Entrevista a Pedro Higuera/Presidente de la Comisión de Asuntos Tributarios de la Coparmex
Irma Ortiz
Este domingo por la noche, el gobierno federal presentará la llamada reforma financiera y el paquete económico 2014, en lo que se anticipa serán discusiones duras, difíciles para los próximos días, en el Congreso de la Unión.
Mientras tanto, en las calles de la ciudad de México se mantienen los cercos de los maestros de la CNTE, en protesta por la aprobación de la Ley del Servicio Profesional Docente — y la falta de pagos atrasados de quincenas que no trabajaron— y a la espera de la movilización que realizará el excandidato presidencial del PRD, Andrés Manuel López Obrador para detener la iniciativa presidencial en materia energética
En el sector empresarial existe inquietud y temor de que se concreten los impuestos patrimoniales, que pretenden gravar herencias, cesiones y actividades que no tienen aún impuestos, como algunos lo han venido manejando, donde pague más quien más gana.
Considerado un país que recauda poco y distribuye mal, según la OCDE, el presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que la reforma que impulsará su administración consolidará la estabilidad y el crecimiento económico al simplificar el sistema fiscal y se incrementará la competitividad de la planta productiva.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), en voz de su presidente Juan Pablo Castañón, fijó su postura: impuestos a alimentos y medicinas no mayor al 5 por ciento. El dirigente patronal dijo que esta reforma puede aumentar los ingresos fiscales en 1.2 por ciento del PIB anualmente y llegar a niveles del 15 por ciento al finalizar el sexenio.
La Canacintra se sumó a la propuesta de establecer IVA a medicinas y alimentos en un rango del 3 al 5 por ciento además de desaparecer el Impuesto Empresarial a la Tasa Única.
En respuesta, el líder de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, Manlio Fabio Beltrones, advirtió al sector empresarial que en la reforma hacendaria, antes que pensar en nuevos impuestos, se buscará acabar con los privilegios y cumplir con lo que señala la Constitución de “que pague más el que más tiene”
Sobre el tema, Siempre! entrevistó a Pedro Higuera, presidente de la Comisión de Asuntos Tributarios de la Coparmex.
Este domingo se presenta la reforma hacendaria, ¿qué expectativas tiene la Coparmex respecto a esta reforma? Se ha hablado de que se aumentará el Impuesto Sobre la Renta, que podría desaparecer el Impuesto Empresarial a Tasa Única.
Lo que esperamos de esta próxima reforma hacendaria, tomando en cuenta que estamos en una coyuntura económica donde los resultados económicos no son alentadores, es que no sea meramente recaudatoria. Que se constituya en una reforma hacendaria que sí promueva el desarrollo, que impulse el crecimiento económico. Sabemos que hay temas que tienen que ser revisados, no nada más desde el punto de vista de captación de ingresos, sino también poner especial atención en el tema del gasto público, en mejorar la calidad en el ejercicio del gasto público.
Se deben revisar todos los programas
Se ha pronunciado la Coparmex por una reestructuración de la administración pública.
Hemos insistido en el sentido de revisar todos los programas, de articular de mejor manera todos estos programas que existen y con eso eficientar el gasto público.
Ustedes han planteado la necesidad de “despetrolizar” la economía, sin embargo, seguimos siendo muy dependientes, ¿es viable lograrlo cuando enfrentamos una difícil situación económica?
Nuestro aumento a la dependencia del petróleo ha seguido esa tendencia al 2012, tenemos aproximadamente con una dependencia de los ingresos petroleros de poco menos del 34 por ciento y si vemos el año 2000, por ejemplo, representa más o menos el 30 por ciento, es decir, ha ido en aumento la dependencia de los ingresos petroleros. Para la Coparmex el tema de los ingresos petroleros es un punto importante porque consideramos que ese tema de recursos, de ingresos petroleros tiene que haber un mejor aprovechamiento de los mismos.
Ustedes se han pronunciado por un alza del 5 por ciento a alimentos y medicinas y dada la situación que estamos viviendo en el país, acosados por todas las marchas de maestros, ¿usted ve viable que esto se pueda dar?, ¿cuál es el peligro si se da un incremento en alimentos y medicinas de que podamos tener serios brotes sociales?
El tema, más allá de hablar en porcentaje o de ya fijar un número, lo que nosotros consideramos que en el caso de aprovechar el potencial recaudatorio de los impuestos al consumo, como es el impuesto al valor agregado, en el caso de los alimentos y las medicinas, tendría que hacerse con una tasa definitivamente moderada pero sobre todo y muy importante, acorde con la situación económica que estamos viviendo. Tampoco podríamos hablar que por un aumento, en gravar alimentos y medicinas pudiera afectar el crecimiento económico, tomando en cuenta la coyuntura económica por la que estamos viviendo.
Nuestra postura es de que se haga un análisis, una revisión de fondo y es en el sentido de que la tasa que se vaya a proponer, que el gravamen, para alimentos, para medicinas, tendría que ser —en nuestra opinión— con una tasa moderada acorde con la situación económica. Por qué hablamos de este tema de impuestos al consumo, que en realidad la reforma hacendaria esperamos que no solamente se centre en ese tema, porque hay otras muchas temáticas importantes. ¿Por qué en el caso de impuestos al consumo? Por qué aprovechar el potencial recaudatorio de impuestos al consumo, sí, cuidando la tasa moderada, sí también y sobre todo y es un tema muy importante, estableciendo mecanismos para evitar mayor afectación a los sectores vulnerables de la población.
