Entrevista a Julio Castillo López/Director general de la Fundación Carlos Castillo Peraza

Nora Rodríguez Aceves

Ante la filtración de una conversación telefónica publicada por el diario El Universal entre el senador Ernesto Cordero y el diputado federal Fernando Rodríguez Doval, sobre “hundir”, por “ladrones”, al líder nacional del Partido Acción Nacional, Gustavo Madero y al coordinador del Grupo Parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados, Luis Alberto Villarreal…”, grabación que tiene que ver con lo que ya se había dado a conocer en la prensa nacional sobre que en el marco de la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación para el año 2014, la prensa había descubierto presuntos actos de corrupción del coordinador panista en la Cámara Baja y de otros legisladores de este partido a quienes se les acusó de gestionar recursos para ciertos municipios a cambio de una comisión.

Sin pruebas de corrupción

Julio Castillo López, director general de la Fundación Carlos Castillo Peraza, se niega a opinar sobre el tema y responde: “No voy a opinar sobre conversaciones filtradas”. Ni sobre el contenido de éstas: “No, tampoco”.

Sin embargo, al escuchar que se ha criticado mucho el tráfico de influencias o la posible corrupción que existe al interior del Grupo Parlamentario del PAN responde: “Si no es fidedigna la raíz de la prueba, la prueba pasa a ser irrelevante, definitivamente evidencia una forma de ver las cosas de una persona, otra forma de ver las cosas de otra, pues a fin de cuentas no dice más de lo que ya se ha dicho…”

En este sentido, se le dice a Castillo López que la asignación de recursos ¿no es importante para ustedes?, porque usted en una entrevista a un medio de comunicación habla de esta honestidad que tenía Acción Nacional antes de ser gobierno y que estando en el gobierno se adhirió a la cultura del PRI: “Eso definitivamente es un problema, el PAN renunció a hacer un propio barco al gobernar y decidió subirse a las reglas que estaban implícitas dentro del gobierno. También tiene mucho que ver con la misma experiencia de gobierno, tiene mucho que ver con los mismos usos y costumbres de una sociedad, porque es muy fácil atacar corrupción  a ciertos niveles, pero es igual de corrupto el que le da una mordida a un policía, el que se pase un alto, solamente que está situado en un lugar distinto”.

“Hoy en día que se ve todo este relajo de las asignaciones presupuestales, al final del día esas cosas siempre han existido por un lado y por otro, no es como lo han pintado, todo eso está hecho con pruebas apócrifas, no hay ni siquiera una fundamentación, los alcaldes que fueron increpados o que fueron ahora sí que «embarrados»; en este juego todos negaron su participación, todos salieron a declarar. En el caso de los diputados federales, sí tienen una bolsa de recursos para asignar a proyectos específicos y, sin embargo, no creo que se ha generalizado el tema de la corrupción ni cercanamente generalizado, sino que estás hablando de excepciones, y no lo digo sólo por el PAN, lo digo por todos los partidos, porque definitivamente es corrompible  el que quiera corromperse, y desde luego que el PAN no es una escuela de santos,  pero tampoco es una guarida de demonios, podrá haber ejemplos contarios, podrá haber muchos ejemplos de asignaciones transparentes, y sin embargo, yo no he visto una sola comprobada de asignaciones corruptas”.

Hay que mencionar que esta filtración de la conversación entre los legisladores panistas contra su dirigente nacional y su grupo cercano se da a conocer en el contexto de la renovación de la dirigencia nacional,  sobre la cual dice Castillo López: “Es un escenario complicado porque es nuevo, nunca antes una elección de presidentes de Acción Nacional se había hecho por vía de la militancia completa, el PAN seguía una forma de democracia, que es indirecta, los militantes eligen a sus consejeros que juntaban un cúmulo, que todavía existe, de 382 más o menos, creo que ahorita están en 381, son 300 electos y  80 entre vitalicios y exoficio como los expresidentes del partido, ellos eran los que lo elegían, evidentemente será una batalla mucho más similar a la que se ha dado para las candidaturas presidenciales que a las que se han visto antes a la presidencia del Acción Nacional”.

