Liturgia
Regreso a clases
Teodoro Barajas Rodríguez
La educación es una base fundamental para aspirar y concretar un mejor futuro, eso es indudable, México ha descendido en este rubro en las últimas décadas, es una cuestión multifactorial que padecen en mayor medida los estudiantes de nivel básico como sucede en Michoacán.
Historias negras del sindicalismo porque en muchos años hubo sólo dos dirigentes: Carlos Jonguitud Barrios y Elba Esther Gordillo Morales; esto significa que la democracia ha sido letra muerta, igual destino ha sufrido la transparencia.
Los contenidos educativos han sufrido mermas importantes en materia histórica, a veces da la impresión de que los diseños en la materia se han realizado para que mucha gente no abra los ojos, y en un pueblo de ciegos se sospecha de quien los estrena.
Ha comenzado el ciclo escolar, a veces resulta inevitable acudir a los recuerdos de otros años en que retornábamos a la primaria o secundaria, fue otra dinámica, no se registraban tantas suspensiones en las escuelas públicas, el civismo fue tratado con la importancia debida aunque la historia oficial llenaba los espacios hasta volverse un enorme lugar común. Educación ideologizada favorable para el antiguo régimen.
En la actualidad y apenas al inicio del curso escolar 2013-1014 ya tenemos los primeros problemas, plantones permanentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación en protesta contra la Ley General de Educación y legislaciones secundarias, señalaron los manifestantes. Me pregunto si no tendrán variantes para no cancelar las clases a muchos niños que siguen huérfanos de escuela.
Es legítimo que se proteste pero no lo es suspender clases en un país que sufre de rezagos, desviaciones y demandas urgentes que siguen sin ser atendidas. Alguna vez un profesor cubano me decía que la revolución se incuba en las aulas, consecuentemente un mentor revolucionario no abandona la escuela, ese punto de vista no es compartido por muchos de sus colegas mexicanos aunque se autoproclamen de izquierda.
Paulo Freire, eminente educador que dejara una honda huella, fue un convencido de que el conocimiento no sólo se trasmite sino que se construye porque “es el goce de la construcción de un mundo común”.
Para el mismo educador brasileño estudiar no se mide por el número de páginas leídas en una noche, ni por la cantidad de libros leídos en un semestre. Estudiar, dijo Freire, no es un acto de consumir ideas, sino crearlas y recrearlas.
Seguimos como país rezagado en el rubro educativo, se trata de crear nuevos programas, otro modelo, más inversión y, fundamentalmente, manifestación de la voluntad para superar tantos problemas que se acumulan para generar más dificultades.
Comenzó el nuevo ciclo escolar y como suele pasar se enciende también el deseo, la esperanza de otro tipo de pedagogía que sirve como revulsivo para modificar nuestro entorno. La educación es un asunto prioritario ayer, hoy y siempre.
No podemos dejar de lado que la ciencia y la tecnología deben estar al servicio de la libertad y coadyuva para la emancipación del hombre.
