Entrevista a Alberto Padilla Arias/Profesor-investigador de la UAM Xochimilco

Nora Rodríguez Aceves

Hay que evitar politizar las universidades, por una razón muy elemental, su función y su misión es formar cuadros, es hacer investigación, es difundir la cultura y no convertirlas en arena política, como dice el rector de la UNAM, José Narro.

Además, sería contraproducente enemistarse con un candidato que llegue a la Presidencia, porque puede marcar toda una política contra la institución, aunque en el discurso se niegue, pero lo cierto es que hay una condición de desventaja total respecto al poder central, entonces las universidades no pueden darse el lujo de confrontar el poder público, lo que tienen que hacer es mantener una actitud neutral en estos casos y hacer su función que es formar conciencia crítica, asegura Alberto Padilla Arias, profesor-investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Xochimilco.

Es casi imposible evitar que los partidos capitalicen el movimiento de los jóvenes universitarios, porque “en la política hay una tendencia a que los partidos políticos, cada quien, quiera llevar agua a su molino, esto es parte de la política, pero es donde los jóvenes deben tener mucha claridad y  mucha habilidad para analizar sobre cuál es el perfil más adecuado para la conducción del país, por su trayectoria, por las implicaciones que tiene de momento, entonces esto de capitalizar los hechos ocurridos en la Ibero no es tanto en términos éticos como pudiéramos juzgarlo sino en términos pragmáticos, la política es política y cada quién tratará de capitalizar esto, sin embargo, nosotros los maestros en las universidades tenemos que ser muy éticos y ser muy congruentes, pero en la política esto sería como  pedirle peras al olmo”.

El pasado 21 de mayo, Excélsior publicó una entrevista a José Narro, donde señala que “las universidades no pueden estar alejadas de los temas que le interesan al país, eso sería ir contra la naturaleza de la universidad pública; sin embargo, yo creo que las universidades no deben ser la arena política, no deben ser el foro para hacer el proselitismo político, no es ese el espacio…”

“Las universitarios tienen todo el derecho de reunirse, analizar, discutir, considerar, ver a sus candidatos y a escuchar a quienes no conocen, pero la pregunta es ¿debe ser la plaza universitaria el espacio? Mi opinión es no…”.

 

Coincidencias con Narro

El especialista en educación, cultura y procesos sociales coincide con el planteamiento  del rector de Narro, y dijo que si algo ha hecho éste es política y es un hombre  que sabe dónde puede hacer política y dónde tiene que hacer su trabajo académico. Las universidades son espacios académicos, son espacio de reflexión, de análisis, no las podemos politizar, no es que no haya política en las universidades, evidentemente cada quien puede pertenecer a un partido político, como puede pertenecer a un grupo religioso o a una secta satánica o lo que quiera, pero lo cierto es que ahí se pretende la formación, primero de profesionales y segundo de investigadores”.

“Es el caso de la UAM, por ejemplo, la investigación implica eso, es una forma de conciencia  interracional en donde no puedes tomar partido y menos tratar de jalar agua a tu molino. En la UAM efectivamente ha ido Andrés Manuel López Obrador, pero también Cuauhtémoc Cárdenas, recientemente fue Manuel Espino y hubo chicos que se opusieron radicalmente y dijeron: no queremos que venga, se les pidió que respetaran, que tuvieran cuidado con eso, realmente no convenía su visita, sin embargo, él aceptó ir bajo su responsabilidad acudir,  dijo: yo voy, no me importa que me griten, y fue, y se armó la bronca y le gritaron y le dijeron de qué se iba a morir, pero aguantó la refriega y salió ahí con todas las advertencias del caso, yo les había pedido respeto, cuidado, digo si lo estamos invitando no es para insultarlo, es para que se platique con él y se les advirtió a los jóvenes y se les pidió, pero siempre hay quien no acata las reglas, y le gritaban casi con un odio personal, pero Espino lo entendía,  son jóvenes, los jóvenes tienen derecho a hablar, hay que reconocer que tuvo los pantalones para meterse ahí, en camisa de once varas, sabiendo que no lo iban a caravanear, pero nosotros como autoridades universitarias sí tenemos la obligación de respetar a quien llegue o a quien nos visite”.