“Ya están más o menos los candidatos, hemos visto que unos salen, otros se bajan otros suben, pero yo creo que estará bien tranquila como casi siempre han sido los procesos aquí”.

La reunión del Consejo Nacional

Para el hijo de Carlos Castillo Peraza, quien fuera presidente nacional del PAN en 1993, en Acción Nacional no existen grupos “porque, por ejemplo, apenas el lunes salió una nota de que José Luis Luege Camargo se iba a lanzar a la presidencia del PAN, tenemos un claro calderonismo y corderismo cercano a Ernesto Cordero, tenemos a Juan Manuel Oliva que está intentando ponderar otro lado de la militancia. En realidad no son grupos como se da en la izquierda que tienen nombre y filiación, sino acomodo de personas, por ejemplo, mucha de la gente que apoyó a Calderón en su momento ahora está apoyando a Madero, mucha de la gente que apoyó a Santiago Creel está apoyando a Madero, mucha de la gente que apoyó a Josefina hoy no la apoya, sino a Madero y a Josefina la apoya un grupo de exgobernadores más doctrinarios”.

El próximo fin de semana, “se llevará a cabo la reunión del Consejo Nacional para fijar los tiempos y las fechas. Esta reunión es una reunión de reposición, hay que recordar que esta reunión se dio hace un mes, en que por diferentes discrepancias se rompió el quórum del Consejo Nacional y se tuvo que resarcir y eso es lo que se hará”.

Lo que se acordará ahí, dice Castillo López, “es que a partir de la reforma de estatutos cambia todo el modo de organizar la elección de presidente del PAN, el modo de organizar los procesos internos y tendrán que fijar tiempo y tendrán que fijar reglamentos y tendrán que fijar una comisión electoral que sustituya a la Comisión Nacional de Elecciones, es una cuestión muy técnica del partido, pero desde luego que es importante para todos los representados y sobre todo para todos aquellos que quieran aspirar a la presidencia del partido tener voz y tener voto dentro de la conformación de las reglas”.

Sin embargo, de cara al proceso de elección interna se empieza a ver, el fuego amigo como es esta grabación y que a final de cuentas le hace daño a la imagen pública del partido, “el fuego amigo —dice Castillo López— solamente representa inmadurez política del que lo lleva a cabo, porque no solamente le pega al partido aquí, la gente la mayor parte de la sociedad mexicana no diferencia entre corderistas y maderistas los llama —nos llama— panistas”.

Con estudios de filosofía y política, ha participado en diversas posiciones panistas tanto en el trabajo de partido como en gestión pública, Castillo López afirma que “es importante ponderar los temas, tenemos una reforma en telecomunicaciones, una reforma energética, una reforma política que se están jugando en canchas complementarias y que hoy la política debe de estar allá, no debe de estar en la lucha interna de un partido por su presidencia, debe de estar sobre los resultados”.

“El PAN a partir de la derrota hizo tres grandes acciones, la primera fue un refrendo de militantes y decidió que no solamente era importante refrendarse sino que tal vez iban hacer menos militantes, pero que los que fueran sí fueran más panistas; en segundo lugar, hizo una reforma de estatutos muy profunda, cambió prácticamente toda la organización interna del partido, y en tercera, relanzó su agenda de transición en la que logró volver a subir los temas que fueron rechazados durante los 12 años de gobierno panista y que hoy no solamente están figurando sino que son necesarios”.

“Se están haciendo cosas a partir de la oposición, estamos cincelando México desde el Congreso y eso es más importante si Cordero y Madero están buscando la presidencia porque a final del día eso va a devenir en un ganador, pero el PAN seguirá siendo el mismo”.

De acuerdo a Castillo López, el PAN saldrá de esta elección interna “fortalecido porque la democracia siempre nos ha fortalecido”, y además “así llegaremos al 2015, pues el PAN tiene la virtud de que sabe unirse para trabajar, definitivamente las divisiones son por el poder, hay pasiones que se descarrilan, pero el partido siempre ha sabido ponerse de acuerdo en sus metas, debatiendo una tradición deliberativa y una vez junto a todos y con todos, una vez que se vote y se toma la decisión, es la virtud de tener un partido democrático, el único dentro de México”.