IZQUIERDA HOY

La ruta está definida

 Miguel Barbosa Huerta*

En estos momentos, el escenario político mexicano está claro. El gobierno y cada una de las fuerza políticas nacionales tienen una ruta definida. El PRI requiere de la reforma energética y de las reformas fiscal y hacendaria, para alcanzar los propósitos que se ha  propuesto. El partido en el poder va por una  reforma energética que permita la inversión privada en áreas estratégicas de Pemex, a cambio de compartir renta petrolera;  también va por una reforma fiscal recaudatoria, basada en el aumento de una tasa única sin ex enciones y el IVA generalizado.

El escenario del PAN se ha definido con nitidez. Este partido ha decidido acompañar al PRI en sus propuestas de reformas, con el objeto de restablecer una relación política, parecida a la que tuvo en la época de Carlos Salinas de Gortari  y de Ernesto Zedillo Ponce de León.

Es decir, se trata de una versión corregida y aumentada de lo que fueron las concertacesiones y que al final del día significa jugar un  papel funcional al actual gobierno,  para que, desde la perspectiva panista, poco a poco crear las condiciones que supuestamente le permitieran regresar a la Presidencia de la República.

En el PRD no vamos a apoyar la propuesta de reforma energética que permita la inversión privada nacional y extranjera en áreas estratégicas de Pemex a cambio de renta petrolera, no vamos a acompañar la reforma fiscal que aumente los impuestos.

Desde la izquierda hemos elaborado propuestas alternativas a estas visiones. En materia energética, nos comprometimos a encabezar la lucha por la defensa del petróleo y a proponer al pueblo de México una reforma para modernizar y fortalecer Pemex y la CFE sin privatizarlos, la cual presentaremos inmediatamente después de que el gobierno federal presente la suya.

En días recientes, en el marco del Pacto por México se han presentado algunas directrices en materia de reforma electoral. Bienvenidas todas las propuestas. El Grupo Parlamentario del PRD y un grupo de senadores del PAN presentamos una propuesta para transformar nuestro régimen político, democratizar y garantizar condiciones de equidad en las elecciones y contar con herramientas constitucionales y legales para que la ciudadanía exprese por medio de un plebiscito su decisión respecto a los grandes temas nacionales como la reforma energética.

Ojalá que en el seno del Pacto por México se ampliara la visión y se aceptara discutir una reforma política de fondo, que modificara sustancialmente las formas de ejercicio del poder en nuestro país.

En la arena legislativa, tenemos que resolver la reforma de leyes secundarias en materia educativa, concluir el paquete de telecomunicaciones y competencia, concluir la Ley sobre Derechos Humanos, los ordenamientos pendientes derivados de la reforma constitucional de la pasada Legislatura y las leyes secundarias producto de la reforma política de 2011.

Por esta larga lista de temas, se hace indispensable en el mes de agosto un periodo extraordinario de sesiones del Congreso de la Unión, que pueda desahogar algunos de estos temas. Un periodo que sólo puede ser definido por los órganos de gobierno de ambas Cámaras del Congreso, a través del acuerdo de los grupos parlamentarios.

 

*Coordinador del prd en el Senado de la República