Entrevista a Rosario Robles/Exjefa del gobierno capitalino

Moisés Castillo

“PAN y PRD vienen hoy con la navaja muy afilada”, dijo el candidato presidencial priista Enrique Peña Nieto. Y precisamente eso pasó en el debate que organizó deficientemente el Instituto Federal Electoral.

Tanto la panista Josefina Vázquez Mota como el perredista Andrés Manuel López Obrador sacaron los “cuchillos bien afilados” y lanzaron críticas contra el puntero de las preferencias electorales. Era una estrategia lógica atacar al exgobernador del Estado de México, ya que les lleva una ventaja de más de 20 puntos porcentuales. Sin embargo, no pudieron soltar un gancho fulminante que lo hiciera tambalear.

A pesar del formato rígido y con una producción insufrible se vio un debate y una confrontación principalmente entre Peña Nieto y López Obrador. Vázquez Mota se perdió en sus ataques poco afortunados y en su tono discursivo de superación personal.

En tanto, Gabriel Quadri sin nada que perder, se presentó como un “candidato ciudadano” ofreciendo propuestas articuladas y en ciertos momentos pareció un “escudero” al defender al candidato priista en temas como los segundos pisos y en la modernización de Pemex. Le metió algunos raspones al perredista cada vez que el tabasqueño se lanzaba contra el aspirante del tricolor.

Todos vencedores

Al final del debate todos se proclamaron vencedores. Enrique Peña Nieto fue mesurado y afirmó que la gente tendrá que decidir quién ganó el primer encuentro entre los candidatos a la Presidencia de la República.

“No me compete a mí juzgar sino a la sociedad mexicana. Serán ellos y sólo ellos quienes determinen a través de su voto… Lamenté tener que dedicar parte del tiempo a tener que responder a señalamientos de dos de los adversarios, pero tratando siempre de anteponer en todas mis participaciones la propuesta.”

Por su parte, Andrés Manuel López Obrador aseguró que ganó el debate porque a su movimiento le asiste la razón. Justificó sus ataques contra el priista y su plan de exponer pocas propuestas.

“No fueron ataques, describí la realidad. Nos fue muy bien y cumplimos el propósito de informar, porque hay una falta de información porque muchas cosas no se saben en nuestro país… El objetivo nuestro es informar sobre quién es Peña Nieto y que quienes mandan en este país quieren imponerlo para seguir haciendo sus jugosos negocios.”

Asimismo Josefina Vázquez Mota afirmó que pudo contrastar su proyecto con el de otros candidatos.

“Fuera de este formato, que se ha reiterado es muy rígido, para mí fue una gran oportunidad, pude hacer propuestas considerables y al mismo tiempo hacer este debate de contraste, donde señalé con cifras duras, hechos reales.”

Finalmente, el candidato de Nueva Alianza, Gabriel Quadri, presumió que fue el único que ofreció propuestas y lamentó la actitud de sus contrincantes.

“Creo que me ignoraron, no sé si afortunada o desafortunadamente para mí. Creo que desafortunadamente para mí, sinceramente, y para la ciudadanía, porque a mí me hubiera encantado debatir y contrastar con detalle.”

Quizás uno de los momentos más polémicos fue cuando López Obrador acusó a Peña Nieto de favorecer a Televisa tras pagar presuntamente más de 691 millones de pesos por servicios de promoción.

Sin embargo, el candidato priista contraatacó y expuso claramente:

“Insuficiente el tiempo para realmente responder a quienes hoy han dedicado parte de su exposición o buena parte a lanzar ataques a un servidor. Yo le diría a Andrés Manuel: si la televisión hiciera presidentes, usted sería presidente, porque en su gestión como jefe de gobierno destinó más de mil millones de pesos, y aquí tengo los documentos que lo acreditan.”

De acuerdo con del Centro de Análisis e Investigación “Fundar”, entre 2005 y 2010, el gobierno del Estado de México gastó en Comunicación Social 646.6 millones de pesos. Mientras tanto, el gobierno del Distrito Federal gastó en el mismo periodo mil 833 millones de pesos. Es decir, casi el triple. Por otro lado, el gobierno federal gastó 16 mil 566 millones de pesos en Comunicación Social. Es decir, casi 25 veces más que el Estado de México en el mismo periodo.

