Las notas de Richard Branson en el colegio eran un desastre. Traían de cabeza a su padre, un famoso abogado londinense acostumbrado a la excelencia escolar. Sin embargo, el entonces empresario en ciernes no tenía dudas de que su habilidad en los deportes y su capacidad para las relaciones públicas le harían llegar lejos.

Hoy es dueño de coches deportivos, aviones, residencias y de 3 mil millones de euros. Este magnate de la música, la telefonía y el transporte aéreo es propietario de más de 400 empresas y es la quinta persona más rica del Reino Unido. No está nada mal para un niño que apenas podía leer a los ocho años por su dislexia y al que sus profesores le auguraban un futuro de los más negro.

Millonario a los 23

El primer triunfo no tardó en llegar. A los 16 años Branson fundó su primer negocio, la revista Student. Con ella ganó algo de dinero, y decidió invertirlo en su siguiente aventura comercial: una compañía de venta de discos descatalogados por correo. Dos años después fundó la cadena de tiendas Virgin Records, que, debido al rotundo éxito, no tardó en convertirse en Virgin Megastores.

Branson fue a dar a la cárcel a los cinco meses de abrir su primera tienda de discos. Le condenaron por evasión de impuestos y debía pagar una multa de más de 100 mil euros. Como no tenía suficiente dinero, pensó que lanzar un sello musical le ayudaría a recaudar lo suficiente como para hacer frente al pago. No se equivocó. A los 23 años Branson ya tenía una cuenta corriente con más de nueve ceros y vivía en su propia isla.

Empresario de altos vuelos

A mediados de los ochenta decidió apostar por hacer negocio con otra de sus grandes pasiones, los viajes. La barba más famosa de los negocios se presentó en las oficinas de la compañía aeronáutica Boeing y les pidió prestado un avión, un 747. Así nació Virgin Atlantic Airways, que dos décadas después opera en casi todos los principales aeropuertos internacionales.

Según parece, el planeta Tierra le ha quedado chico a Richard Branson, que ya prepara el salto al exterior. Con Virgin Galactic pretende convertirse en el precursor del turismo estratosférico. Branson estima que “en aproximadamente 18 meses se iniciará una nueva era de viajes al espacio”.

(Con información de Roberto Arnaz)

Redacción/EBM

Fotos: DEPORTEMotorgiga.com.