El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, firmó este lunes una orden ejecutiva por la que declara a Venezuela una amenaza para la seguridad nacional estadounidense y establece sanciones para seis funcionarios del régimen de Nicolás Maduro.
En el documento, el presidente estadounidense expresa su preocupación por las amenazas del Gobierno venezolano contra la oposición; desde 2010 ambos países no intercambian embajadores.
“Las autoridades venezolanas que en el pasado y el presidente han violado los derechos humanos de sus ciudadanos y se han visto envueltos en actos de corrupción, no son bienvenidos aquí”, expresa el presidente en su mensaje que supone un paso diplomático al frente de los EU y un ultimátum para el Gobierno de Maduro, cada vez más acosado por la caída del precio del crudo, la escasez y la violencia en las recurrentes protestas de la oposición.
El presidente norteamericano recuerda en la orden ejecutiva que el gobierno venezolano “debería poner en libertad a todos los presos políticos, incluidos docenas de estudiantes y el líder de la oposición, Leopoldo López”, en prisión desde hace más de un año.
Manifestarte es muerte
Llegaron de España para estudiar con una lección aprendida de su país “En Venezuela manifestar tu opinión es delito y la condena puede ser pagar con la vida”, aseguran; es la enseñanza tras la trágica muerte de Keylorth Roa, el adolescente de 14 años asesinado por las balas de la Policía en días anteriores en San Cristóbal de Táchira.
Los jóvenes integrantes de la delegación española de la Asociación de Estudiantes Venezolanos en el Exterior (AEVE) así lo expresaron en rueda de prensa en Madrid, capital europea acogidos por su oferta académica y desplazados por la situación de violencia, desabastecimiento y tensión política de su patria.
La indignación se ha desatado por la muerte del menor, una más desde que el pasado mes de febrero se intensificaron las protestas contra el Gobierno de Nicolás Maduro; según observadores como la ONG Amnistía Internacional, van al menos 44.
Para los jóvenes de AEVE, en nada ayuda la situación que Javier Mora, el funcionario de 23 años, presuntamente, disparó al joven, esté formalmente acusado de homicidio intencionado, ni que el presidente Maduro se apurara a afirmar que en “Venezuela está prohibida la represión armada”.
La muerte de Roa en medio de los enfrentamientos entre las fuerzas del orden y manifestantes ha vuelto a causar controversia respecto a la resolución 08610 del Ministerio de Defensa, que autoriza a los militares el empleo de “fuerza potencialmente mortal” como “último recurso” para mantener el orden en manifestaciones violentas.
La disposición ha sido denunciada por destacados juristas que afirman que va contre el artículo 68 de la Constitución, que prohíbe explícitamente “el uso de armas de fuego y otras sustancias tóxicas en el control de manifestaciones pacíficas”.
Se van como si fueran delincuentes
Además del hostigamiento político cargado de violencia y opresión, también se evidencia el financiero, lo que denuncian los universitarios; proceden en su mayoría de familias con cierto poder adquisitivo, la “burguesía golpista”, y tienen el dinero para pagar sus estudios en el exterior, pero las autoridades no les permiten que lo retiren del país.
Todo venezolano que pretenda cambiar una cantidad significativa de moneda nacional por dólares o euros debe dirigirse a este organismo para detener la autorización y los miembros de la organización estudiantil se están encontrando con que sus peticiones son rechazadas por sistema.
“Ha habido instituciones como la Universidad de Alcalá de Henares que aceptaron prorrogar los plazos de pago, pero otras ejercieron presiones para que los estudiantes pagaran y muchos han terminado yéndose de España como si fueran delincuentes”, denuncia su secretario, Henry Sosa.