Para Rosario Robles, exjefa del gobierno capitalino, el plan era bajarle puntos a Peña Nieto, pero tanto Vázquez Mota como López Obrador se llevaron la sorpresa de que el priista respondió a los cuestionamientos y además ofreció soluciones en temas importantes como la seguridad pública y la generación de empleos.

“Llegó ahí a defender su ventaja, a decirles que ‘por supuesto que puedo gobernar este país’. Llegó a decir que tiene la capacidad de establecer un diálogo con todos. Logró su objetivo de defenderse y proponer. Los otros dos, que lógicamente su apuesta era tumbar al puntero, no lo lograron y salieron con las manos vacías.”

Ejercicio democrático

 

¿Qué le pareció el debate? ¿Se cumplieron las expectativas?

 

Evidentemente el debate es muy importante porque es un ejercicio democrático que vale mucho la pena, ya que permitió que estuvieran los cuatro candidatos en condiciones de igualdad presentando sus propuestas, contrastándolas y esto le da elementos al electorado para tomar decisiones. Sobre todo para aquellos que todavía no han decidido por quién votar y están en ese rango de indecisión. En ese sentido, es un ejercicio importante independientemente de los problemas que tuvo el debate en cuestiones de producción y la manera en como fue transmitido. Pero en el fondo creo que fue un ejercicio muy valioso y qué bueno que un porcentaje muy alto de mexicanos lo pudo ver, según los ratings que se han publicado. Siempre establecí que había la apuesta de los dos contendientes que van por debajo de las preferencias electorales ¾sin tomar en cuenta a Quadri¾ en el sentido de que Enrique Peña Nieto no podría sostener un debate, no tenía la capacidad de debatir y rebatir, confrontar, defender propuestas. La panista y el perredista abarataron su discurso y nunca se imaginaron que el mexiquense iba a estar a la ofensiva. De hecho por eso López Obrador exigía una cadena nacional para que todo el mundo viera el debate y el momento estelar para exhibir que Peña Nieto era “incapaz de articular frases y propuestas”.

¿Cómo califica la participación de Josefina Vázquez Mota?

Al principio muy bien, lo que pasa es que la vi perdiendo fuerza a lo largo del debate, desapareció. Se concentró más en los ataques reiterados y no en sus propuestas. Llegó un momento en que la discusión básicamente fue entre Peña Nieto y López Obrador. También tiene que ver por el formato del debate, impide un cara a cara. Es decir, cuando le tocaba a un candidato responder la réplica o hacer su réplica ya había pasado media hora el cuestionamiento. Es un formato que no se presta mucho para contestar de inmediato. Pero ella no respondió cuestiones importantes. ¿Por qué propone cosas que su partido no ha impulsado en 12 años en el poder? También cuestiono que se presente como una candidata “ciudadana” cuando ella ha estado en los círculos del poder, en lo cargos de más alto nivel. Fue secretaria de Desarrollo Social y de Educación. Fue líder de su bancada en la Cámara de Diputados, entonces pertenece al grupo de poder de este país. Más allá de algunas propuestas como la escuela de tiempo completo, toda esta visión represiva y de seguir en la lógica de la estrategia antinarco simplemente no la comparto.

¿Le funcionaron a Andrés Manuel López Obrador los ataques directos contra Enrique Peña Nieto?

Esperaba esa actuación de López Obrador, iba a dedicarse a atacar, era lógico. Pensé que en algún momento sacaría algún tipo de información que luego presenta como verdades a medias. Fue predecible que siguiera esa estrategia en un debate de esta naturaleza. Su discurso es reiterado y gastado. Es el mismo que hemos escuchado una y otra vez. Es un discurso que no le dice mucho a los jóvenes que van decidir esta elección y que no le habla a las mujeres que son definitivas para el 1 de julio. Pienso que López Obrador perdió una gran oportunidad.

