Entrevista a Agustín Basave/Miembro del Consejo de la Reforma Política del DF

Nora Rodríguez Aceves

Ante la puesta en marcha de los trabajos de dictaminación de la reforma política constitucional del Distrito Federal en el Senado de la República, luego de que los coordinadores de los principales fuerzas políticas del PRD, del PRI y del PAN se comprometieron a avanzar y concretar lo antes posible esta reforma, que, según los legisladores, no fue falta de voluntad política lo que impidió sacarla el año pasado, “sino que se trabajaron otras reformas en paralelo, tales como la de telecomunicaciones y la energética”, pero hoy como lo afirmó el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Miguel Barbosa, “ya llegó el momento para la reforma política del Distrito Federal”.

Sin embargo, a pesar de este escenario tan favorable que se dice tener, puesto que “en el periodo pasado se avanzó y se cuenta ya con todos los elementos generados del diálogo y discusión en las mesas de trabajo para sacar la reforma” en este periodo ordinario de sesiones, Agustín Basave Benítez, miembro del Consejo de la Reforma Política del Distrito Federal expresa su escepticismo sobre si efectivamente se aprobará ya esta reforma que por tantos años ha esperado la ciudad de México. “Parece que sí, eso es lo que creo y es lo que cree mucha gente, pero yo, como Santo Tomás, ver para creer; daría la impresión de que ya están dadas las condiciones para que salga, que ya que pasó el tema más ríspido de las reformas llamadas estructurales que era la energética pudiera darse el paso siguiente hacia esta reforma política de la ciudad de México, ojalá que así sea”.

¡Es urgente!

Aunque “no se puede olvidar que se tienen ya a la vuelta de la esquina las elecciones federales y nueve elecciones de gobernadores en los estados, y que eso inaugura, abre una etapa de disputa política, incluso, de una inminente guerra electoral que puede contaminar las cosas y puede obstaculizar la reforma. Por eso, repito una y otra vez la palabra urgencia, y si se va a hacer tiene que ser ahora, ¡ya!, porque muy pronto van a pintarse la cara para la guerra los partidos, los líderes de los partidos y lo único que se estará usando es la lógica cortoplacista de la ganancia suma cero de la lucha político electoral, o sale pronto o tendremos que esperar todavía a que pasen las elecciones de 2015; yo creo que el tiempo es ahora”.

El también académico de la Universidad Iberoamericana, explica a Siempre! el para qué de una reforma política del Distrito Federal: “porque la ciudad de México durante muchísimo tiempo, demasiado tiempo ya, ha padecido las consecuencias de ser tratada como una especie de apéndice de la federación, no se le ha otorgado la mayoría de edad o no se le ha reconocido la mayoría de edad que realmente tiene, y por eso no tiene una propia Constitución como lo tienen las demás entidades federativas. Esta ciudad en donde vive una enorme cantidad de personas en donde se asientan, efectivamente, los poderes federales y buena parte del motor de la economía nacional se maneja de manera casi como si fuera minusválida, como si no pudiera manejarse por sí misma, como si sus ciudadanos, sus habitantes no pudieran tampoco determinar su propio rumbo”.

Por eso “urge ya, de un tiempo para acá, el que la ciudad tenga, primero, su propia Constitución y le pueda dotar de los instrumentos para tomar sus propias decisiones en lo fundamental, y segundo, crear una forma de funcionar que le dé al mismo tiempo esa autonomía y eficacia. Se han discutido muchos modelos diferentes, hay quienes piensan que debe ser un estado; yo no, yo no soy de quienes creen eso, no puede ser un estado por la sencilla razón de que es una ciudad y debe tratarse con lógica de ciudad. Sí es una ciudad capital, es una ciudad muy grande, es el centro de México en muchos sentidos no puede, por ejemplo, en las delegaciones, considerarse, tratarse y funcionar como municipio, a mi juicio”.

