Entrevista a Víctor Alarcón/Profesor-investigador de la UAM Iztapalapa
Nora Rodríguez Aceves
“Se juega feo, pero se gana”, es una metáfora futbolera que explica el porqué Josefina Vázquez Mota no ha participado en los debates públicos o no responde a las descalificaciones o acusaciones de Santiago Creel y Ernesto Cordero. Ella hizo exactamente eso, al no exponerse a los debates defendió su ventaja, no tiene por qué exponer más de lo que ya hizo, pues de alguna manera los niveles de compromiso, los niveles de acuerdo, los ha venido generando con los militantes panistas, que son sus votantes en este momento, precisamente con el activismo, con las giras, con las negociaciones y eso, también forma parte del ejercicio que debieron haber cubierto tanto Cordero como Creel, señala Víctor Alarcón Olguín, profesor-investigador de la UAM-Iztapalapa.
Los debates que vienen
“En ese sentido, frente a los medios de comunicación quizá puede verse que hacia fuera, hacia lo que sigue adelante, por hoy Josefina Vázquez Mora, si resulta la ganadora de la próxima jornada del domingo, mostró una cosa que es muy importante: ¿cómo enfrentará en debates a Andrés Manuel López Obrador o a Enrique Peña Nieto? Porque está dando una pauta para que el PRI haga lo mismo en los debates presidenciales si es que ella enfrentase a Peña Nieto, entonces ya encuentra una misma receta de no darle el valor debido a los debates, en sí mismo está mostrando que para ganar no se necesita debatir, para ganar simplemente es comunicar ideas para ganar es fundamentalmente transmitir al público lo que uno quiere y hacer caso omiso de cualquier tipo de crítica, cualquier tipo de situación, entonces tener candidatos autistas, es el peligro que también puede desvirtuar la figura del debate para que sea un elemento de mayor profundidad de mayor riqueza para que el ciudadano el elector pueda tener la información necesaria y desde luego también habla de las virtudes y las capacidades personales que tienen estos candidatos estos aspirantes”.
Alarcón Olguín señala que este es un punto a corregir, desde luego lo criticaron con toda insatisfacción Santiago Creel y Ernesto Cordero, de que no hubo debate a pesar de la insistencia.
“Una línea que es importante señalar es el apoyo implícito que Creel generó a Ernesto Cordero reconociéndole su trayectoria, su capacidad como actor de la economía y minimizando en ese sentido a Josefina Vázquez Mota, el día del debate, es un dato importante que hay que ver”.
Víctor Alarcón señala a Siempre! que “el escenario se ha complicado al cierre de la precampaña, sin duda alguna, todos los precandidatos están tratando de quemar sus últimos cartuchos, por decirlo así, el tono que empezamos a notar al momento en que estamos haciendo esta entrevista, se ha encrespado, los diferendos, particularmente, entre Ernesto Cordero y Josefina Vázquez Mota, han tomado un tono más fuerte, al grado de la presentar una denuncia ante la Procuraduría General de la República por espionaje telefónico”.
“Las evidencias que se están mostrando en algunos diarios de circulación nacional acerca de la compra de voto que también se le está aludiendo a gente de Ernesto Cordero en algunos estados de la República y, el tono insistente que se dio en el segundo debate sostenido entre los precandidatos tanto por Josefina Vázquez Mota como por parte de Santiago Creel en relación a que no debe haber ningún tipo de intervención dirigida por parte de funcionarios públicos y de funcionarios de partido tratando de coaccionar o inducir al voto a favor de alguno de los precandidatos, pueden complicar el proceso de unidad del partido de manera natural, que no permitan una reconciliación o una buena superación de los conflictos como ocurre en toda contienda”.
“Pueden ser factores que presionen mucho dependiendo como se documenten, de hecho algunas de estas ya han sido presentadas desde días anteriores a la Comisión Nacional de Elecciones encabezada por José Espina y en ese sentido esperemos que de aquí a la celebración de los comicios el 5 de febrero, el domingo, esas situaciones sean excepcionales y que no marquen una regla que obligue a la degradación del conflicto que supere o que deje por fuera a la Comisión Nacional Electoral y que eventualmente pudiera incluso provocar que se tuviera que tomar una decisión de mano, por llamarlo así, por parte del Comité Ejecutivo Nacional o por la Comisión Política del partido donde entonces la elección se pudiera ir por otra ruta”.
