Laboral y de manejo de recursos estatales

Julio A. Millán B.

La aprobación, mediante el mecanismo preferente, de la iniciativa de reforma laboral representa un importante reto a la presente legislatura para finalmente lograr modernizar el mercado de trabajo en México. El actual marco jurídico hoy día ya resulta anacrónico, por lo que se hace necesario una rápida modernización en materia laboral que permita al país competir en el entorno global logrando mejores resultados en el corto plazo.

El entorno en el que se plantea esta reforma se caracteriza por un elevado grado de informalidad en la economía, al segundo trimestre del 2012 el 29.35% de los ocupados se emplean en este sector; una incipiente generación de empleos y mayores retos de competitividad internacional ante la globalización cada vez más rápida de los mercados. También se percibe un desfase histórico en materia procesal que hace indispensable la modernización de las instancias para la justicia laboral.

A las iniciativas preferentes se les da prioridad para su discusión y votación correspondiente en el pleno de las cámaras legislativas. En materia de trabajo destaca que se pretende reformar la ley mediante modificaciones en áreas relevantes como productividad, democratización de las organizaciones sindicales, reglas de contratación, outsourcing, delitos laborales, derechos laborales de la mujer, multihabilidad, competencia laboral, empleados domésticos, teletrabajo, servicio profesional de carrera, conflictos de huelga, principio de conciliación en las juntas, entre otros.

Cabe destacar que esta iniciativa incorpora una noción más moderna de “trabajo decente” (promovido por la Organización Internacional del Trabajo) basada en el respeto a la dignidad humana del trabajador, no discriminación de género, preferencia sexual, discapacidad, raza o religión; acceso a la seguridad social, salario remunerador, continua capacitación para mejorar la productividad, seguridad e higiene, libertad de asociación, autonomía y democracia sindical, derecho de huelga, y contratación colectiva.

La estructura del mercado laboral en México es un pilar fundamental para la competitividad del país. Según el INEGI, la tasa de desocupación es de 4.8% al mes de julio del 2012; si la comparamos con algunos países de la OCDE tenemos que solamente estamos peor que Japón y con un menor nivel de desempleo que Alemania, Francia, Reino Unido, Canadá y Estados Unidos.

Por su parte, la segunda iniciativa preferente se refiere a la necesidad que impera en el país para mejorar la contabilidad gubernamental y la transparencia de las cuentas públicas, sobre todo en los estados y municipios, mediante un proceso de homologación presupuestaria entre los distintos órdenes de gobierno.

Al aprobarse ambas reformas estructurales el país estaría dando un gran salto hacia la modernidad, resolviendo una asignatura pendiente, en el marco que norma las relaciones laborales y define la competitividad de las empresas y del país en su conjunto y en el asunto no menor de la discrecionalidad en el uso de recursos.

 

jmillanb@grupocoraza.com