Oskar Gröning cuenta con el dudoso honor de ser uno de los pocos guardias de Auschwitz que siguen vivos y no han sido condenados. Hace unas semanas pasó por el juzgado acusado de ser cómplice de más de 300,000 muertes (algo que él se limitó a negar afirmando que era sólo un contador).
Haya o no haya sido cómplice de las ejecuciones cometidas por los germanos en este campo de concentración, Gröning no deja de ser la prueba viva de la crueldad que los nazis derrochaban aquellos años.
Por ello, los presentes no pudieron evitar sorprenderse cuando observaron que la octogenaria Eva Kor—una víctima de los crueles experimentos del sádico doctor Josef Mengele—se levantó y se acercó decidida hasta la silla de ruedas del antiguo miembro de las SS para ofrecerle la mano y su perdón. Por su parte, el alemán hizo un gran esfuerzo por levantarse para darle un abrazo que la sobreviviente no rechazó.
“¿Se puede llegar a perdonar la infamia realizada por los nazis”? Kor tiene una opinión clara al respecto, la cual compartió con el diario digital The Independent
“Quería darle la mano porque estoy interesada en ver lo que pasa cuando una víctima se encuentra con su verdugo. Yo sólo le di la mano y le dije: “Aprecio el hecho de que usted esté dispuesto a venir aquí y se enfrente a esto, pero me gustaría que inste a los viejos nazis que siguen vivos a hacer lo mismo y que aborde el problema de los nuevos neonazis que hay hoy en Alemania”.
Tras estas palabras el alemán se levantó y, en un acto que tomó por sorpresa totalmente a Kor le dio un beso en la mejilla y la abrazó. “Yo probablemente no habría ido tan lejos, pero supongo que es mejor que lo que hizo hace 70 años”, dijo.
“Mi perdón no te absuelve de tu responsabilidad, dijo Kor a Gröning. Así que te pido que digas a los jóvenes neonazis que Auschwitz existió, que la ideología nazi solo trajo derrota y dolor y que en vez de odiar o matar vayan a la escuela y aprendan una ocupación o un oficio”·
Luego explicó algo más. Su lección. La que hay que enmarcar en todos los corazones: “El perdón es un acto de curación y de liberación”.
Abc.es/bbb