El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, firmó este miércoles peticiones para adherirse a 23 organizaciones internacionales, entre ellas y principalmente, la Corte Penal Internacional (CPI).

La decisión se produce un día después de que el Consejo de Seguridad de la ONU rechazara una resolución presentada por 22 países árabes y la Autoridad Palestina por la que se instaba a israelíes y palestinos a alcanzar un acuerdo de paz en 2015.

Abbas, de quien su popularidad se ha visto afectada desde la ofensiva de Gaza del verano pasado, responde con la firma del Tratado de Roma a una creciente presión por parte de los ciudadanos palestinos, que le exigen una solución al conflicto.

En mitad de una lucha de poder entre Hamás y Fatah, el presidente palestino trata de demostrar su capacidad de influencia internacional frente al movimiento islamista; Estados Unidos e Israel amenazan con severas sanciones económicas a partir del momento en el que firme el acuerdo

Sin embargo, la decisión supone correr importantes riesgos, ya que al unirse al Tribunal de la Haya, los palestinos podrían enfrentarse a numerosas causas legales, entre otras cosas, por el lanzamiento de cohetes desde Gaza contra Israel este mismo año.

“No hay duda sobre cuáles van a ser las consecuencias, va a haber sanciones económicas estadounidenses e israelíes de inmediato. Estas sanciones gradualmente van a ser más severas y esto de hecho podría ser el comienzo del final de la Autoridad Palestina. Ellos los saben”, señaló el director del Centro Palestino para Investigación de Política y Encuestas, Jalil Shikaki, en una conversación con medios norteamericanos.

La firma de Abbas del Tratado de Roma no tendrá una repercusión inmediata, ya que existe un procedimiento para que un país se adhiera a la CPI, aunado a que no es seguro en este momento que los Territorios Palestinos cumplan todos los requisitos necesarios para formar parte del tribunal.

Información de El País España