La Oficina de prensa del Servicio de Situaciones de emergencia reportó el hallazgo de los cuerpos de 121 personas de las 298 –incluidos tres bebés y 15 tripulantes- a bordo del avión Malaysia Airlines que volaba de Ámsterdam a Kuala Lumpur y que fue derribado ayer jueves, por un misil cerca de la frontera entre Rusia y Ucrania; adelantó que continuará la búsqueda de más víctimas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó de la muerte del portavoz Gienn Thomas quien iba a bordo del Boeing 777 y solía asistir como portavoz de la organización a las conferencias de prensa semanales que ofrecen diversas agencias de Naciones Unidas en Ginebra, “Perdimos a un gran colega en el vuelo MH17: Gienn Thomas, Miembro de mi equipo. Lo vamos a extrañar”, confirmó en su cuenta de Twitter un alto directivo de comunicación de la OMS, Gregory Hartí.
Los combatientes prorrusos de la autoproclamada República Popular de Donetsk, que luchan contra el gobierno de Kiev, han mostrado disposición ante una posible tregua que podría durar de 2 a 3 días para que se investigue el accidente, quienes encontraron ayer la caja negra del avión que entregarán a inspectores internacionales; este viernes se localizó la segunda caja negra.
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, insistió en la necesidad de realizar una investigación “completa e imparcial” de los motivos del colapso de la aeronave; de igual forma, el ministro de Malasia, Najib Razak, aseguró que su país investigará exhaustamente la causa de la caída del avión e informó que se establecieron varios centros de emergencia. Reveló también que conversó por teléfono con el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, quien se comprometió a investigar a fondo y de manera independiente, así como a cooperar con Malasia.
Poroshenko calificó el incidente de “acto terrorista”, mientras que Putin atribuyó la responsabilidad a Kiev por haber reanudado la ofensiva en el Este. El gobierno holandés, asimismo, quiere una investigación independiente que determiné lo ocurrido con el avión Malasyan Airlines, ya que 154 nacionales de ese país murieron.
Al respecto, el presidente de Estados Unidos Barack Obama, dijo que un misil tierra-aire disparado desde territorio controlado por separatistas respaldados por Rusia en Ucrania fue el responsable de derribar el avión de pasajeros malasio, y señaló que su homólogo ruso, tenía el mayor poder para reducir la violencia en Ucrania y había decidido no hacerlo, así como que separatistas ucranianos habían recibido apoyo desde Rusia, incluso armas antiaéreas.
En un comunicado de prensa, el director de la Interpol , con sede en la ciudad de Lyon, este de Francia, Ronald K. Noble, ofreció su “apoyo pleno” para “ayudar en la identificación y la repatriación de los restos a sus países” de las 298 personas que.
El máximo dirigente de la organización policiaca internacional señaló también que “trabajará para ayudar a determinar si alguno de los pasajeros del vuelo usaba un pasaporte que había sido reportado como robado o si alguno estaba ligado a conductas criminales serias” y que “si es solicitada”, Interpol puede desplegar un equipo de respuesta a incidencias que puede incluir a expertos en identificación de víctimas y apoyo analítico.
Ante las discrepacncias en las versiones del colapso del avión, el ministro de Transportes de Malasia, Liow Tiong Lai, defendió la decisión de seguir con la ruta por la que atravesó el avión Malasia Airlines e indicó que la ruta había sido declarada segura y sin restricciones de vuelo por la Organización Internacional de Aviación Civil (IACO) y por la Asociación Internacional de Trasporte Aéreo (IATA).
