Alexander Serikov

Esta semana se habrá llevado a cabo en Rusia el cambio de poder, más bien el intercambio. El primer ministro Vladimir Putin, ganador de las elecciones presidenciales celebradas el 4 de marzo último, ocupará el cargo de primer mandatario y el presidente Dmitry Medvédev se convierte en primer ministro. Esto sucede en el Kremlin sede del alto poder del país.

Según la nueva ley federal sobre las elecciones presidenciales, el mandato presidencial durará 6 años (antes 4 años) y el nuevo presidente asume el poder 30 días después de que el Comité Electoral Central anuncie su victoria.

La solemne ceremonia comienza al mediodía y dura menos de una hora. El ganador de las elecciones entra en un coche al Kremlin por la puerta de la famosa torre Spásskaya (San Salvador) en la Plaza Roja mientras que al salón más lujoso del Kremlin introducen la bandera nacional de Rusia y el estandarte del presidente.

Los invitados se colocan frente al podio. Esta vez fueron invitados cerca de dos mil personas. Vladimir Putin recibe entonces los tres símbolos del poder del Estado: la Constitución del país, el estandarte presidencial y el Signo del Presidente que es una cruz de oro cubierta de esmalte de rubí con la imagen del escudo nacional y una cadena de oro de 17 eslabones. En el dorso de la cruz aparece la inscripción utilidad, honor y gloria.

Según el protocolo del Estado, el nuevo presidente pone la mano derecha sobre la Constitución y pronuncia el juramento al pueblo en que promete respetar y salvaguardar los derechos y libertades del hombre y ciudadano, observar y proteger la Constitución, proteger la soberanía e independencia, seguridad e integridad del Estado y servir fielmente al pueblo. Terminada la ceremonia del juramento, el presidente del Tribunal Constitucional anuncia que el presidente asumió el poder.

En la ceremonia de la toma de posesión están presentes las personas de confianza de Putin que participaron en su campaña electoral, líderes de la oposición, los candidatos a la presidencia que no lograron triunfar en las elecciones, representantes del cuerpo diplomático, destacadas personalidades de la ciencia y cultura rusas y los invitados extranjeros. Cada uno de ellos recibe como obsequio una medalla de recuerdo. Luego a los invitados se les ofrece una comida en la que se sirven platillos de la cocina típica rusa.

En fin, la ceremonia de la toma de posesión de Valdimir Putin según voceros de la administración presidencial, se calcula en aproximadamente unos 12 millones de rublos, es decir unos 400 mil dólares.