Una crisis de supervivencia amenaza a la comunidad internacional, debido a cambios geográficos y climáticos ocasionados por la actividad solar, cuyas tormentas magnéticas han aumentado en intensidad desde hace varios años. Científicos de la Nasa y del Centro de Meteorología de Gran Bretaña, han reconocido los riesgos potenciales que estos fenómenos podrían traer consigo durante el 2012. En entrevista para Siempre!, el especialista del Departamento de Meteorología de Gran Bretaña, Paul Van der Linden, reconoció que la actividad solar aumenta los efectos del cambio climático y expone a la humanidad a condiciones cada vez más adversas para su sobrevivencia.

“Lo que sé sobre la actividad solar es que afecta directamente a factores naturales, especialmente el clima. No hace falta saber si hay algún estudio que hable sobre cuestiones catastróficas de las tormentas solares, pero creo que es algo en que los gobiernos del mundo deben poner mucho énfasis”, destacó.

Una alianza mundial

Van der Linden advirtió que es necesario crear una coalición mundial que busque mitigar los efectos de este fenómeno, cuyo impacto en las actividades de la humanidad e cada vez más notable e intenso.

“Es importante que nos organicemos para analizar cuáles serían las mejores medidas que podríamos tomar, a fin de garantizar un desarrollo sostenido que nos permita avanzar de donde estamos ahora a dónde queremos estar en el futuro; de aquí a unos 10 o 20 años más”, afirmó.

Agregó que esa alianza entre gobiernos, autoridades regionales, organizaciones no gubernamentales, y la sociedad en general, debe realizarse mediante un acuerdo global en materia de soluciones ecológicas que permitan un desarrollo sostenido para la población mundial. También abogó por actuar de manera unida para mantener la seguridad de la humanidad en el futuro. Ello significará dejar atrás ideologías, rivalidades, enemistades que sólo fomentan el divisionismo mundial en foros internacionales como la Conferencia de Durban, donde se discuten medidas para disminuir las emisiones de gases tóxicos que ocasionan el calentamiento global, y que representan un avance real para evitar una catástrofe ambiental de grandes proporciones.

Efectos devastadores en México

El especialista inglés destacó que las temperaturas globales son más devastadoras en diferentes zonas del planeta, entre ellas, en México, donde se ha registrado una drástica disminución en la frecuencia de los días frescos, y un aumento en las altas temperaturas durante las épocas invernales desde 1960. Alertó que las emisiones tóxicas han elevado las temperaturas hasta en 4 grados centígrados en la frontera con Estados Unidos, mientras que en el resto del país el aumento oscila entre 2.5°C a 3.5°C.  Reconoció que el cambio climático podría traer consigo un descenso en la precipitación pluvial de entre 5 y 10 por ciento, lo que afectaría cosechas como el maíz, principal cultivo de México, para el año 2050. Advirtió que, de seguir esta tendencia, las tierras de cultivo actuales bajarán su productividad entre 40 y 70 por ciento para 2030. También alertó que el cambio climático ocasionará ciclones tropicales más fuertes tanto en el Golfo de México como en el Pacífico debido al cambio climático.

Sin energía, alimentos
ni transportes

Aunado al calentamiento global, que ha desestabilizado las temperaturas en el planeta, estas tormentas solares afectarían a los satélites artificiales, cuya operatividad se basa en el eje magnético terrestre, trayendo como consecuencia un corte en el servicio de las telecomunicaciones y transportes.

Según fuentes informáticas, expertos como el astrofísico Marshall Masters, han denunciado la posibilidad de que fenómenos magnéticos desaten otras crisis como la interrupción en el suministro de energía, necesaria para que la humanidad pueda realizar sus actividades normales.

Jacco Van der Worp, otro astrofísico dedicado al estudio de amenazas espaciales, explicó que esta situación podría desencadenar un riesgo alimentario global, ya que las reservas de alimentos se descompondrían en un tiempo de 12 y 24 horas, por la falta de electricidad. Los cortes en la distribución del agua potable haría aún más difícil el panorama social.

Riesgos de adaptación climática

Por otra parte, la comunidad científica teme que el cambio climático se presente cada vez con mayor intensidad, afectando la capacidad de los seres vivos para adaptarse a nuevas exigencias ambientales que podrían conllevar a la extinción de especies, y a dificultar la vida del hombre a mediano plazo. Organizaciones como el Fondo Mundial para la Naturaleza han reportado la desaparición de especies en los últimos años y prevén la transformación de hábitats para fines del presente siglo ante el cambio brusco de temperaturas al que estará expuesta la vida del planeta.

Al respecto, la expedición marítima francesa Tara Oceans, que desde hace tres años investiga las consecuencias del calentamiento global sobre la biodiversidad y la vida marina, reportó la notable pérdida del plancton, necesario para el mantenimiento de la cadena alimenticia marina, debido al cambio climático y a la constante contaminación de los océanos.