Entrevista a Carlota Vargas | Regidora de Monterrey
Irma Ortiz
Considerado como un ejemplo de lo que puede hacer el voto de la ciudadanía ante el hartazgo por la falta de oferta política y transparencia en el nombramiento de candidatos de los distintos partidos, está el arribo al gobierno de Nuevo León de Jaime Rodríguez, el Bronco, considerado como la opción, el “candidato independiente” que inicia su administración con la clausura de la casa de gobierno por considerarla “excesiva y costosa”.
Más allá del circo mediático y de las declaraciones rimbombantes de ir con todo contra los corruptos en Nuevo León y anunciar una auditoría exhaustiva a la administración de Rodrigo Medina —quien deja una deuda de 61 mil millones de deuda y huellas de corrupción, incluida su familia, por contratos de proyectos públicos y compra de propiedades—, el mandatario estatal dio a conocer su nuevo gabinete donde predominan los empresarios inmobiliarios, algunos de los cuales enfrentan serios conflictos de interés.
Es el caso del ahora secretario de Desarrollo Sustentable Roberto Russildi —quien es vicepresidente de Servicios Corporativos Javer, una de las empresarias constructoras más importantes del país— quien además es socio del ejecutivo neolonés en la compra de un predio en el municipio de García. La empresa fue demandada penalmente por despojo a familias de la comunidad de El Fraile I, quienes perdieron el litigio, aunque en columnas periodísticas trascendió que hubo intervención del entonces alcalde Jaime Rodríguez.
De acuerdo con Reporte Indigo, Javer también construyó en Zuazua, municipio de García, el fraccionamiento Real de Palmas, un megaproyecto considerado el más grande de América Latina, con 14 mil 800 casas de interés social, que hoy enfrenta el abandono, la carencia de servicios, inseguridad, y que fuera subsidiado por el Consejo Nacional de Vivienda.
La doctora María Marván, exconsejera del entonces Instituto Federal Electoral, señala en entrevista para Siempre! que quien crea que Jaime Rodríguez es independiente, “no sabe quién le pagó la campaña, y ésta se la pagó el Grupo Monterrey”.
Russildi es uno de los varios nombramientos donde se anticipa el futuro de esa entidad con el arribo de uno de los poderes fácticos al poder: el empresariado.
Escenografía de botas y caballos
Sobre el tema, Siempre! entrevistó en exclusiva a la regidora del PRI en el ayuntamiento de Monterrey, Carlota Vargas, quien habló sobre los candidatos independientes y la renuencia de los partidos a cambiar, pese al rechazo de la población.
Los partidos no se quieren oxigenar, ni cambiar métodos de selección.
Simplemente, los partidos nos hubieran complacido a muchos si hubieran llamado a cuentas a todos los ineficientes y sinvergüenzas, que se hubiera deslindado de esas personas, que se les exigiera que pagaran cuentas; y no lo vimos. Lo que vemos es que los grupos de poder se hacen más pequeños y sólo se trata de familiares y amigos. En todos los partidos se encuentra el papá, el compadre, mientras que el resto de la gente que ha trabajado y militado con capacidad y experiencia son echas a un lado, porque todo “quedó” en familia.
Jaime Rodríguez y sus declaraciones. ¿Usted encuentra similitudes en el discurso del Bronco con Vicente Fox y Andrés Manuel López Obrador?
Parte del encanto de estas personas es que viven en una película y la gente cree que está con el muchacho de la película, es una escenografía política con botas y caballos. Fox traía sus botas negras de charol y Andrés Manuel era un rayito de esperanza.
La verdad es que a una parte muy importante de la gente la atraen con ese tipo de cosas, y hacen cosas espectaculares; por ejemplo, nuestro gobernador llega y dice que va enviar la silla del exgobernador a un museo “porque enferman de poder y egolatría”; en esa silla se sentó no sólo Rodrigo Medina sino muchos gobernadores, es parte de la historia en Nuevo León. Si todo fuera cambiar de silla para que los gobiernos fueran diferentes, sería muy fácil.