Darle carácter de estado no es la solución

“En los estados de la república, cuando vemos estas manchas urbanas que constituyen centros o áreas metropolitanas sobre todo en las capitales de algunos estados, pienso en el mío, de donde soy originario, Nuevo León, en donde la capital Monterrey está rodeada de muchos municipios conurbados que le dan a esa zona habitacional, a ese conglomerado humano un carácter diferente al resto de los municipios y se tienen que crear entonces comisiones metropolitanas de coordinación municipal para que los servicios se otorguen, se den de manera eficaz y eficiente; ésa sería no la excepción sino la regla en la ciudad de México, las delegaciones están en esa condición de áreas conurbadas”.

“De hecho hay una conurbación que va más allá de la ciudad de México que se da con municipios del Estado de México y con la cual tiene que haber mucha comunicación porque los problemas son comunes y las soluciones también deben ser comunes; darle carácter de estado con municipios, en mi opinión, no sería la solución, pero sí darle una Constitución como la tienen los estados, ése es de entrada el planteamiento.”

Ante las expresiones de celebración por parte de los senadores del PRD por el acuerdo político entre los coordinadores parlamentarios y órganos directivos del Senado “para dar luz verde a una reforma que se ha postergado durante mucho tiempo”, el doctor en ciencia política por la Universidad de Oxford, Inglaterra, asegura: “primero esto de que ya hay luz verde, no lo sé, ojalá, parece, pero desde hace tiempo también lo parecía y no pasó nada, desgraciadamente están sujetando la ciudad de México a una serie de negociaciones y de correlaciones de fuerzas a las que no debería estar sujeta. El asunto es prioritario, la ciudad es muy importante, y esta reforma política tan necesaria, tan urgente no debe de estar condicionada a que saquen una u otra reforma antes o a que un quid pro quo entre los partidos políticos sea mucho más importante que eso, pero la realidad política es otra”.

Además, “sí existe ya una iniciativa, de hecho hay varias iniciativas desde hace mucho tiempo, pero ya hay una iniciativa digamos que tiene o aparenta tener el consenso de las fuerzas políticas y sólo es cuestión de que haya eso, voluntad, voluntad política para sacarla”.

Lo importante es que “salga”

Por lo tanto, “el tema está lo suficientemente maduro como para ya ser aprobado y que se elija ya una asamblea legislativa constituyente, porque había dos opciones: una era elegir una asamblea específicamente constituyente cuyo único propósito sería elaborar la Constitución de la ciudad, y otra era elegir la asamblea normalmente en 2015, la «asamblea ordinaria», y dotarla del carácter de constituyente. Cualquiera de las dos puede ser, lo importante es que se dé de una vez”.

El jefe de Gobierno “ha estado involucrado en este proyecto desde el principio, tengo la impresión de que fue una de sus grandes prioridades desde que llegó a la oficina de la jefatura de Gobierno. Tiene que haber desde luego una división de poderes como la hay a nivel nacional, no separación sino división de poderes que permitan un equilibrio entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial de la propia ciudad”.

“¿Qué es lo que tenemos que tomar en cuenta?, que no caigamos en el mismo error, en el mismo vicio de las demás entidades federativas de este país en donde se ha creado un poder omnímodo por parte de los gobernadores”.

La ciudad es eje nacional

“Aquí no ocurre lo mismo porque esta ciudad es el eje de lo que llamamos nacional, del ámbito nacional, aquí hay una prensa, una radio, televisión, medios —digamos, en general— más independientes, más fuertes, aquí hay una atención mediática más, no solamente nacional sino también internacional que impide ejercer prácticas feudales como lo hacen en los estados. Aquí hay contrapesos reales”.

También hay que “dar espacio a la participación ciudadana, eso es otra cosa; en los estados, en algunos estados, por lo menos, es precario, aquí hay que dar espacios a la participación ciudadana, y yo en lo personal vería con buenos ojos la creación de un consejo económico y social como se ha propuesto en la esfera nacional”.