La policía china investiga el caso de más de cien novias vietnamitas que desaparecieron de varias aldeas rurales en la provincia de Hebei, después de casarse con hombres de la localidad, según un informe de la BBC de Londres.
Un funcionario de esa provincia informó a los medios estatales, citados por la cadena británica, que probablemente un grupo de la delincuencia organizada está involucrado en esa desaparición masiva, ya que el caso apunta a un posible tráfico de mujeres, para ser vendidas fuera de las fronteras asiáticas.
Se informó que los novios habían pagado por las mujeres a una casamentera vietnamita llamada Wu Meiyu, que había vivido en China durante más de 20 años y que a principios de este año, recorrió áreas rurales de Hebei en busca de clientes, consciente de que la compra de mujeres en el extranjero, es una práctica cada vez más popular. La mujer ofreció a los solteros “conseguir” una esposa de Vietnam a cambio de una determinada suma de dinero.
Un hombre llamado Zhu explicó al diario The Beijing Times, que su esposa, vietnamita, salió el 20 de noviembre de su casa para reunirse con otras mujeres y desde entonces está desaparecida. Lo mismo ocurrió con las otras recién casadas y hasta el momento no se sabe nada de su paradero. Los maridos acudieron a la casa de la mediadora matrimonial a pedirle cuentas y descubrieron que se había marchado dos días antes.
La única noticia sobre su paradero la ha dado el diario local “Jinghua Daily” que ha informado de que al menos una novia regresó y declaró que perdió el conocimiento, después de la comida y luego se encontró en una pequeña casa lejos de la aldea de Quzhou, donde vive su marido. Cuando despertó estaba en una habitación sin luz, donde unos hombres le dijeron que la llevarían a otro lugar a “encontrar otro marido”, pero logró escapar y regresar a Quzhou para presentar la denuncia ante la policía.
Cabe destacar que en China hay un fuerte desequilibrio demográfico, hay alrededor de 20 millones de hombres más que mujeres. Para casarse, los hombres deben pagar una “dote” de entre 6 mil 500 y 26 mil dólares, por lo que en las zonas rurales más pobres, los hombres deciden comprar a sus esposas en una suma cercana a los 6 mil dólares, pero incluyen los gastos de la boda, el pasaporte, el visado y los billetes para el transporte.
Con información de ABC España y de la Agencia Carabobeña de Noticias.