El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon y el gobierno estadounidense a través de su embajador en Nigeria condenaron fuertemente los ataques perpetrados en una escuela secundaria en Potiskium, en el noreste de Nigeria. El ataque fue atribuido a los rebeldes islamistas de Boko Haram quienes hasta el momento, han asesinado a miles de civiles africanos.
La UNESCO se suma a la condena argumentando que Nigeria es el país con más niños fuera de la escuela en el mundo y que más ataques a escuelas ha recibido. Numerosos gobiernos de todo el mundo han condenado las acciones de la guerrilla pero al parecer, nadie ha podido replegarla.
Boko Haram ha trasgredido las fronteras nigerianas y ha perpetrado ataques en otros países, por ejemplo Camerún, que recibió un ataque simultáneo a 6 localidades en el norte del país el pasado 9 de noviembre. El saldo fue de tres civiles muertos. Las fuerzas militares luchan por replegar a la guerrilla pero los encuentros son cada vez más violentos ya que los rebeldes intensifican sus ataques así como su capacidad de conseguir armamento y vehículos blindados.
A pesar de la condena mundial, y de que Nigeria es el quinto mayor contribuyente de mujeres militares en las operaciones del mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas, los cascos azules, no ha quedado claro si el gobierno pondrá en marcha mecanismos de desarticulación de la guerrilla. El gran reto del próximo gobierno nigeriano, a decidirse en febrero de 2015, será contraer fuertes compromisos para pacificar el norte del país.
Con información de Le Monde-Afrique y Agencia Nigeriana de Noticias (NAN).
14 de noviembre de 2014