Entrevista a Víctor Espinoza Valle/Investigador de El Colegio de la Frontera Norte

Irma Ortiz

Luego de la debacle electoral que tiene en la lona al PAN, éste se jugará sus cartas más preciadas para retener la entidad que se ha convertido en su bastión por 24 años: Baja California.

Sin embargo, hoy las condiciones son adversas. Se asegura que el dirigente del PAN, Gustavo Madero, estaría dispuesto a poner en jaque al Pacto por México, al anunciar la salida de su partido si no renuncia la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles.

En el fondo, se asegura, se buscaría que el gobierno federal utilice como moneda de cambio el presunto triunfo que obtendría el PRI en Baja California y que aquella entidad siga en manos del panismo.

EL analista político Víctor Espinoza Valle e investigador del departamento de Estudios de Administración Pública del Colegio de la Frontera Norte explica el trasfondo de los rumores que campean en el ambiente electoral y la situación en que se encuentran los partidos en el arranque de las campañas electorales.

¿En qué momento se encuentran las campañas electorales en Baja California con los principales candidatos?

En el primer minuto de este jueves, arrancaron las campañas electorales en el estado. Baja California es la única entidad de las 14 que celebran comicios en que está en juego la gubernatura, lo que le da un cariz especial, en un escenario que lo hace más interesante.

Por un lado, es el gobierno panista más longevo, cumplirá 24 años; en ninguna otra entidad ha durado tanto, cuatro elecciones de gobernador: cinco gobernadores panistas —en un periodo, en 1998, murió el gobernador, Héctor Terán Terán.

También es un escenario de alternancia federal, es la primera elección que enfrenta el gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto, y esto lo hace muy atractivo.

Hay un dato federal y otro local; a nivel federal, en 2012, en el PAN pierde la candidata presidencial Josefina Vázquez Mota, aquí no gana ningún distrito —de los ocho distritos electorales federales, los perdió todos; seis los ganó el PRI, y dos, Andrés Manuel López Obrador.

Luego, en la elección inmediata anterior local de 2010, el PAN perdió todo: las cinco alcaldías y la mayoría en el Congreso, una derrota o una victoria, si quiere verlo así, del PRI, de la cual no había registros desde 1980, de manera que las dos elecciones anteriores fueron ganadas por el PRI.

Así, se enfrenta el gobierno de Peña Nieto en su primera elección al gobierno panista más longevo, por eso dijo César Camacho que era una elección emblemática para el PRI. Arrancan las campañas y hay tres candidatos, están las alianzas que encabezan los principales partidos PRI —Compromiso por Baja California, junto con el PT, Verde y el partido local Encuentro Social—; el PAN, en  Unidos por Baja California junto con el PRD, el partido estatal Baja California y el PANAL, así como el Movimiento Ciudadano, que registró también de último momento candidatos.

¿Qué hay del candidato de la coalición Unidos por Baja California, Francisco Kiko Vega?

Francisco Kiko Vega ganó una contienda donde fue llamado públicamente por su principal contendiente en la interna del PAN, Héctor Osuna Jaime —expresidente de la Cofetel—, como el candidato oficial. Para los panistas y el ambiente en general, existe la percepción de que Kiko Vega es el candidato del gobernador, de la estructura.

Es un expresidente municipal, ha sido diputado; de alguna manera carismático, de ese corte de neopanistas —aunque no es empresario— cuya principal apuesta parece ser el carisma, es simpático, de no mal ver. Sin embargo, en la contienda interna panista tuvo una muy cuestionable participación en los debates, incluso se hizo famoso por un video que se llamaba Las kikadas, que está en YouTube y es un recuento de errores garrafales en los discursos, como decir: el municipio de Tijuana, palabras pésimamente pronunciadas, con un terrible desempeño en los debates. Es un personaje con poca capacidad, en ese tenor.

El candidato del PAN está en una alianza con el PRD, al que todo el mundo califica como electorera, que no es muy bien vista, no convocó adhesiones, ni nada de eso, porque hay que decirlo: Baja California, históricamente, es una entidad bipartidista; el 95 por ciento de los votos se reparten entre PRI y PAN.

La izquierda, salvo algunas elecciones federales, ha tenido un importante caudal de votos, como en 1988, donde ganó el candidato del Frente Democrático Nacional, Cuauhtémoc Cárdenas, y en 2000 y 2006, no triunfó Andrés Manuel López Obrador, pero sí tuvo un caudal importante de sufragios. De ahí en fuera, en elecciones locales se comportan entre el 5 y el 7 por ciento. Han surgido criticas de la alianza del PAN-PRD, no como algo determinante, pero en una elección competida, dos o tres puntos que aporten los partidos pueden ser muy importantes.

