Al menos 50 personas murieron, entre ellas hay seis niños y cinco policías locales, y más de 70 resultaron heridas este lunes en un ataque suicida durante un partido de voleibol en la provincia de Paktika, en el sureste de Afganistán, informaron a fuentes oficiales.

El vicegobernador de la provincia de Paktika, Ataullah Fazli, indicó telefónicamente que 50 personas murieron en el ataque, ejecutado cerca de las16.30 hora local en un recinto deportivo en el que se jugaba la final de un torneo entre distritos, por lo que mucha gente se encontraba concentrada en el lugar.

“Fue un suicida con una chaqueta cargada con explosivo que detonó entre cientos de espectadores”, dijo Fazli, y que 14 personas han perdido sus vidas en el hospital debido a la gravedad de las heridas.

Además, explicó que varios helicópteros han sido enviados a la zona para trasladar a los heridos a Kabul debido a que 32 de ellos estaban en situación crítica y reconoció que la capacidad hospitalaria de la provincia no es suficiente para tratar en condiciones a los lesionados, por lo que ha sido necesario trasladarlos a la capital afgana.

Los cadáveres han sido reunidos en un lugar bajo custodia de las fuerzas de seguridad, que los entregarán mañana a sus familiares, ya que muchos de los asesinados sufrieron daños en sus cuerpos que impiden su reconocimiento hasta el momento.

El ataque se produce después de que la Cámara baja del Parlamento afgano aprobara hoy por mayoría el acuerdo de seguridad con Estados Unidos que prolonga la presencia de tropas norteamericanas en Afganistán.

Ayer en la provincia de Nuristán, en el este del país asiático, murieron dos militares y 22 insurgentes, mientras también resultaron heridos dos miembros del Ejército, un policía y 27 talibanes al repeler las fuerzas de seguridad un ataque contra una de sus bases.

Afganistán vive una de sus etapas más violentas después de que el año pasado sus fuerzas militares se hicieran responsables de la seguridad luego de la retirada paulatina de la misión de la OTAN, la ISAF, que culminará a finales de 2014; la OTAN ha anunciado que mantendrá en el país a unos 12 mil 500 militares a partir de 2015, de los cuales alrededor de 9 mil 800 soldados son estadounidences.