Alan Wallstonecraft
La gigantesca estrella Betelgeuse, ubicada a 430 años luz en la constelación de Orión y una de las más conocidas por ser fácilmente visible desde la Tierra, está llegando a su fin. La enorme masa roja fue fotografiada hace unos días en su complejo detalle por el telescopio “Very Large Telescope” (VLT) del Observatorio Europeo del Sur, (ESO, European Southern Observatory), mientras esparce una inimaginable cantidad de material, equivalente a la masa del Sol y grandes chorros de gas que parecen formar una nebulosa a su alrededor.
Llamada también α Orionis o HIP 27989, Betelgeuse es la novena estrella más brillante en el firmamento y su color rojo proviene de las bajas temperaturas de su superficie. Unos informes chinos del siglo I descubiertos en 1980, se refieren al color de Betelgeuse como blanco o amarillo. Sin embargo, en un escrito del año 150, Ptolomeo, la catalogó como estrella roja. Por ello, el astrofísico chino Fang Lizhi, propone que Betelgeuse podría haberse convertido en una gigante roja durante ese período.
La colosal estrella ha agotado ya el combustible en su núcleo que le proporcionaba energía (por fusión del hidrógeno), después de lo cual aumentó su tamaño hasta las enormes dimensiones que hoy tiene y que han podido ser calculadas con exactitud utilizando técnicas interferométricas: Su diámetro varía entre los 290 y los 480 millones de kilómetros, lo que equivale a 4,5 veces el diámetro de órbita de la Tierra o, en su tamaño máximo se extendería hasta más allá de la órbita de Marte. Su masa es 20 veces la masa del Sol y su tamaño es 40 millones de veces mayor.
Los astrofísicos creen que Betelgeuse tiene unos 10 millones de años de edad y predicen que explotará como supernova de tipo II, lo cual podría producirse en un plazo de tiempo muy cercano, en los próximos mil a 10 mil años. En ese momento la estrella brillaría 10 mil veces más que una supernova ordinaria y desde la Tierra será vista como una Luna llena durante varios meses.
Interpretada hoy como el hombro derecho de Orión, en el lugar donde está la estrella al paso de los siglos se desarrollará una espléndida nebulosa.



