Cinco senadores demócratas y republicanos presentaron este jueves un proyecto de ley con el fin de levantar el embargo estadounidense de más de cinco décadas contra Cuba, casi dos meses después de que el presidente Barack Obama anunciara medidas para normalizar las relaciones con la isla de Gobierno comunista.
El proyecto revoca provisiones de leyes anteriores que impedían a los estadounidenses hacer negocios con Cuba, aunque no deroga partes de la legislación respecto a reclamos sobre derechos humanos o propiedad contra el Gobierno de la isla.
Presión estadounidense
Estados Unidos está presionando a Cuba en busca de la apertura de su embajada en La Habana para abril, dijeron en días recientes funcionarios en Washington a Reuters, ante lo que el gobierno comunista demanda que antes se le retire de la lista de Estados que patrocinan el terrorismo.
Una negativa de Cuba que impida que Estados Unidos establezca una embajada oficial con rapidez por primera vez en más de cincuenta años podría complicar la relación entre las partes.
Retirar a Cuba de la lista de países que respaldan al terrorismo podría tomar hasta junio o más, pese a que la Casa Blanca está presionando para que se actúe de inmediato, dijeron dos funcionarios estadounidenses enterados de la revisión del Departamento de Estado respecto al proceso.
Además, aseguraron que Washington busca restablecer las relaciones diplomáticas antes de la Cumbre de las Américas que se realizará en Panamá en abril, cuando el presidente Barack Obama se reunirá con el líder cubano Raúl Castro, desde la última vez en 2013.
Ambos líderes anunciaron un histórico acuerdo el 17 de diciembre para restaurar las relaciones; diplomáticos de EU y Cuba se reunirán este mes o en los primeros días de marzo en Washington para una segunda ronda de negociaciones.
Aunque el restablecimiento de relaciones podría ejecutarse pronto, el proceso para normalizarlas, que incluye el fin del embargo comercial que Washington mantiene sobre la isla tomará mucho más tiempo.
Para Cuba, es una prioridad ser removida de la lista de promotores del terrorismo ya que considera una injusticia estar ahí; salir significaría una victoria de propaganda a nivel nacional e internacional.
Washington incorporó a Cuba a la lista en 1982, argumentando que el gobierno del entonces presidente Fidel Castro entrenó y armó a rebeldes comunistas en África y América Latina; la lista de países incluye también a Irán, Sudán y Siria.
Información de El Universal