Este es el punto importante, ver un poco esa ruta crítica, y en segundo lugar considerar y valorar de manera muy puntual, muy específica, el daño a la imagen misma del PAN a esa tradición que hasta ahora han podido retener a diferencia de otros partidos políticos de poder seguir celebrando comicios, aunque en este caso con militancia de adherentes y de activos, pero que sigue siendo un elemento muy importante para la credibilidad de la democracia interna en los propias instituciones y para lo que el efecto genera en términos generales al sistema electoral”.
El PAN celebró el pasado 31 de enero, su segundo debate entre los precandidatos Ernesto Cordero Arroyo, Santiago Creel y Josefina Vázquez Mota, rumbo a la contienda interna, a celebrarse este domingo 5 de febrero, donde se definirá quién será el candidato a la presidencia de la república por este partido.
Sin ánimo de debatir
En este marco, el especialista en partidos políticos de México y procesos electorales señala que “Cordero y Creel se mostraron insatisfechos, posterior al debate, de que Josefina Vázquez Mota no fue con ningún ánimo de debatir, ella se mantuvo en actitud cerrada fundamentalmente dirigiéndose al auditorio y en ese sentido no hubo condiciones para hacer un debate”.
De alguna manera, “Josefina siguiendo un poco la ortodoxia que marcan los manuales de comunicación política y se ve que siguió muy puntualmente las enseñanzas del señor Antonio Solá, pues dijo, conserva tu ventaja, no aceptes ninguna provocación, solamente contestó en una ocasión a una alusión directa de Ernesto Cordero, cuando ella mencionó el dato de que el presidente Felipe Calderón avaló su labor como coordinadora parlamentaria, señalando que tuvo un nivel de asistencia a las sesiones de 85 por ciento, muy distinto a lo que le estaba aludiendo Ernesto Cordero, él señaló que solamente asistió al 6 por ciento de las votaciones, lo cual implica que la diputada Vázquez Mota pasaba lista y después se iba del Palacio Legislativo, eso es lo que le está reclamando Ernesto Cordero con esos datos, y eso es lo que trato de sacarle a relucir respecto a su compromiso a su presencia en San Lázaro”.
“Desde luego —dice Alarcón Olguín— me pareció excesivo que solamente ese fuera el único punto importante de contraste o de ataque directo por parte de Ernesto Cordero, incluso, Santiago Creel fue mucho más directo mencionando que Josefina no fue suficientemente panista en la construcción de sus administraciones, de sus equipos de trabajo, diciendo que no había subsecretarios panistas, no había oficiales mayores panistas y en cambio él sí lo hizo cuando fue secretario de Gobernación”.
Otro punto de ataque importante, “fue cuando Creel le dijo que ella ha venido manejando la agenda de género, diciendo que tú eres mujer y en realidad no tuviste en tu equipo colaboradoras mujeres, salvo una subsecretaria, por tu paso por la Secretaría de Educación Pública y por tu paso por la Secretaría de Desarrollo Social, entonces, ¿dónde está tu compromiso con el tema de género?, que esa ha sido su bandera, entonces curiosamente Creel fue mucho más eficaz en mostrar ciertas debilidades de Josefina Vázquez Mota”.
En ese mismo tono, da su opinión sobre el comentario que hiciera el día del debate Santiago Creel en relación a que Josefina Vázquez Mota es la puntera en los sondes de opinión, pero “en el PAN las encuestas nunca han podido predecir nada” y pudiera haber sorpresas en los resultados: “Está derivado en dos situaciones: que la coacción o la compra del voto se manifieste de manera sorpresiva, que realmente sí se muestre un resultado que no esté dado en función de las respuestas que los militantes consultados hasta ahora por las casas encuestadoras o por los diarios de circulación nacional muestren una orientación de un voto que a la mejor sí originalmente puede mostrar una simpatía hacia un precandidato en concreto, pero que en la práctica muestre realmente que haya habido o pueda dar pauta a que haya habido una injerencia o que se esté dando un giro a esa injerencia por parte de esta situación que puede ser denunciada o enfatizada a nivel de estribillo casi diríamos sorprendente de cómo remataba Josefina todas sus intervenciones de votar libre el próximo 5 de febrero, esa sería la posibilidad no remota de que esta elección se pueda volver una elección mucho más estrecha”.
