El pasado 25 de junio, los ministros de defensa de la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN), una alianza intergubernamental de carácter militar que data desde 1949, anunció que aumentaría sus efectivos militares en Europa, en los países fronterizos con Rusia.

Las tropas que se tenían ocupando esos territorios era de 1 mil y se aumentó a 40 mil. El anuncio se produjo a raíz del aumento de tropas soviéticas en Ucrania y ante la amenaza de que el conflicto se recrudeciera.

“La actividad nuclear, las inversiones de Rusia en nuevas posibilidades nucleares, así como las maniobras atómicas que lleva a cabo Moscú en esa esfera son parte de un panorama más amplio, en el que Rusia se comporta de manera agresiva”, señaló Jens Stoltenberg, secretario general de la OTAN.

La escalda de acciones que asemejaban un contexto de la Guerra Fría fueron súbitamente detenidas por el propio gobierno soviético al esclarecer que no había un motivo para iniciar un conflicto bélico por el momento. “No somos agresivos, sólo perseguimos nuestros objetivos,” señaló el mandatario de la Federación Rusa, Vladimir Putin.

Desde entonces no se tienen más declaraciones al respecto.

Renace la OTAN de la Guerra Fría

La OTAN tuvo un rol central en el juego de poder durante la Guerra Fría para contener el avance del comunismo en Rusia y Europa del Este, especialmente en Alemania Oriental.

A pesar de que el ámbito de acción de la OTAN es en territorio europeo, mucho se ha criticado que Estados Unidos sea un miembro activo de esta alianza bélica. Algunos analistas explican este hecho como un remanso del mundo bipolar de la Guerra Fría, en donde el bloque de países socialistas se enfrentaban directamente con los capitalistas.

Muchos “ejercicios militares” fueron puestos en acción por la OTAN en aquel entonces, iniciando con la Guerra de Corea en 1950, en Italia, Grecia y Turquía en 1952, entre otros. El mayor despliegue de tropas del que se tiene memoria sucedió en 1957 con la movilización de 250 mil tropas, 300 barcos y 1,500 efectivos que cruzaron Europa de Noruega hasta Turquía.

En la actualidad, y después de la caída del muro de Berlín y la disolución del bloque soviético, la OTAN ha perdido presencia en el ámbito militar, hasta se había cuestionado su real funcionamiento siendo calificada como un “fantasma del pasado”. Incluso, entró en un plan de reforma interna reduciendo sus bases de 65 a tan sólo 20 en Europa.

OTAN tuvo una intervención significativa en la desintegración de Yugoslavia en 1994 y posteriormente en Kosovo en 1998. Tuvieron participación en las guerras de Afganistán e Irak en 2001 y 2003 respectivamente. Y han intervenido en Libia también ya que el número de miembros se ha extendido afuera de Europa.

De igual manera, la alianza militar refuerza maniobras contra los ciber-ataques y la guerra bacteriológica, las consideradas guerras del futuro.

Es por esta razón que la noticia de que la OTAN moviliza tropas causa un revuelo internacional y revive los ayeres de la Guerra Fría. Sin embargo, las tropas están estacionadas en los países ex soviéticos y no han recibido órdenes contrarias.

La postura tanto de la OTAN como de Rusia sigue firme y sin movimientos hasta que una de las partes busque nuevamente una provocación lo cual, podría suceder en cualquier momento.

Con información del blog “La Próxima Guerra” y CNN Politics.

Foto: Twitter NATO @NATO