Castro Trenti, gran capacidad para tejer alianzas

En el caso de la coalición de Compromiso por Baja California con Fernando Castro Trenti, ¿con qué arraigo cuenta?, porque también ha hecho carrera en el centro.

Fue diputado local y delegado en muchas dependencias en Baja California. Es un personaje muy conocido, que en los últimos años estuvo en el Senado con una evaluación muy positiva y con una característica: es hiperactivo, trabaja siempre. Hay un mito, sobre todo por lo que trabaja, es un tipo incansable, se le reconocen esas virtudes. Fue uno de los senadores más participativos, excelente orador, lo que contrasta con Kiko Vega, y que además tiene una gran capacidad para tejer alianzas, para convocar a gente de distinta naturaleza. Es un personaje que llega fuerte a la elección.

¿Existen sondeos sobre cómo llegan los candidatos a la campaña?

Hay muy pocos, porque todo el mundo se cuidó, sobre todo los partidos, de no hacer actos anticipados de campaña, pero los que hemos conocido, al menos un par de sondeos, también constituyen un indicador favorable a Castro Trenti.

Si se revisan cómo estaban los candidatos priistas en estos momentos, en otra elección, por ejemplo 2007, el referente inmediato, cuando Jorge Hank Rhon fue el candidato, éste se encontraba como 15 puntos abajo de José Guadalupe Osuna Millán, y ahora existe una encuesta que los empata, y otra que sitúa a Castro Trenti 10 puntos arriba.

Es la primera ocasión en 24 años, que el PRI arranca empatado o arriba, vamos a ver cómo se comportan. Esto que refiero, da indicios de una gran preocupación en la esquina azul porque los atisbos de guerra sucia vienen de ese lugar, ejemplo: hay un activismo inusitado de un personaje que tuvo mucho arraigo y ya no lo tiene, y que fue el primer gobernador de oposición, Ernesto Rufo Appel —quien apoyó a Héctor Osuna Jaime en la contienda interna— y hoy hace denuncias públicas, diciendo que cuando fue gobernador supo que Castro Trenti fue detenido; lo dijo con Ricardo Alemán, del diario El Universal, hace como un mes, y lo repitió la semana pasada, a nivel local, en conferencia de prensa. Varió la versión, primero dijo que traía droga y ahora nada más dice que armas, y ya le han pegado muy fuerte. Es un personaje que había sido muy crítico hacia el PAN, él apoyó a Vázquez Mota y fue muy crítico acerca del manejo del PAN. De pronto sale a levantarle la mano a Kiko Vega y hace declaraciones típicas de la guerra sucia, eso no lo hacía. Llama mucho la atención porque, normalmente, quien inicia la campaña sucia es quien se siente en desventaja.

 

¿Habrá concertacesión?

En un contexto donde hoy se viven conflictos en Guerrero, Michoacán, Oaxaca; está la toma de Rectoría de la UNAM, la fallida en la UAM Iztapalapa, se habla de que el gobierno estaría dispuesto a sacrificar a Castro Trenti y darle el triunfo al PAN, para evitar que éste se salga del Pacto y ya no apoye las reformas que faltan.

Sí, esto también se oyó, pero curiosamente se escuchó desde hace meses aquí en Baja California, pero todavía no estaba el panorama que describe. Al principio se decía que era una moneda de cambio para que el PAN apoyara el Pacto por México, creo que más bien este rumor tiene un origen muy interesado, incluso citan el antecedente de 1989, cuando pierde el PRI, y lo quisieron equiparar; se hablaba de la concertacesión que se dio en Baja California, pero que no se dio en Michoacán.

Es un contexto completamente diferente, por un lado, no creo en la tesis de que Margarita Ortega en los comicios 1989 fuera sacrificada y le hayan dicho: vas a perder; creo que perdió en las urnas, que ganó Rufo Appel ante la situación de corrupción que se vivía. A lo mejor, lo que sí hizo Carlos Salinas de Gortari, en su momento, fue decirle a Ortega: si pierdes, no me robo las urnas, que era el recurso que antes tenía el PRI. Creo que lo que sí dijo Salinas fue: vas, pero si pierdes, no meto las manos. Creo que sí perdió en las urnas, por eso me parece diferente el contexto, sería más costoso para Enrique Peña Nieto perder Baja California, que garantizar la permanencia del Pacto por México, porque, insisto, es una elección emblemática, es mucho lo que se juega. Claro que para el PAN sería una bocanada de aire luego de lo que le ha acontecido, pero uno negocia cuando se tiene fuerza, posibilidades, creo que no es posible.