“Ahora si el militante panista en estas condiciones, porque si comparamos esta elección con lo que pasó en la de 2005 o incluso con la del 1999 porque muy poca gente se cuerda que Vicente Fox también fue sujeto a un proceso electoral, aunque él fuera el precandidato único, de todos modos se consultó a la base electoral panista y tuvo un resultado que precisamente le dio el aval respecto a su nombramiento en la Comisión Nacional panista de 99”.
Efecto bola de nieve
El investigador de la UAM-Iztapalapa recuerda que “la elección del 2005 también tuvo problemas, se aludieron compra de votos, acarreo, donde incluso Santiago Creel puso en riesgo la elección diciendo que Felipe Calderón había hecho operaciones en el Estado de México, en Veracruz, y en otros lados, de coacción y compra de voto, en ese momento la elección estuvo a un punto de descarrilamiento, de desconocimiento, ante la situación sorpresiva de como Felipe Calderón resultaba ser el candidato que se alzaba con la victoria en la primera etapa de lo que se llamaba entonces, la jornada electoral, que se divida en tres, dividiendo al país en tres regiones”.
Sin embargo, ese efecto dominó, ese efecto bola de nieve, impactó de una manera tal, rompe todas la previsiones marcadas en las encuestas mismas que daban en un primer momento una ventaja aunque quizá más estrecha menos manifiesta a favor de Santiago Creel en ese entonces y dejando en un tercer lugar a Alberto Cárdenas, pero ese vuelco, ese cambio, significo que muchos de los militantes activos y adherentes tuvieran un nivel de participación muy escasa, porque Felipe Calderón ganó a penas con poco más de 300 mil votos la elección para generar esa mayoría absoluta que le pedía en ese entonces el estatuto.
Y lo que vemos ahora “que a pesar de que estamos hablando de un poco más de 300 mil militantes activos y un millón 600 mil militantes adherentes, los mismos precandidatos están reconociendo que no habrá un nivel de participación tan amplio, porque también el propio padrón electoral panista, aunque es de escrutinio público es un padrón que tampoco tiene mucha certeza en algunas áreas, en algunas cosas, también es un punto de conflicto de que se inflo el padrón o sea algunos quizá ahora podrían aludir en algún momento dado que esos padrones no son auténticos, porque hubo incorporaciones de último momento en varios estados del país, hay que tomar en cuenta que el PAN en algunos estados de la República tienen más militantes que en otras entidades, no en función del tamaño curiosamente sino porque son los estados gobernados por los panistas, por ejemplo en términos de militantes hay estados que son poderosísimos como es Guanajuato, que tiene al gobernador Oliva, uno de los apoyadores concretos de la candidatura del ex secretario de Hacienda hace sospechar que en ciertos estados, donde tiene el apoyo de los gobernadores, la posibilidad de orientación hacia un voto masivo o como paso ahorita la denuncia con el gobierno de Sonora justamente con el secretario de gobierno que fue denunciado por esta grabación donde pide el voto a los panistas, el gobernador de Baja California —José Guadalupe Osuna Millán— que también es un estado de fuerte militancia panista donde el gobernador también manifestó su apoyo formal a Ernesto, ese es el problema que hasta ahorita si se sondea esta preferencia de base, esa es la parte sorpresiva que está rompiendo con la estructura de campaña que hasta ahorita preveía que Ernesto Cordero quizá tuviera una ventaja comparativa y eso es quizá lo que tiene molesto a Cordero de que a pesar de que ha tenido mítines de que a pesar de que ha tenido una serie de cosas no está siendo correspondido con la reacción que está teniendo el militante de base que quizá sí está molesto con esta imposición con esta forma en que los funcionarios públicos con la forma en que los dirigentes estatales este tratando de impulsar forzosamente una inclinación de la balanza a favor de Cordero”.
Sin embargo, “ahí mediremos exactamente sobre todo con los apoyos manifiestos de gobernadores o de líderes estatales qué tanta disciplina presenta el militante panista en función de lo que le piden sus dirigentes. Eso será una prueba interesante, 2005 nos dio una idea de que el militante panista puede dejar de lado la cultura de la línea, y también sería un elemento muy importante que habla de la salud política de este partido independientemente de que tenga posibilidades o no para ganar en la elección de julio próximo”.

