Entrevista exclusiva para Siempre! a Sergio Varela Hernández | Investigador del Centro de Estudios Sociológicos de la UNAM.
Viridiana Vega
El ritual que expresaba en el campo y que contagiaba a los aficionados trascendió más allá de la cancha y acabó con su posición al frente de la selección mexicana. El presunto golpe que le acomodó Miguel Herrera, El Piojo, al comentarista Christian Martinoli, el lunes pasado en el aeropuerto de Filadelfia luego de ganar la Copa Oro, también le dolió al pueblo de México con su cese.
La sociedad mexicana siempre ha estado enrolada en el devenir del fútbol nacional y esta vez no fue la excepción, y menos con un líder deportivo que se ha encargado de convertirse en un referente tanto en lo comercial, como en lo político, con las campañas publicitarias de productos, bienes y servicios, además de propaganda.
“No es lo mismo El Piojo de hace un año, El Piojo triunfador del Mundial 2014, que El Piojo del Partido Verde (Ecologista de México), o del partido contra Panamá; hay lecturas múltiples, dependiendo también del momento”, aseguró en entrevista con Siempre! el doctor en Antropología social, Sergio Varela Hernández.
Para el doctor Varela, “a El Piojo se lo comió el sistema comercial, el sistema mercantil, un asunto irrelevante en el mundo del deporte. Hay intereses comerciales muy fuertes y El Piojo no fue más que otra víctima”, relativamente beneficiada al obtener cantidades inmensas de ingresos de todos los ámbitos en los que ha incursionado, “pero al final ha sido una víctima de este sistema que todo lo ve en términos del negocio”.
La sociedad lo ve con esta dicotomía, a veces como un héroe y otras como un villano, pero siempre enmarcado, considera el también investigador del Centro Sociológicos de la UNAM. “Hay que ver, por ejemplo, los memes que le hacen a El Piojo, en uno está en una conferencia de prensa y al final justificando que le dio el golpe a Martinoli, pero que no le pegó tan duro porque para pegar Kola Loka que pega de locura”.
Entonces, te lleva a esa idea de que El Piojo todo lo tomaba como negocio, insiste el experto. “La gente sí lo vio como una mercancía en algún momento dado, que terminó en oro falso. Finalmente, si hacemos un balance El Piojo quedó muy mal en términos de la imagen de una u otra manera desde el inicio en la dirigencia de la selección nacional. En términos generales ahora ha quedado como un bufón”.
El experto en temas sociales relacionados con el deporte (en específico el fútbol) reconoce que el papel que protagonizan los medios de comunicación, como la televisión, y los demás medios conexos: Internet, las redes sociales o los periódicos electrónicos, es fundamental para posicionar a un personaje como figura pública que incida en la vida cotidiana de la sociedad. “La televisión te eleva y al final acribilla, como el caso de El Piojo Herrera”, dice, “sin la televisión sería técnicamente imposible”.
El entretenimiento da sentido a la vida cotidiana
En este polémico tema como en otros más, no pudo faltar el escepticismo. El excandidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, dijo que la pelea entre el entrenador de la selección nacional y el comentarista fue producto de un complot contra Miguel Herrera, El Piojo, planeado por la esfera política gobernante, para, además, desviar la atención de los temas que afectan a la sociedad, como la fuga del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”.
Como se sabe, hay una idea que se ha vuelto una constante. Se dice que el entretenimiento, como los deportes o los espectáculos, fungen como distractores sociales ante los problemas nacionales.
“Es cierto que los grandes medios de comunicación buscan sacar ganancias, principalmente económicas, de los deportes y de los espectáculos, en general. La gente no los asume necesariamente como tal”, indica el doctor Sergio Varela al respecto, “más bien, en este caso, el fútbol sirve como una especie de metáfora, de pretexto, para interpretar o para darle sentido a su vida cotidiana; de ahí que sea tan relevante”.
“Una de las funciones que podemos pensar es que hay un goce corporal, hay ciertas experiencias en el desempeño del cuerpo satisfechas en las prácticas deportivas”, por lo que “el fútbol ofrece ciertos sentidos de vida, o sea, le da coherencia a la vida cotidiana de los adultos, que otras esferas, como la política, no les da”.
“El fútbol profesional que es parte del espectáculo televisivo también de una u otra manera ofrece ciertas guías sociales y culturales que la gente adopta y readapta en su vida cotidiana”, explica el investigador.
Entrevista completa el próximo domingo en la nueva edición de Siempre!