GARBANZOS DE A LIBRO

 

 

Acaba de publicar su primera novela

 

 

Marco Aurelio Carballo

“Tuve la suerte de tener una mujer excepcional”, declaró Dario Fo”, pintor, comediante, dramaturgo, Nobel de 88 años. Con ella, que murió el año pasado, en el 2013, vivió 60 años. Hijo de un ferroviario socialista quiso ser pintor antes de escribir. Con su esposa creó una compañía y montó un centenar de obras, desde Muerte accidental de un anarquista, que lo hizo figura de la izquierda italiana. Sumaron como mil representaciones.

De su mujer agregó: “Fue mi profesora, mi maestra en el teatro y en la vida. Vivimos juntos. Superamos dramas graves. Ambos vivíamos la violencia, la censura por parte del poder y de la policía. Estuvimos 16 años fuera de la televisión por los temas que abordábamos. Incomodábamos. Franca Rame, sin falsas modestias, fue una mujer con una moral especial en los teatros”.

“Los que han leído esta novela de Lucrecia —agregó— me preguntan si es un homenaje a ella, a la esposa. Me quedé perplejo porque la ponen al nivel de Lucrecia Borgia. Aunque hizo cosas con mucho coraje, creó un grupo para ayudar a gente de la cárcel, a sus familias. Quiero decir que Franca luchó y cuando hubo la guerra entre árabes e israelíes escribimos juntos, pero quien llevó todo adelante fue ella”. “Franca sabía —dijo Fo— de la situación de la mujer. El poder siempre quiso que ella lo pagara. Lo que me hizo a mí el poder y la vida no es nada comparado con lo que le hicieron a ella. En 1973 fue secuestrada y violada por un grupo de extrema derecha. Esa es la verdadera presencia escénica de Franca en mi vida”.

Acerca del apoyo de los gobiernos y de los empresarios a la cultura, el Nobel dijo: “Sólo Francia muestra interés en tener una inteligencia operativa, respetando la cultura. Hemos tenido, en Italia, un ministro de economía, Tulio Tremonti, que dijo que «con la cultura no se come». Ahora todo es dinero. Oro. Aunque la verdad es que los ladrones no entienden de arte… No hay que ceder. Se juega el prestigio de los intelectuales. La población, la ciudadanía está atónita, ebria, borracha de problemas, de programas políticos, de tener esperanzas”.

A Dario Fo lo entrevistaron para El País Semanal después de publicar su primera novela, luego  de una vida consagrada al teatro, que trata sobre la vida de Lucrecia Borgia.