Expresión de identidad comunitaria
Todo lo que se engarza con la afectividad
es también lo que somos.
Emilio Lledó Íñigo
José Alfonso Suárez del Real y Aguilera
Ante los procesos de gentrificación que se registran en varias colonias de nuestra ciudad, resulta vital adoptar la participación vecinal como una política pública propiciatoria de la defensa del arraigo vecinal en la que niños y jóvenes, en equidad participativa, asuman su barrio y su colonia como una expresión comunitaria digna de ser reconocida y preservada.
Sólo así, con este concurso social integral, se provocarán acciones asertivas de defensa de la permanencia digna de los vecinos en sus casas, sus barrios y sus colonias. Sólo así, con la aplicación de la consulta vecinal y de la acción pública como mecanismos efectivos y exigibles de actuación social en todos los procesos de desarrollo urbano, se dará el justo valor a los programas gubernamentales del ramo, porque sólo entendiendo que son las personas y sus familias, antes que los edificios, las que dan valor, historia y carácter a las calles de la Ciudad de México, ésta se consolidará como el escenario democrático al que aspiramos legítimamente sus habitantes.
A la par de estas propuestas, para los candidatos de Morena nos resulta necesario defender la reapropiación del espacio público como escenario social de la creación y del gozo del patrimonio cultural, que es expresión sublime de la identidad comunitaria; y para ello, nos proponemos asignar los recursos que requieran la formación y financiamiento de equipos promotores culturales ¾por pueblo, barrio, colonia y delegación¾ a partir de perfiles personales de compromiso, capacidad, convicción y solidaridad social, cuya labor y entrega garanticen la recuperación de la memoria histórica de la urbe, como parte sustantiva de la defensa del apego social al espacio comunitario en el que se desarrolla la vida vecinal.
Reivindicar los mecanismos de transferencias de potencialidades previstas por las normas del desarrollo urbano, debe ser el motor principal del urgente equilibrio que bajo el principio de “moderar la opulencia y la indigencia” logre que toda potencialidad otorgada al promotor inmobiliario lo obligue a regenerar un barrio o una colonia marginada en la misma delegación en la que desarrolla su proyecto inmobiliario.
Será tarea fundamental de los legisladores locales de Morena formular las leyes y presupuestos necesarios que garanticen a la sociedad y a su gobierno ciudadano el contar con medios de comunicación públicos que construyan ciudadanía y no consumidores, que fomenten los valores urbanos y el arraigo vecinal, que preserven la solidaridad humana e impidan que desaparezcan los sentimientos de solidaridad y responsabilidad ética entre los habitantes del Distrito Federal, provocando con ello la concordia que distingue a la capital de la república.
Parafraseando al premio Princesa de Asturias 2015, el filósofo español Emilio Lledó, estamos convencidos de que todo lo que se engarza con la afectividad hacia la ciudad, es una expresión patente de nuestra identidad.