Sin soluciones a inseguridad y pobreza
Félix Fuentes Medina
Si el año pasado fue de intensos debates y enfrentamientos entre los partidos políticos y el gobierno federal a causa de las reformas emprendidas por el presidente Enrique Peña Nieto, el 2014 no augura un lecho de rosas para México debido a la próxima legislación de leyes secundarias y la creciente situación de inseguridad, plegada a la pobreza extrema.
Los organismos de izquierda descargarán sus baterías contra la reforma energética, bandera de la cual se han asido, presentándose como defensores de la patria y de los recursos nacionales. Esa disputa será de varios meses.
De la reforma educativa aún no puede cantar victoria el régimen de Peña Nieto. Permitió el crecimiento de la CNTE y ésta, apoyándose en vándalos anarquistas y otros grupos ajenos a la educación, insiste en la derogación de esa ley fundamental.
Los líderes principales de la CNTE, Francisco Bravo de la Sección 9 del Distrito Federal y Rubén Núñez de la 22 oaxaqueña, encabezaron un primer plantón el 8 de mayo del año pasado en el Zócalo capitalino y el 13 de septiembre siguiente los trasladó el gobierno citadino de Miguel Ángel Mancera al Monumento a la Revolución.
Mediante relevos de presuntos y reales profesores de Guerrero, Oaxaca, Michoacán y Veracruz, ese segundo plantón duró 115 días. Hasta el domingo pasado, granaderos del Distrito Federal los replegaron hacia el poniente de ese monumento histórico. Pero esto no se acaba y tanto Rubén Núñez como Francisco Bravo proyectan nuevos acarreos de mentores para reconquistar el Zócalo.
La debilidad del gobierno capitalino volvió a manifestarse en el repliegue a los profesores del domingo pasado. ¿Por qué no se procede contra los mencionados líderes, autores de diversos delitos a instituciones públicas y privadas del DF y otras entidades?
La opinión pública nacional tiene sospechas de arreglos de la CNTE con autoridades federales, señaladas éstas de la entrega de 115 millones de pesos al líder de la Sección 22. Si esto no fuera cierto, ¿por qué tan excesiva complacencia a la CNTE?
Numerosos analistas creen que ese organismo disidente del magisterio pudo desatar una revuelta general, hoy que tanta gente expresa coraje debido a la pobreza de al menos 65 millones de mexicanos y desempleo en la mayoría de las entidades del país.
Los ilícitos de Michoacán, de asesinatos constantes y quema de autobuses de pasajeros, incluso de lujo, no terminan pese a la promesa del titular de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, de sanear “municipio por municipio” hasta devolver la tranquilidad a los michoacanos.
Los maleantes se ufanan de las celadas tendidas a militares. La semana pasada ultimaron a dos de ellos. Ni con apoyos de marinos y agentes federales han podido diezmar los cárteles de las drogas. En Michoacán y en otras regiones de la república prevalece la inseguridad. Por ello se habla de duplicar el poder de las fuerzas castrenses.
En Guerrero crece el descontento. El domingo pasado tuvo lugar una marcha de al menos 10 mil hombres y mujeres de guardias comunitarias, decididas, según proclaman, a terminar con la delincuencia organizada.
Según el titular de Gobernación, Osorio Chong, los comunitarios no se han involucrado con traficantes de drogas, pero los Caballeros Templarios de Michoacán afirman que los nuevos grupos armados sí están ligados al cártel de Jalisco.
Como sea, el gobierno de Peña Nieto y los estatales de Michoacán y Jalisco tienen ante sí la doble tarea de combatir el narcotráfico y desarmar a los comunitarios. Pero es sólo uno de tantos problemas que en cascada inciden en la república.