Miles de personas recibieron ayer en el aeropuerto de Viena a Conchita Wrust, ganadora del festival de Eurovisión en Copenhague con su canción “Rise like a Phoenix”

En medio de gritos de “Conchita Conchita”, los fanáticos de la drag queen le dieron una cálida bienvenida a la joven cantante que consiguió el segundo título de Eurovisión para Austria desde 1966.

 Visiblemente emocionada, la nueva diva de la canción europea levantó ante las cámaras de un centenar de periodistas el trofeo que recibió anoche y tardó varios minutos hasta poder alcanzar el coche que le iba a llevar a una rueda de prensa.

Conchita Wurst, el alter ego del cantante Tom Neuwirth, de 26 años, ganó el festival de Eurovisión situándose delante de Holanda y Suecia, con una canción al estilo de la película de James Bond y con una actuación marcada por su llamativa personalidad y barba.

Conchita dijo que ansía “un futuro sin exclusión y discriminación” y que esa fue una de las razones para ir a concursar a Copenhague. Lo de ayer (el sábado) no fue un triunfo sólo para mí sino para la gente que cree en un futuro que funciona sin discriminación y basado en la tolerancia y el respeto”, afirmó en rueda de prensa tras su regreso a Viena. (EFE y DPA)