Aniversario perredista

Teodoro Barajas Rodríguez

La irrupción del PRD el 5 de mayo de 1989 refrescó el sistema político mexicano que ocupaba una bocanada de aire tras décadas de ejercer un control monolítico, autoritario, que no dejaba espacio a la oposición, todo fue una relación simbiótica entre el gobierno y el PRI.

La fundación del PRD aquel 5 de mayo de hace 25 años fue una suerte de inercia del Frente Democrático Nacional, alianza coyuntural, como efímera, de diversos grupos en algunos casos disímbolos que dieron la pelea en los comicios turbulentos del 6 de julio de 1988. Como muchos recordarán se cayó el sistema y el fantasma del fraude recorrió el país, el operador de tales irregularidades fue el ahora tardío izquierdista Manuel Bartlett.

En su origen el PRD tuvo operarios de diferente talante, exguerrilleros, sindicalistas, expriistas, sociedad civil, su líder histórico fue Cuauhtémoc Cárdenas.

Es obvio que la situación actual varía mucho de la vivida el 5 de mayo de 1989, con el paso de los años se logró que existiese un arbitraje a través del IFE ya desaparecido como tal porque ahora es el INE. La presión de la izquierda, principalmente, dio pauta a la creación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y se alentó la participación femenil, logros existen como también los extravíos.

Si revisamos los consejos de Nicolás Maquiavelo, quien retrata más que la política la condición humana, podemos deslizarnos por la hermenéutica e interpretar que el poder también envilece y corrompe; por los resultados de los gobiernos de extracción perredista se puede afirmar que no han marcado diferencia, les acompañan escándalos de corrupción, vicios antidemocráticos, crecimiento de corrientes internas que buscan afanosamente posiciones electorales, repartición de un pastel cada vez más mermado, al igual que su ideología.

La pugna actual es la búsqueda de la dirigencia nacional, el grupo Nueva Izquierda se perfila para retener la cúpula con Carlos Navarrete, acusada de ser entreguista, haber legitimado a Enrique Peña Nieto a través de su participación del Pacto por México, lo cual dividió el perredismo. El líder histórico del Sol Azteca Cuauhtémoc Cárdenas ha dicho que dirigiría a su partido si es candidato único, lo cual es casi imposible.

El próximo año se evaluará en los comicios federales si el PRD puede mantener, al menos, el 19% logrado en la votación para diputados en el país en 2012, enfrenta diversos pendientes porque disputará palmo a palmo el voto con el naciente Morena que tiene como su principal activo al experredista Andrés Manuel López Obrador, el dirigente formal es otro excuadro del PRD de nombre Martí Batres.

En 9 estados el PRD apenas alcanza el 6% de las votaciones, en el norte de México su presencia es incipiente, en el sur y la capital del país ha logrado sus triunfos más memorables.

25 años del PRD han marcado la historia reciente, contribuyó para abrir el sistema político mexicano, aunque en la actualidad suele mostrar signos decadentes.