¿Quadri ganó el debate como lo señalaron varios medios de comunicación?

Su desempeño fue muy bueno. Es un hombre que tiene una formación académica que es capaz de proponer y plantear una serie de situaciones favorables para el país. Lo que pasa es que es muy fácil ser ganador cuando no estás en la competencia, y pues nadie te voltea a ver. En ese contexto navegas con facilidad y es muy simple presentarte como candidato “ciudadano” cuando en realidad ningún ciudadano de este país puede ser candidato presidencial. No es cierto que sea un “ciudadano”, ahora es un político que tiene el apoyo y el respaldo de un liderazgo como el de Elba Esther Gordillo. Hubo situaciones en las cuales él no se vio en la necesidad de aclarar, situaciones que están ahí detrás de su candidatura y no las aclara porque no está en la competencia real, nadie lo voltea a ver. En esa circunstancia él puede ser el ganador del debate.

Dos propuestas esperanzadoras

¿Hubo alguna propuesta que le sorprendiera, viable o factible?

Me gustaron dos propuestas de Enrique Peña Nieto. La de seguridad social universal. Esto me parece muy importante, ya que estamos hablando de que todos los mexicanos tengamos acceso a la seguridad social y él vincula esta propuesta a la cuestión de salud, alimentación y seguro de desempleo. La segunda es replantear la estrategia en materia de seguridad. Peña Nieto dijo que el gobierno no ha escuchado las voces que piden un cambio en el plan antinarco y él habla de replantearlo. Esos dos aspectos a mí me dan esperanza. Estamos hablando de un enfoque social en el que todos los mexicanos sin distinción tengan acceso a un piso básico de seguridad social. Y que en materia de seguridad pública habrá un replanteamiento de esa estrategia que ha llevado a México a tener 60 mil muertos.

¿Qué haría si estuviera en la posición de Vázquez Mota y López Obrador, que no logran levantar en las preferencias electorales?

Obviamente la tienen muy difícil y ellos en el debate hicieron lo que tenían que hacer: tratar de bajar al puntero, tratar de que perdiera puntos. Es algo natural, estaban en la estrategia adecuada pero fallaron en el discurso. En el caso de López Obrador es un discurso viejo y al final de cuentas atacó pero no fue un golpe certero y finalmente se le revirtió. Ha tenido una campaña consistente, ha ido poco a poco remontando negativos, aumentando su simpatía, pero no le da para acercarse a otro perfil de personas. Josefina se desplomó y no le veo la fuerza y el empaque para darle una vuelta a esta elección.

 

¿El electorado está dando un voto de castigo a los dos sexenios panistas?

Josefina carga con ese fardo que es el gobierno calderonista. Este último sexenio que nos ha dado más violencia, más pobreza y más desigualdad. Y está en una situación muy difícil porque no se puede deslindar del gobierno porque su partido no lo permite y además ella fue parte de esta administración. Por otro lado, quiere aparecer como ciudadana como si no tuviera esta carga panista. Eso es imposible porque todo mundo sabe que es representante del panismo. Sobre todo lo saben las mujeres porque alude mucho a nosotras y ya no queremos más de lo mismo. No queremos seguir recogiendo los cadáveres de nuestros hijos. Ya no queremos ver masacrados a nuestros jóvenes y ella tendría que salir a decir que está totalmente en contra de la estrategia calderonista.

¿El debate ayudó o confundió más al electorado rumbo al 1 de julio?

Pienso que no cambian las circunstancias cuando hay una ventaja tan grande como la que tiene Enrique Peña Nieto. Realmente los debates los ve la gente que de alguna manera está decidida por quién va a votar. Los indecisos creo que salieron igual, tal vez un porcentaje de ellos se van con Quadri. No creo que haya una modificación significativa en las tendencias electorales. Salió todo mundo en la misma circunstancia en la que entró. Peña Nieto defendiendo su ventaja y los otros tratando de remontar. Para mí la pelea en el debate no estaba tanto en el puntero sino quién se quedaría con el segundo lugar, y siguen empatados.