El Parlamento alemán dejó de obstaculizar para que Grecia evite la bancarrota; aprobó este viernes en consenso la ampliación del paquete de ayuda a Grecia. Con 542 votos positivos de 587, se decidió la prórroga del programa de estabilidad que evitará por cuatro meses la quiebra del país, lo que supondrá el aporte de 9 mil millones de euros de ayuda adicional.

La votación creó divisiones en el centro de la gran coalición de la canciller alemana Angela Merkel a tal grado que, según reportó la revista alemana Der Spiegel, 22 diputados cristianodemócratas se resistían a apoyar al gobierno en la decisión; al final 32 legisladores votaron negativo y 13 se abstuvieron. Al respaldo mayoritario se unieron también la oposición de la izquierda que dio el sí para respaldar al gobierno griego.

La decisión fue precedida por una comparecencia en la cámara del minislro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble —uno de los críticos más insistentes del nuevo gobierno de Atenas—, que sin embargo, pidió que se renovara el apoyo a Grecia con el argumento de que una salida de este país de la eurozona tendría más costos que beneficios para Alemania y los demás países que hacen uso de la moneda común.

De cualquier forma, Schäuble ha mantenido la presión de los últimos días sobre el gobierno izquierdista de Alexis Tsipras, “Grecia tiene que hacer su parte. Obviamente la solidaridad también tiene que ver con al confiabilidad”.

Asimismo, expresó abiertamente sus criticas respecto a las discusiones de los últimos días en las que representantes del gobierno griego han cuestionado la lista de reformas que habían entregado a Bruselas para dar paso a la prórroga de las ayudas e insistió en que el Parlamento no debía decidir sobre concesiones a Atenas, “no se trata de nuevos miles de millones a Grecia ni de ciertos cambios en este programa”.

Lo principal es que Atenas reciba cuatro meses más de tiempo para que concluya con éxito el segundo paquete de ayuda, que ya está en vigor hace años, dijo el funcionario.

La postura más conciliadora de Schäuble de este viernes contrastó con la de un día anterior, luego de haberse declarado “atónito” por los comentarios de su par griego Giannis Varoufakis, que volvió a pedir una quita de la deuda y un abandono de privatizaciones acordadas, después de la lista de reformas que le pedía Bruselas.

También el presidente del Parlamento Europeo, el socialdemócrata alemán, Martin Schulz, advirtió el gobierno griego sobre declaraciones que afecten su confiabilidad.

El pleno se había abierto con la intervención del ministro Schäuble, quien ha defendido la extensión del programa por cuatro meses con el argumento de que Atenas se ha comprometidos a cumplir términos, aunque admitió que apoyar la prórroga no ha sido una “decisión fácil”.

Disturbios contra el gobierno griego

La primera protesta contra el Gobierno de Grecia desde la llegada de Alexis Tsipras al poder concluyó con intensos enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía antidisturbios en Atenas.

Unas 450 personas se concentraron en la capital griega para protestar por lo que han considerado una traición del Gobierno de Tsipras para acordar con sus socios de la Unión Europea la prórroga del programa de ayudas.

El acuerdo desato enojo en la izquierda griega, incluso en las filas de la gobernante SYRIZA, al considerar que con ello Tsipras ha ido contra sus promesas electorales de acabar con la “troika” y el rescate.

Al término de la protesta, un grupo de unas 50 personas vestidas de negro lanzaron bombas molotov y piedras contra los policías antidisturbios que vigilaban la manifestación, con lo que se dio lugar a un enfrentamiento en el distrito de Exarchia, un barrio bohemio asociado con artistas e intelectuales de izquierda.