“En la Universidad somos muy respetuosos, en el aula se habla sobre los candidatos, pues estamos en el área de sociales y humanidades, entonces se discute constantemente asuntos de la política nacional, pero hay quienes se oponen a López Obrador, a Vázquez Mota, a Peña Nieto, es decir, hay de todos los puntos de vista y posiciones, no es una sola posición, lo cual es muy saludable para bien de las universidades, pues ahí se da una respuesta fundamentalmente racional, sabemos que los partidos políticos tiene sus formas de coptar a los cuadros, y eso evidentemente ya dentro de la Universidad no resulta lo más agradable”.

 

Sorprendió el movimiento estudiantil

Para el investigador, “fue una muy grata sorpresa el movimiento estudiantil,  como ha ido derivando hacia más, la verdad es que no esperaba que hubiera esa respuesta, por ejemplo antiPeña, a mí también me desconcertó, fue una cuestión un poco extraña, al principio sí daba la impresión de manipulación, pero en la medida en que va pasando el tiempo hay un gran temor en estos sectores, por lo que ellos han manifestado de que regrese la irracionalidad, el autoritarismo, el abuso del poder y la corrupción, que a todas luces sigue primando en estos sectores de la política y de un partido que desgraciadamente no se ha transformado, no se ha modificado, entonces es algo que nosotros veíamos, pero a veces no puede uno utilizar el aula para estar impulsando un proyecto de esta naturaleza, lo puede hacer uno en alguna conferencia, criticar de alguna manera, pero no, esto ha sido producto de la toma de conciencia de los jóvenes a partir de ver la inconsistencia de lo que se informa en los medios y lo que acontece en la realidad, lo cual les ha generado un malestar de que se esté mal informando a la sociedad y mal informando por parte de los medios, para conducir hacia determinada clase política o a un sector específico o a un grupo con intereses muy especifico,  entonces es loable, es realmente importante lo que se está dando, porque esto puede salvar a México, que la juventud esté consciente y esté dispuesta a darle un giro a que la corrupción no es connatural a México sino que es algo que ha sido producto de un cáncer que está devorando las entrañas del país”.

En su análisis, el académico de la UAM asegura que en las campañas de los candidatos presidenciales no se ven claras y concretas las propuestas, tanto para la educación como los jóvenes universitarios, y “desgraciadamente las veo tan generales que por eso no están llegando a ellos,  por eso  sienten desconfianza porque no ven con claridad qué y en qué aspecto los beneficiará, yo entiendo que López Obrador no puede especificar, pero dice: voy a crear tantos millones de empleos, sí pero dime cómo y dónde y cómo está el asunto, porque ofertar todos podemos hacerlo. Peña Nieto dice: les voy a dar seguridad y les voy a dar bienestar y esto es un desastre y la inseguridad, pero cómo, no hay elementos y en particular para los jóvenes de claridad, de cómo se les va a insertar, de cómo se les va a hacer participar en el ámbito educativo, por eso se sienten totalmente ajenos a los planteamientos que están haciendo los candidatos presidenciales, desgraciadamente es tan frío su discurso, voy a traerles a ustedes todo lo que necesitan, sí pero a  ver barájenmela más despacio. ¿Qué es lo que yo necesito? Ellos se sienten muy alejados, yo lo veo muchas veces en la política interna de la Universidad, cuando los candidatos a rector, a directores de división, llegan y hacen planteamientos, la verdad, es que muy lejanos a veces a los mismos estudiantes, que es lo que pasa con los presidentes, con un candidato a la presidencia, que dicen: es un asunto de chamacos, no, ellos así lo están viviendo, porque están entrando a una sociedad que no les garantiza el futuro y cuál es su esperanza, que se vayan al extranjero, que se vayan a Europa, a Estados Unidos, entonces realmente sí es desconcertante y esa preocupación y esa incógnita tendrían que despejarla y no lo están haciendo los candidatos, yo diría que ninguno está clarificando esto y  sí lo tendrían que hacer”.