Hay casos, raros e increíbles por cierto, cuando una persona en escasos segundos toma la decisión que en definitiva salva la humanidad de una catástrofe irreparable. Lo que sucedió en Rusia la noche del 26 de septiembre de 1983 puede servir de elocuente ejemplo de lo dicho.

Stanislav Petrov es coronel retirado del ejército ruso. En 1983 el entonces teniente coronel Petrov sirvió en las tropas soviéticas de defensa espacial, concretamente en el puesto de operaciones del sistema Sérpujov-15 encargado de avisar sobre ataques de misiles enemigos. Aquella noche del 26 de septiembre Stanislav Petrov fungió como jefe de turno en el puesto de mando del sistema. La noche transcurría tranquilamente pero de repente los indicadores automáticos del sistema comenzaron a centellear avisando el lanzamiento desde territorio estadounidense de cinco misiles norteamericanos Minitman con diez ojivas nucleares cada uno con dirección a la entonces Unión Soviética.

No se sabe a ciencia cierta que fue lo que pasó en aquel momento por la mente de Stanislav Petrov. Pero es evidente que él se daba cuenta de que el ataque nuclear estadounidense contra el territorio soviético significaría, sin duda alguna, el inicio de una guerra nuclear. Seguramente se imaginó en cuestión de segundos las masivas destrucciones y muertes que esto causaría.

Y es cierto que estos escasos segundos le fueron suficientes para cerciorarse de que el sistema había fallado, tomar la decisión de hacer caso omiso a los avisos de los indicadores automáticos y no dar la señal de alarma que significaría, desde luego, poner en estado de combate las tropas soviéticas de misiles pertrechados con ojivas nucleares.

La respuesta que Stanislav Petrov tuvo ante esa situación fue agradecida apenas hace unos días. El militar retirado ruso recibió a finales de febrero de este año un galardón especial de la organización social internacional Asociación de Ciudadanos del Mundo.

Fue en el cuartel general de la ONU en Nueva York donde le fue entregada la figura hecha de cristal de roca conocida como Mano que Sostiene el Globo Terráqueo con la leyenda que dice Para el Hombre que Previno la Guerra Nuclear. El presidente de la mencionada asociación Douglas Mattern dijo en la ceremonia de la entrega del galardón: Estamos en deuda impagable con el coronel y tenemos que agradecer su sensata reacción porque en un momento crítico de la historia él demostró serenidad y prudencia. Es increíble que en su patria, la antes Unión Soviética, ahora Rusia, Petrov no obtuvo ningún reconocimiento por haber salvado a la humanidad del peligro de una guerra nuclear.

Inicialmente, dijo Stanislav en una entrevista, me prometieron una condecoración, pero después fue nombrada una comisión para investigar los detalles de lo ocurrido y encontró varios errores en mis acciones. Lo que sucedió fue que las personas por cuya culpa fallaron los indicadores del sistema de avisos, formaron parte de esta comisión. ¡Vaya errores que salvaron al mundo