia en Nueva York, al gobierno mexicano le conviene tipificar –por lo sucedido el pasado 17 de octubre en Culiacán– al Cártel de Sinaloa como un grupo terrorista.
“Cuando tu calificas a una red criminal que trafica drogas como una red que comete actos de terrorismo, los recursos humanos y de inteligencia operativa que 72 unidades antiterrorismo del planeta le ponen al perseguirlos son exponencialmente mayores y a eso le tiene miedo el Cártel de Sinaloa cuando emite un comunicado en donde tratan de dar marcha atrás y de describir una fantasía de lo que ocurrió en el Culiacanazo, diciendo que ellos realmente no querían tirar en contra de la población civil, que fueron obligados por el gobierno y blablablá; es un comunicado que fue redactado por los abogados del Cártel de Sinaloa, para justamente evitar que el gobierno federal les tipifique un acto de terrorismo, porque puedo asegurar que los líderes de esa organización criminal son mucho más inteligentes que el promedio de los políticos que están en México, entonces es muy claro para los que hemos trabajado en zonas de conflicto como Yemén, en Afganistán, o en zonas de postconflicto como en Kosovo, esto es algo extremadamente claro, no hay que confundirseles, de ahí que el gobierno haya sido torpe con Alfonso Durazo, generando pantallas de humo al comienzo, argumentando que eran operativos fortuitos y todo esa historia que hicieron al comienzo representa un manejo muy amateur, muy poco profesional y muy poco democrático de un acto de terrorismo como este”.
Edgardo Buscaglia pidió que los análisis se centren en lo principal, que no es si estuvo mal planeado el operativo, sino en lo que sucede con el pueblo de México bajo el asedio del crimen organizado
“No nos estemos encegueciendo para criticar al gobierno quitándole el ojo a la pelota, el principal foco que debe unir a México hoy en día es que su población civil está siendo masacrada desde hace años, primero por los Zetas, con desapariciones forzadas, actos de terrorismo, es la definición, insisto son actos delictivos dirigidos a la población civil usándola como escudo, para forzar al Estado a liberar a uno de sus capos, en los códigos penales es ejercer violencia en contra de la población civil para que el Estado haga A o B, eso es un acto de terrorismo, pero no porque yo opino así, es porque legalmente se considera así”.
De igual manera, criticó las reacciones que se han dado entre la clase política nacional respecto a este tema.
“Ahora, claro, los intelectuales flácidos que están en las nóminas de los partidos mexicanos aquí o los mismos políticos le tienen mucho miedo a que en México se tipifiquen actos de terrorismo porque, dicen, nuestra imagen, nuestras inversiones, están pensando en el bolsillo, pero si no tipifican actos de terrorismo y dejan que esto ocurra el Estado va a quedar arodillado, el Cártel de Sinaloa va a seguir cometiendo actos como estos cada vez que uno de sus capos se vea amenazado, y la población civil va a seguir siendo masacrada, que es lo que a mí me preocupa, más a través de desapariciones forzadas, a través de actos de violencia de diferente tipo, como en su momento lo cometían los Zetas”.
Por lo anterior, pidió que se tomen medidas para que en conjunto con otros países se pueda detener la violencia de un grupo criminal como el de Sinaloa.
“Marcelo Ebrard y toda esta fauna de políticos que ustedes tienen, deben dejar de pensar en su propio bolsillo y en la imagen de México para la élites, la imagen caviar que ellos quieren proyectar, que el turismo, que la inversión y pensar que la vida de sus ciudadanos está en juego; si el Estado simplemente se queda y tipifica un acto de terrorismo, inmediatamente estaría convocando a la ayuda internacional de 72 unidades antiterroristas para identificar la presencia del Cártel de Sinaloa en 81 países del mundo”.
Ceremonia en reconocimiento a los efectivo caídos en Culiacán el 17 de octubre.
La fuerza del Cártel de Sinaloa
A decir de nuestro entrevistado, se trata no sólo de uno de los cárteles involucrados con el negocio del narcotráfico más violento, sino también uno que ha logrado establecerse en distintos puntos del planeta.
“Nosotros tenemos reportes de inteligencia en los que se ubica al cartel de Sinaloa lavando dinero, con inversiones en bienes físicos, con el transporte de drogas desde países europeos, desde Canadá hasta Argentina, en países asiáticos, el oriente de Europa. Las unidades antiterroristas del planeta va a estar tratando al Cártel de Sinaloa como tratan al Estado Islámico o a Al Qaeda, eso es lo que tiene que hacer un presidente con responsabilidad que quiera salvar vidas hacia futuro, si no lo hace yo le puedo asegurar que se va a pagar esto en la vida de miles de ciudadanos mexicanos que van a caer asesinados, lamentablemente hacia futuro, porque esta vez se evitó una masacre de la población civil porque liberaron a Ovidio Guzmán López”.
Y finaliza la entrevista pidiendo que se deje de lado el miedo a llamar las cosas por su nombre en el ámbito del narcotráfico.
“No es una exageración, las élites culeras mexicanas que están en el sector privado, público, que está mirando extranjera de Microsoft o de Chrysler, esas élites que han estado durante 20 años con este fenómeno, como este cáncer está aumentando su capacidad de desangrar a México con cientos de miles de asesinatos, con miles de desaparecidos, miles de fosas comunes, esa élite si actúa como siempre ha venido actuando, de tenerle miedo a tipificar un acto de terrorismo, a tenerle miedo de ir al Consejo de Seguridad a denunciar al Cártel de Sinaloa por usar a la población civil como escudo, si ustedes le tienen miedo lo van a pagar con muchos más ríos de sangre hacia futuro”.