Sin embargo a la gente les gusta el show y ellos se lo dan. Ojalá y todo quedara en que atrajeran al electorado pero que sus acciones fueran legales y serias.
¿Cómo considera que será la relación del Bronco con el Congreso local?
Esperaría que fuera buena, debería de serlo, pero preocupan varias cosas. Por ejemplo que cuando el Congreso salió, indebidamente, a sacar fast track las cuentas de Medina, repito: indebidamente, rápidamente les hablaron a las redes sociales para cercar el Congreso.
No me gustaría ver que el Ejecutivo, que siempre tiene más recursos y poder, implemente medidas contra los otros dos poderes. Imagínese que nos manden una iniciativa y el Congreso no esté de acuerdo o la cambie y éstos les cuchicheen a las redes sociales, ¡que sabe Dios si sean redes sociales o no!, para mandar un montón de gente a presionar.
Actos de “buena voluntad”
Parecería que va a ser un gobernador que no seguirá la ley y las formas, con tal de lograr sus objetivos.
Lo que más nos interesa en el fondo a todos los ciudadanos es la certidumbre jurídica, saber que la ley se aplica a todos por igual. Han sucedido cosas que indican cómo toman a la ligera la ley; por ejemplo, aun cuando tengo una excelente opinión de Fernando Elizondo —hoy coordinador ejecutivo del gabinete—, que es una persona que se ha distinguido para bien en nuestra comunidad, no gustó que le crearan un puesto ex profeso. Lo que menos gustó fue que el gobernador electo mandara la propuesta al Congreso a sabiendas de que cambios en los organigramas de la administración pública sólo los hace el gobernador constitucional.
A sabiendas, porque Elizondo es un connotadísimo abogado, ya sabía perfectamente que en su calidad de gobernador electo y no constitucional enviaría esa propuesta; ¿qué pudo haber hecho?, mandarla a las 7 de la mañana del siguiente día. Si toma protesta a las 12 de la noche llega con su propuesta y el Congreso en un “acto de buena voluntad” la aprueba… Aquí hay otro punto: en el Congreso —y eso inquieta mucho, aunque hubo algunos diputados que estuvieron en contra y así lo dijeron—, se dio un acuerdo entre partidos o “actos de buena voluntad” para sacar adelante la propuesta.
Si el Congreso sigue “con actos de buena voluntad” para que en las redes sociales no se critique, se dejará de observar la ley. Si quieres, cámbiala bien, y luego actúa en consecuencia, pero no se puede hacer eso. ¿Qué más vamos a ver cuando los mismos diputados con poca seriedad acepten cosas que no son debidas o se sufra el acoso de las redes sociales?
Otro aspecto que parece nimio fue el show mediático de la cabalgata del Bronco en la Fundidora, donde parecía que filmaban una película; sí, nada más que el reglamento de Fundidora prohíbe la entrada de animales, y todo el mundo estaba “calladito porque se ve más bonito”, nadie quiere criticar porque viene el acoso de las redes sociales.
Son hechos insignificantes que dan idea del apego al Estado de derecho que no está siendo una prioridad para el nuevo gobierno. De quien más me extraña es de Fernando Elizondo porque lo tengo como un gran abogado; conocí a su padre y pocas gentes han sido tan respetuosas con el Estado de derecho como él.
Mancuerna mobiliarias-gobierno
Luego de los nombramientos del gabinete salen más a la luz los grupos empresariales que están apoyando al Bronco, se habla del Grupo Monterrey, de desarrolladores inmobiliarios. ¿Quiénes son estos grupos?, ¿qué problemas han tenido en la entidad?
