Gerardo Yong
A cinco años de la incursión de Rusia en el territorio soberano de Georgia y de la agresión militar de gran escala sufrida el 7 de agosto del 2008 contra este Estado independiente, las fuerzas armadas rusas continúan la ocupación efectiva del 20% del territorio georgiano. El ministerio de Relaciones Exteriores de Georgia denunció esta acción como una flagrante violación de los principios fundamentales de derecho internacional, que priva del derecho internacionalmente reconocido de retorno seguro, digno y voluntario a cientos de miles de víctimas de diferentes olas de limpieza étnica, incluyendo la del 2008. Según el ministerio georgiano, Rusia ha intensificado su campaña para obtener el reconocimiento de las regiones ocupadas bajo su control efectivo y fuerte presencia militar, incluyendo la aplicación activa de presiones políticas, militares y económicas.
Señaló que hasta la fecha, la Federación Rusa continúa incumpliendo las obligaciones estipuladas bajo los seis puntos del Acuerdo de Cese al Fuego, negociado por intermediación de la Unión Europea y firmado por Georgia y Rusia el 12 de Agosto del 2008. “En vez de retirar sus fuerzas a la posición previa a la guerra, como se señala en el Acuerdo de Cese al Fuego, la Federación Rusa ha reforzado exponencialmente sus bases militares, desplegándolas ilegalmente en las regiones ocupadas de Georgia, al instalar equipo ofensivo pesado e incrementando la cantidad de personal militar”, afirmó. “Contraria a las previsiones del Acuerdo de Cese al Fuego del 12 de agosto del 2008, la Federación Rusa se opone abiertamente al establecimiento de mecanismos internacionales de seguridad y estabilidad en los territorios bajo su control efectivo y continúa impidiendo el acceso de ayuda humanitaria”.
El gobierno de Tbilisi denunció que, a pesar de la agresión rusa de agosto del 2008 y su persistente política destructiva contra la independencia y la condición propia de Estado de Georgia, ha buscado promover la normalización gradual de las relaciones con la Federación Rusa, con base en el principio de soberanía e integridad territorial de Georgia dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente. “En un esfuerzo por crear las condiciones conducentes a la reducción de la intensidad de las tensiones con Moscú, Georgia ha emprendido una serie de iniciativas concretas y sustanciales: -Tbilisi estableció un compromiso jurídicamente vinculante para no utilizar la fuerza para la resolución de este conflicto, remover las barreras para la membrecía de Rusia a la OCDE, – suprimir unilateralmente los requerimientos de visado para ciudadanos de la Federación Rusa, – declinar boicotear los Juegos Olímpicos de Sochi del 2014, disposición declarada de cooperación para garantizar la seguridad de los Juegos Olímpicos de Sochi, nombrado a un Representante Especial para Relaciones con la Federación Rusa, reafirmando la voluntad política y disponibilidad para reiniciar el intercambio comercial, económico, humanitario y relaciones culturales con Rusia.
Políticas de presión
La cancillería georgiana señaló que Moscú ha intensificado aún más sus provocativas políticas dirigidas a desestabilizar a Georgia, mediante la instalación de cercas de alambre de púas y muros de contención a lo largo de la línea de ocupación en las regiones de Tskhinvali y Abjasia, lo cual es una total violación a las leyes internacionales y a los derechos humanos. “La expansión del área de ocupación con la construcción de las bardas e instalaciones en territorio georgiano quebranta claramente la soberanía de Georgia, así como su integridad territorial y la inviolabilidad de sus fronteras reconocidas internacionalmente, además de ser una violación flagrante del Acuerdo de Cese al Fuego del 12 de agosto del 2008”.
Al cumplirse el 5º Aniversario de la Guerra de Agosto del 2008 Rusia-Georgia, el gobierno de Georgia reiteró su objetivo de resolver el conflicto existente con Rusia de manera pacífica, mediante negociaciones basadas en los principios del derecho internacional. También agradeció a sus socios que por fuerte apoyo ofrecido durante el periodo de la Guerra de Agosto del 2008 o incluso después, frente al reto existente en contra de su seguridad y estabilidad. “Georgia valora los esfuerzos diplomáticos de los aliados, que contribuyeron a detener nuevos actos de agresión de las tropas rusas y prestaron una asistencia considerable al Gobierno georgiano para restaurar la estabilidad económica y reparar la infraestructura dañada”, indicó el ministerio. “Georgia está particularmente agradecida con la Unión Europea y sus Estados Miembros, que contribuyeron con personal para la Misión de Monitoreo de la Unión Europea– el único mecanismo internacional viable actualmente en operación en el territorio de Georgia y garante esencial de su seguridad y estabilidad”.
Finalmente, mencionó que el gobierno de Georgia considera que la construcción de un Estado independiente y democrático es la manera más eficaz y certera de alcanzar un futuro próspero para una Georgia reunificada. Para implementar esta visión, requerimos de una alianza cercana con los países de la región, con los miembros de la familia Euro-Atlántica y con organismos internacionales. Por su lado, Georgia mantiene su compromiso de asumir un papel activo en el reforzamiento de la seguridad internacional en la región y en el mundo entero.
También manifestó su persistencia en lograr su integración europea y euro-atlántica y aseguró que no escatimará esfuerzos para hacer realidad esta aspiración del pueblo georgiano. Asimismo, puntualizó que la reciente evolución de las relaciones Unión Europea-Georgia permite a Georgia ver con confianza hacia el futuro. “Una mayor integración a la familia europea no solo ayudará a completar satisfactoriamente el proyecto nacional georgiano, sino que ubicará firmemente al país entre las naciones libres y democráticas del mundo”. (Embajada de Georgia en México).