Susana Hernández Espíndola

Hoy es el Día de los Museos. Pocas veces nos detenemos a pensar en la experiencia que nos deja una visita a uno de estos recintos, fuera de la obligada tarea escolar. Quienes han podido apreciar de cerca La Mona Lisa, de Leonardo da Vinci, los sarcófagos y momias egipcias, los soldados de terracota chinos, los fósiles de un animal prehistórico, los manuscritos originales del hombre, la Venus de Milo, de la antigua Grecia, el calendario azteca, entre muchos tesoros más, sabrán que es una experiencia inolvidable.

Desde la antigüedad siempre han existido coleccionistas privados que, por su gusto al arte, han recolectado obras de una cuantía ahora incalculable. En la época del Renacimiento, los italianos adinerados demostraron su interés por adquirir objetos de las culturas griega y romana.

Las familias de la realeza europea demostraba su poder con habitaciones dedicadas a lo exótico, lo hermoso y lo curioso, y ocasionalmente mostraban su generosidad abriendo estas colecciones al público.

No fue sino hasta 1683 que una colección privada de curiosidades de historia natural fue donada a la Universidad de Oxford, que decidió mostrarla al público. El Museo Ashmolean se convirtió en la primera exposición abierta al público, de forma permanente, albergada por una corporación.

En el siglo XVIII, con la apertura del British Museum (Londres) y el de Louvre (Francia) que aparecen los primeros museos, financiados por el gobierno y destinados a la educación pública y a la venta de souvenirs.

Así, en 1977, la ONU declaró el 18 de mayo como Día Internacional de los Museos.

Y México no podía estar ajeno a esta festividad. Diversos recintos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), como el de Antropología e Historia, Del Virreinato y el de las Intervenciones, realizan exposiciones, conferencias, seminarios, coloquios, recorridos y talleres, para celebrar el Día Internacional de los Museos, que este año tiene como lema “Museo y Memoria”.

Algunas celebraciones comenzaron al inicio de esta semana y se prolongarán hasta el 22 de mayo, de acuerdo con las actividades programadas por cada uno de los museos del INAH. Si tiene tiempo, no deje de visitarlos.