Destinar recursos a temas prioritarios
En los análisis que hemos estado realizando se puede observar claramente cómo en el caso del impuesto al valor agregado, este tema de estos tratamientos preferenciales o tratamientos tasa cero son aprovechados en mayor medida por los sectores de mayor ingreso de la población. Por supuesto que también nos preocupa la afectación que pudiera darse a sectores vulnerables por un posible ajuste en la tasa del impuesto al valor agregado, por eso insistimos que tendrían que darse medidas para evitar o reducir esos impactos en sectores vulnerables de la población. Cuando hablamos de que se perfilan ahí más ingresos y en este tema de impuestos al consumo, hay que tomar en cuenta que finalmente estos excedentes de recursos tendrían que destinarse también a temas prioritarios, temas de gasto social enfocados justamente a mejorar la calidad de vida de las personas.
¿Qué medidas deben implementarse?
Tendrá que hacerse definitivamente un análisis, el gobierno tiene mucha información al respecto pero el mecanismo que tendrá —que seguramente es viable es a través de gasto social—, con un gasto social muy focalizado o muy eficiente. Por ejemplo, hablamos que debe de existir un solo padrón de todos los beneficiarios de programas sociales, en todos los órdenes de gobierno, pero el mecanismo tiene que seguir siendo por el gasto social bien focalizado.
Se ha señalado que posiblemente se implemente el impuesto patrimonial donde se habla de uno o dos por ciento. ¿Hay disposición del sector empresarial para que pague más quien más gana?
En este tema, son muchos los rumores que se han venido manejando. Sobre este tema, vamos a estar muy atentos a cada uno de los puntos que se propongan, que se presenten en la iniciativa que se estará entregando en los próximos días, para hacer un análisis a fondo de la misma y hacer las propuestas o dar nuestros puntos de vista en cada uno de estos temas particulares.
¿Habría esa disposición?
Creo que aquí tiene que darse una situación de lo que hemos venido señalando, que no sea una forma meramente de carácter recaudatorio. Tendríamos que evaluar varios factores, por ejemplo, esperamos una reforma que fomente la inversión, que fomente el ahorro, es lo que estaríamos esperando de la reforma, pero que no sea exclusivamente una reforma de carácter recaudatorio.
Qué debemos esperar
¿Estaría de acuerdo en declaraciones como la que hizo Bercley de que la reforma hacendaria no va a ser ni tan ambiciosa, pues los esfuerzos se concentrarán en la reforma energética y señalan que si la reforma fiscal incrementa en más de dos puntos porcentuales la recaudación, podría ser recesiva?
En relación con este tema, consideramos que por lo menos de aquí a los próximos cinco años, estamos ahora más o menos en niveles de recaudación un poco abajo del 10 por ciento de recaudación de ingresos tributarios, esperaríamos que por lo menos en los próximos cinco años, se diera una recaudación cuando menos de un 15 por ciento en relación con el Producto Interno Bruto. Estimamos que debería de estarse incrementando la recaudación, en promedio, un punto del PIB, porque sí hablamos de cantidades mayores, nos preocuparía una posible afectación en el desarrollo propio de la economía.
Por eso estimamos que, en promedio, derivado de un efecto de reforma hacendaria, que el incremento en la recaudación de los ingresos tributarios, se fueran reflejando de manera paulatina, en un punto del PIB cada año y en este momento estamos en una situación económica adversa.
Se habla mucho del tema del aumento de impuestos, pero también hay un punto que debemos de tener claro ¿qué esperamos con una reforma hacendaria?, bueno, esperamos con una reforma hacendaria un tema muy importante que tiene que ver con la mejora recaudatoria y cuando hablamos de mejora recaudatoria, de eficientar la fiscalización, hablamos de que fue una responsabilidad que compete no sólo a la federación sino que también es una responsabilidad que también compete a las entidades federativas, a los municipios. Ahí también hay un gran reto de que tanto entidades federativas como municipios tienen que eficientar su captación de ingresos, mejorar su desempeño tributario. Hay que también entrar en el tema del gasto y no sólo tributario.
¿Estaría totalmente de acuerdo en que esta reforma tendría que estar acompañada de controles eficaces para la rendición de cuentas?
Por supuesto, tiene que ir acompañada de transparencia, ya se aprobaron las reformas a la ley de contabilidad gubernamental, esperamos que se dé una mayor difusión de la implementación de estas reformas a la ley de contabilidad gubernamental. Con esta reforma, nosotros —sector empresarial— esperamos que mejore la calidad en el ejercicio del gasto público, para eso habrá que trabajar mucho en temas de indicadores de control de calidad que nos permitan, como ciudadanos, evaluar cómo se ve el desempeño en el ejercicio del gasto público pero mucho enfocado al tema de calidad del gasto público.
Fortaleza del presidente para sacar adelante la reforma hacendaria.
En este sentido, como lo hemos venido manifestando, hacemos un llamado a todos los actores políticos para que podamos impulsar el tema de la reforma hacendaria. Forma parte de las reformas estructurales al igual que la energética, pero nuestro llamado es para cada uno de los actores políticos a que se dé voluntad para impulsar esta reforma hacendaria porque seguimos apostándole y pensando en que éste es el momento oportuno para poder impulsar una reforma de gran calado y que nos va a dar nuevos horizontes para nuestro país, para mejorar la calidad de vida de nuestra población. Hay que sentar las bases hacia una reforma hacendaria, cuidando que no sea nada más recaudatoria y cuidando que no se afecte el crecimiento económico, no podemos desvincularlo efectivamente de esta coyuntura económica