Debe haber horarios escalonados de entrada al trabajo
Julio A. Millán B.
Parecería ser que el gobierno de la capital ha encontrado una fórmula para solucionar el problema vial de la ciudad, a través de una serie de acciones vigorosas de inversión en transporte y vialidades en diferentes frentes.
Tan es así que el presupuesto de la ciudad de México para la Secretaría de Transporte y Vialidad en el 2010 fue de mil 51 millones de pesos, adicionales a los 6 mil millones orientados al proyecto Metro y a los 12 mil millones que se distribuyen entre las diferentes entidades de transporte de la ciudad.
Además, para 2011 se prevé la inversión en infraestructura más alta de los últimos 30 años en el Distrito Federal, con alrededor de 40 mil millones de pesos que permitirán generar cerca de 50 mil empleos directos.
Sin embargo, de no existir una organización vial de emergencia en esta explosión de obras de transporte, el traumatismo que genera tanto a la población como a la propia economía de la nación podría traer consecuencias serias que habría que evitar.
Las olas expansivas de los taponamientos viales, a veces alcanzan varios kilómetros en determinadas horas. El Gobierno del Distrito Federal ha reconocido 14 áreas de conflicto, aunque en horas pico del transporte éstas podrían significar más de 60.
Aunque no se ha reflejado en actos de mayor disgusto o incluso violencia, existe un malestar oculto en la población, pues el efecto del desorden vial es pernicioso para la economía y la sociedad.
De acuerdo con información del Gobierno del Distrito Federal, el tiempo promedio de desplazamiento de viajes cuyo origen es el Estado de México es de 1 hora 24 minutos, mientras que el tiempo promedio de viajes dentro del DF es de 53 minutos por trayecto.
Lo anterior implica un alto costo de oportunidad, pues de acuerdo a cálculos de Consultores Internacionales, S.C., con base en el Programa Integral de Transporte y Vialidad del Gobierno del Distrito Federal 2007-2010, si se considera el salario mínimo proporcional por hora del 2007 (6.3 pesos) que pudieron haber recibido las personas que realizaron 22 millones de viajes, en lugar de dedicar dicho tiempo a realizar alguna actividad productiva, el costo de oportunidad del tráfico es de 55.4 mil millones de pesos; lo anterior representa alrededor del 1.95% del Producto Interno Bruto del DF y Estado de México o el 0.5% del PIB nacional de dicho año.
Si a esto se agrega el costo del desgaste de vehículos, el uso de combustible, el malestar social, el costo del tráfico se incrementa significativamente.
Además, si consideran los costos en la salud de los capitalinos, el problema vial tiene implicaciones en cada una de las familias afectadas.
Si bien se han realizado proyectos de infraestructura vial, no se han tomado soluciones de largo plazo, tales como definir el aforo total de vehículos, ponerle un tope a la emisión de placas, establecer mecanismos de uso marginal de los automóviles.
A su vez no existen leyes y disposiciones que regulen el tránsito de equipo pesado y de carga, los cuales deben ajustarse a ciertos horarios nocturnos, como sucede en otras ciudades.
Se perciben pocos esfuerzos para incrementar el transporte público, tanto por superficie como subterráneo. Tampoco se han aplicado soluciones al desorden que generan las marchas y plantones.
Debe establecerse un sistema de horarios escalonados de entrada para el trabajo, tanto en el gobierno como en el sector privado, así como una permanente campaña educativa de vialidad y cortesía. Este proceso seguirá traumatizando la movilidad de la ciudad y afectará al país entero mediante la disminución de productividad, debido a que el PIB de la capital representa cerca del 18% del producto nacional, porcentaje que asciende al 34% al considerar la zona metropolitana.
La solución está en organizar los programas de construcción en forma escalonada y ordenada; pero sobre todo, en una organización logística urgente de parte de las autoridades en su conjunto, esto es tanto las civiles como las policías. El reto es enorme, pero con recursos humanos y voluntad política se puede resolver.
jmillanb@grupocoraza.com
