Sinónimo de transformación económica
Julio A. Millán B.
Si quisiéramos establecer un fenómeno a partir del cual se aprecien claramente las tendencias e impactos que ha traído consigo la globalización a México, sin duda alguna sería la industria maquiladora de exportación. Desde que se establecieron en el país durante la década de los años sesenta, las maquiladoras se han convertido en sinónimo de transformación económica. Si bien a mediados de los años noventa las maquiladoras consistían principalmente de operaciones básicas de ensamblaje, tomando ventaja de los bajos costos de la mano de obra, con la firma del TLCAN han asumido un papel principal en el proceso de integración regional.
Con la apertura comercial, se esperaba un proceso de transformación interna en el que las empresas y sectores se verían obligadas a producir de manera competitiva para responder a las exigencias de calidad, precio y servicios por parte de los demandantes nacionales, pero sobre todo extranjeros. Sin duda, la industria maquiladora ha sido y es ejemplo y punta de lanza de este proceso de destrucción creativa que generó la política de crecer con el impulso que representa el mercado externo.
En el contexto nacional, las maquiladoras ha sido una importante fuente de empleos, con más de 5 mil plantas y 2.1 millones de personas ocupadas, cerca de 50% de los empleos manufactureros registrados en el IMSS. Asimismo, contribuye con 65% de las exportaciones nacionales de bienes manufacturados. Es claro que la maquiladora es un núcleo del crecimiento y del dinamismo del sector externo no financiero.
La maquiladora tiene un impacto mucho más visible a nivel regional, destacando las entidades de la frontera norte, pero también en Jalisco, Guanajuato, México, Puebla, Distrito Federal y Yucatán. Realidad que también se refleja en las exportaciones de productos manufacturados que realizan estas entidades.
Recientemente el INEGI dio a conocer estadísticas de exportaciones a nivel estatal y por sectores productivos. Según la información, diez entidades aportan 85% de las exportaciones de los principales sectores manufactureros: Chihuahua, Coahuila, Baja California, Nuevo León, Tamaulipas, Jalisco, México, Sonora, Puebla y Guanajuato. No es de extrañar que la mayoría de estos estados se localicen en la frontera norte, puesto que son los que concentran la mayor cantidad de establecimientos de la industria maquiladora.
La productividad es esencial para la competitividad ya que es un aspecto muy importante para generar excedentes exportables. Y los estados que más exportan son los más competitivos. Antes de proponerse ser competitivos es primordial elevar la productividad, pues solamente reforzando la estructura productiva local se pueden insertar los productos competitivamente en el mercado internacional. La industria maquiladora de exportación ha contribuido con creces en esta tarea, pero todavía tiene mucho trabajo por delante, el camino es fortalecer las cadenas productivas de proveeduría, lo que permite agregar valor y a su vez contribuir en mayor medida con el producto nacional.