Desencanto ciudadano

Teodoro Barajas Rodríguez

Morelia.- Si hubiese una alianza electoral entre el PAN con el PRD en Morelia no sería sorprendente porque no sería ni la primera ni la última vez que harían algo en ese mismo tenor, habida cuenta que hace unos años las ideologías no pasan de ser un cliché, un vago referente que a veces nos hace recordar que hay una izquierda y una derecha.

Hace un buen rato que los partidos políticos se han convertido en un tipo de franquicias que pelean electoralmente, aunque los cambios estructurales no lleguen, al final los reproches alcanzan a todos y de nueva cuenta se da vuelta a la página.

Las alianzas han significado un negocio rentable para los partidos chicos que así garantizan la sobrevivencia, aseguran su alimento que es el dinero.

En Morelia se registra un desencanto de parte de muchos electores que han visto cómo se anuló una elección por razones de criterios tan subjetivos como cuestionables, más dinero, desgaste y distractores se avecinan. Son reglas de un juego que no deja jugar.

La voluntad popular entonces es secundaria, muchos habrán de anular su voto, otros simplemente no acudirán. Sus razones tendrán y son respetables, como la resolución de los magistrados de la Sala Regional de Toluca.

PAN y PRD anuncian que es posible aliarse para derrotar al PRI, algunos perredistas han dicho que no pasará ese intento de aleación, la verdad no se ha escrito pero nada es descartable.

La elección extraordinaria que se efectuará el día 3 de junio tiene componentes atípicos, para empezar será la primera vez que la capital michoacana esté investida de tal evento, PAN y PRI se presentan como las organizaciones más sólidas porque el PRD quedó marginado, al fondo en un lejano tercer lugar.

Diez años en el poder en Michoacán y no forjaron ni consolidaron cuadros propios para aventurarse al triunfo, en las últimas contiendas municipales en Morelia el Sol Azteca se decantó por el ex priista Sergio Magaña Martínez, posteriormente por el empresario Eloy Vargas, al final ambos integrantes de la iniciativa privada michoacana fueron derrotados.

En el último ejercicio el PRD acudió a la cita electoral con quien fuera secretario de Turismo en los mandatos de Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy Rangel, Genovevo Figueroa Zamudio, quien retrocedió luego de haber sido gobernador, líder del Senado y legislador por los colores priistas. El final fue una estrepitosa derrota que prácticamente ha jubilado al ex mandatario michoacano.

Hasta este momento se ignora quiénes serían los abanderados por los tres partidos, incluso si habrá alianza con los diminutos membretes tradicionalmente pajes de los más grandes. Marko Cortés fue el candidato panista, Wilfrido Lázaro por el tricolor y Genovevo Figueroa por el PRD, tales fueron los protagonistas, ahora también la incertidumbre se apodera de los partidos, seguramente la votación registrará un descenso.

También se ha mencionado que es factible que el PRD pueda aliarse con el PRI, entonces todo puede ocurrir, aunque parezca algo absurdo estilo kafkiano. Las identidades partidarias se diluyen, de ahí porqué resulta explicable el desencanto ciudadano.