Corea del Norte tiene la capacidad de disparar un arma nuclear y podría usar un misil como respuesta en caso de ser atacada, indicó el embajador del país en Reino Unidos a Sky News.

“No es Estados Unidos el que tiene el monopolio de un ataque con armas nucleares”, advirtió el embajador Hyun Hak-bong.

Al ser cuestionado sobre sí eso implicaba que Corea del Norte, que abandonó el tratado de no proliferación nuclear en 1993, tenía la capacidad de disparar misiles nucleares ahora, respondió “en cualquier momento, en cualquier momento, sí”.

“Si Estados Unidos nos ataca, deberíamos responder. Estamos listos para una guerra convencional (…), estamos listos para una guerra nuclear. No queremos la guerra, pero no le tememos a ella”.

Estados Unidos ha dicho que está seriamente preocupado sobre el trabajo nuclear de Corea del Norte, que considera vulnera los acuerdos internacionales.

Sin acuerdo nuclear Irán – EU

Con el objetivo de limitar el programa nuclear iraní y aliviar las sanciones que afectan a la economía del país árabe, termina sin acuerdos la ronda de negociaciones entre Washington y Teherán.

Los equipos negociadores liderados por el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, John Kerry, y su contraparte de Irán, Mohammad Javad Zarif, suspenden la mesa negociadora por unos días; el diálogo se reanudará el próximo 25 aún sin confirmar la locación.

Las negociaciones con Irán se llevan a cabo bajo el nombre de P5+1, integrado por EU, Reino Unido, Francia, Rusia, China más Alemania, cuyos ministros de exteriores se unirían este sábado en la ciudad suiza de Lausana, donde se han reunido recientemente, lo que creó expectaciones de observadores y de la prensa internacional.

El nivel de tensión se eleva conforme pasan los días, debido a que se debe llegar a un acuerdo antes del 31 de marzo cuando vence le plazo, el cual al parecer no será extendido como en ocasiones pasadas, para ir afinando los detalles en los meses posteriores y poder pasar a la firma de un tratado histórico antes del 30 de junio.

Lo que busca el acuerdo es que Irán demuestre de forma plena que su programa nuclear es únicamente pacifico y que de manera irrefutable no persigue enriquecer uranio para fabricar una bomba atómica; a cambio de ello, las potencias del P5+1 se comprometen a levantar las sanciones que afectan la economía iraní.