En el escenario de que se negocie, ¿cómo se haría?, me  pregunto; por ejemplo, con las autoridades electorales, tendría que ser un fraude mayúsculo o robárselas. No me imagino cómo puede perder en las urnas o que, por ejemplo, el PRI nacional no apoyara a Castro Trenti.

Admitiendo que hubiera esa decisión, me pregunto cómo se haría hoy, cuando hay observación electoral y además se acaba de renovar el Consejo Estatal Electoral. El PRI tiene mayoría en el Congreso y tuvo mayoría en la designación de consejeros, de tal manera que tampoco podemos decir que hay un Consejo que pudiera hacer un fraude en las actas, o en el conteo.

No creo que en este momento hubiera alguien que se va a robar las urnas. Concediendo que lo decidiera el presidente, la única cosa que se me ocurriría es que dijera: ¡no te apoya la maquinaria priista!, pero tampoco hay un solo indicio. Por ejemplo, sabemos que en el PRI estatal hay dos grupos fuertes: Castro Trenti y Jorge Hank Rhon; hubo ciertos amagos porque Hank Rhon se sentía, y es cierto, más cerca del grupo de Peña Nieto que Castro Trenti, quien es cercano al grupo de Manlio Fabio o es su brazo derecho.

Si revisamos la elección del Estado de México, ¿qué hizo Peña Nieto?, aun sin ser presidente, su candidato cercano era Alfredo del Mazo, no Eruviel, pero lo que nos demostró es que apoyó al más fuerte y ganó.

Si uno viene a Baja California y ve los dos grupos en este momento, el más fuerte es Castro Trenti y no su candidato cercano; por eso Hank Rhon se sentía el candidato, porque era su amigo, y en los amagos que hizo de indisciplina, se le llamó y se le dio la alcaldía a su grupo, además de que dos de los personajes más cercanos a Hank aparecen hoy en la campaña, lo cual evidencia una decisión del centro de cerrar esa división.

Se percibe el apoyo que recibe del centro Castro Trenti, de manera que no encuentro ningún indicio para apoyar ese rumor; si se vieran movimientos de que lo están dejando solo, o que el Consejo es panista y que actuará a favor de Kiko Vega o de que no está funcionando el PRI…, pero todo lo contrario, es más bien un rumor de descalificación para infundir ese ánimo en la sociedad, sobre todo en Baja California y en sus votantes y generar abstencionismo.

 

Kiko ¿marcará distancia del gobernador?

Este jueves que se inician las campañas, será interesante ver los debates, cómo se manejan, quiénes están circulando por aquí. Será una elección competida, el PAN se juega mucho, le va a echar todos los kilos, porque un triunfo sería una verdadera bocanada de oxígeno después de la debacle. Sin embargo, hay un factor en contra del PAN, la percepción de la gente de que en los últimos meses y semanas se ha recrudecido la violencia. La gente dice: aquí hay problemas de inseguridad; no dice: eso le corresponde a la federación, al municipio o al estado; dice: aquí hay violencia y ya no funciona.

Es un handicap tremendo; Kiko Vega, ¿cómo actuará? ¿Será el candidato de la continuidad o planteará algo diferente siendo candidato oficial, después de 24 años? Así sea gobierno panista, perredista o priista, es muy difícil, porque es un mensaje de mucha continuidad, tiene que resaltar los logros; el priista está más cómodo, porque es oposición y puede señalar errores y plantear alternativas. Si Kiko Vega se va por la vía de justificar y dar continuidad, o si se atreve a marcar una línea frente al gobernador —que es un grupo muy fuerte—, cuyo candidato natural era el extinto Francisco Blake Mora, un grupo muy ligado a Calderón, que no apoyó a Josefina.

Todo eso se está viviendo en el PAN, más que nada rencores que brotan en una situación como los comicios, el decir a quién apoyó el gobernador. Veremos cómo se comporta Kiko Vega, si marca una línea, que fue lo que nunca hizo Vázquez Mota, le decían tienes que marcar una línea con Calderón, nunca se atrevió. Es muy difícil que también se atreva Kiko Vega, porque hay problemas fuertes de violencia, de desempleo, hay problemas de educación, salud. Todo gobierno se desgasta, es natural, por eso tiene más complicado el escenario el candidato panista.

Sobre todo, insisto, no tiene la Presidencia de la República atrás. Eso es fundamental en un sistema presidencialista, y no veo por dónde Peña Nieto esté pensando en ceder Baja California. Considero que aun en este momento de crisis política, le daría mucho más fuerza ganar Baja California y le daría mayor capacidad de negociación frente a un PAN completamente caído, al que no le quedaría otra que sentarse a platicar.