Yolanda Delfín Ortega, la joven veracruzana de 22 años que viajaba en el tren que sufrió un accidente en Galicia, es una de las 80 personas que perdieron la vida.
Uno de los forenses, quienes han trabajado durante toda la noche para identificar a los fallecidos, reconoció su cadáver e informó a la compañera de departamento de Yolanda, Karla Ramírez, a la madre de ésta, Doralinda Vives y a una de sus profesoras de la universidad.
Karla y su madre, tras pasar unos días juntas en Madrid, decidieron quedarse más tiempo de vacaciones y volar a Barcelona en lugar de regresar a Santiago de Compostela. Gracias a esa decisión no tomaron el mismo tren en el que también habrían perdido la vida.
La joven, que llevaba seis meses estudiando Derecho en un programa de intercambio en la Universidad de Santiago de Compostela (Galicia), viajó en ese tren en Madrid tras acudir al aeropuerto a despedir a su madre y a su hermana que habían viajado a España a visitarla. Cinco minutos antes de que se produjera el descarrilamiento debido al exceso de velocidad, según Notisistema, Yolanda le mandó un mensaje a través de la red social de Facebook a su novio Luis Ledesma, que se encuentra en México.
Un mensaje en el que le decía que estaría en su casa de Santiago de Compostela en un rato y que en cuanto llegara le llamaba.