Sara Rosalía

 

Murió el poeta, narrador y crítico de arte Mariano Flores Castro. Pertenecía a una familia ilustre. Como Antonieta y Beatriz, era hijo de Tolita. La pintora Antonieta, “La Güiri”, se casócon el fotógrafo Gabriel Figueroa y Beatriz, bailarina de danza moderna, con el director de teatro Dagoberto Guillaumin en un primer matrimonio. Dagoberto era de Huatusco y puso muchísimas obras, entre ellas Silencio pollos pelones, ya les van a echar su maíz, de Carballido. A Mariano, quien, si no recuerdo mal, tenía una hermana gemela, lo conocí cuando él estaba en la primaria. Tolita, su mamá, años más tarde se casó con Roberto Figueroa, el hermano mayor de Gabriel. María y Tolita se dedican al diseño de vestuario y Gabriel a la fotografía, todos hijos de Figueroa y la Güiri.

Yo no fui a la boda de Mariano con Virginia, la hija de Fela y Manolo Fábregas, pero Carlos Monsiváis me contó que con todo y vestido de novia tiraron a Virginia a la piscina. Un tiempo después se divorciaron y creo que fue ella, la hija de Fela y Manolo, que vivía en Nueva York y que aquel 11 de septiembre no fue a trabajar a las torres gemelas. Vi a Mariano cuando era director de artes plásticas de Bellas Artes y me consta que la respetada Raquel Tibol apreciaba su trabajo como crítico. Antonieta Figueroa me habló de su hermano Mariano hace unos meses, pero fueron cosas familiares que no es oportuno mencionar. Ahora, lo indispensable será releer su poesía y su narrativa. La escritora AnamariGomís, me comentó que fueron compañeros de generación y que, por más que había tenido problemas de salud, se fue muy pronto a los 63 años.

 

Pasajes inéditos de Camilo José Cela

Apareció sorpresivamente un original de La colmena, del Premio Nobel español, que un crítico francés, NoëlSalomon, había conservado y que contiene pasajes inéditos y otros censurados por el régimen franquista. La viuda del escritor, Marina Castaño, espera que en el centenario del escritor, en 2016, se publiquen los pasajes desconocidos.

Además de los fragmentos censurados, que obviamente formaban parte del original, hay, se dice, una escena lésbica que fue omitida antes de presentarse a la censura el 7 de enero de 1946.

En lo personal, considero que La colmena es una de las mejores novelas del siglo XX a distancia de la que le valió la consagración literaria a su autor, La familia de Pascual Duarte. La colmena sucede en un café en tres días de 1942. Es una novela deliberadamente fragmentaria que va contando en escenas sueltas la vida de los que asisten al café. Es una típica novela de posguerra, y muchas veces fue catalogada como perteneciente a la corriente existencialista.

Hay que recordar que Cela se distinguió en obras posteriores por el atrevimiento e incluso vulgaridad de su lenguaje y por su carácter francamente machista, que le valieron muchas críticas. Sin embargo, recuerdo que una vez estuvo de visita, para una lectura, en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM y que se mostró molestó, al grado de retirar el saludo, a su compañero de lectura que fue Sergio Fernández, quien leyó el espléndido relato que trata de un burdel para homosexuales de Guadalajara con un personaje llamado la Narcisa.

Y unas líneas al margen: Camilo José Cela Conde, hijo del escritor, es colaborador desde hace años de la revista Siempre.