Hay nombramientos muy buenos, no porque sean mujeres, pero la contralora Nora Elia Cantú o la secretaria de Desarrollo Social, Natalia Berrún Cañón, o la secretaria de Educación, María Estela Gutiérrez, constituyen una agradable sorpresa porque son perfiles de primer mundo, como lo es el mismo Fernando Elizondo.
Manuel González —secretario de Gobierno—es una gente con una gran experiencia, un operador político de primera pero junto a esto empezamos a ver una cantidad inusitada de desarrolladores inmobiliarios en el gabinete.
Antes déjeme decirle que el ingeniero Rodríguez ha estado muy ligado a lo largo de su trayectoria con inmobiliarias. Anuncia el nombramiento del secretario de Desarrollo Sustentable, Roberto Russildi Montellano, quien es socio de Rodríguez y vicepresidente ejecutivo de una de las principales empresas constructoras de vivienda de la entidad, Servicios Corporativos Javer.
Javer es responsable del fraccionamiento Real de Palmas, uno de los casos más emblemáticos de problemas de vivienda en Zuazua, un municipio pequeño de 7 mil habitantes, que de un día a otro amaneció con alrededor de 20 mil viviendas y que multiplicadas por cuatro, aumentó la población a 80 mil personas. Muchas de estas viviendas hoy están abandonadas por la falta de servicios y sin vigilancia.
Además se habló del despojo de Javer a algunas comunidades como las de El Fraile I, en el municipio de García.
El nombramiento de Russildi, es “poner la Iglesia en manos de Lutero”. El problema es que el área metropolitana está hecha un desastre y el titular de Desarrollo Urbano es dueño de una inmobiliaria; el secretario de agua y drenaje —paraestatal encargada del proyecto Monterrey VI— es Enrique Torres Elizondo, otro inmobiliario connotado, gente muy capaz, pero usted sabe que agua y drenaje van de la manita con el desarrollo inmobiliario.
Es evidente el conflicto de intereses.
Sí, porque además el secretario de Obras Públicas es Humberto Torres Padilla, otro inmobiliario y son uno, dos, tres, pero hasta el director del ISSSTE León, es Manuel Vital Couturier, quien es director del Grupo Inmobiliario Tierra Urbana, constructora de vivienda de interés social y del Grupo Canadá.
Este miércoles declaró el Secretario de Obras Públicas, Agustín Torres Padilla, que mientras había dinero para inversión iban a desatorar todos los desarrollos que estaban detenidos, que están bajo supervisión para que cumplan todos estos requisitos, sin causarle problemas a la ciudad. Entonces, ahora sí, suéltenlos todos para que haya obra pública, ¡qué obra pública…, estaban hablando como desarrolladores!
Hay empresarios de otros colores, por ejemplo, Eduardo Santos, del grupo Maiz Mier y otros más, pero muchos, son de las distintas empresas inmobiliarias y no nada más de las grandes empresas de Nuevo León, Cemex, FEMSA. Todas están apuntando a sus gentes ahí.
Recuerdo con mucho afecto a uno de los más grandes empresarios que ha tenido el estado y a quien se debe gran parte de ese desarrollo empresarial, don Eugenio Garza Sada, quien decía zapatero a tus zapatos, los empresarios no estamos para meternos en la política, estamos para crear empresas y los políticos para estar en la política.
Hoy aquí, el poder económico y el poder político van de la manita y los empresarios están dedicados desde el poder a manejar lo que les conviene a sus empresas, con una visión empresarial. Que no me digan que si viene de una empresa cementera no va a querer hacer carreteras o pavimentar con cemento, no son Santa Martha la Piadosa, ni están pensado nada más en el bien general.
Por eso don Eugenio sabiamente decía que cada quien se dedicara a lo suyo, a exigir un gobierno honesto, que desgraciadamente no lo hemos tenido. Entiendo que parte del desastre que tenemos ahora proviene de los malos gobiernos anteriores y que los partidos no han estado a la altura de las circunstancias y que también hemos provocado eso. Lo que me temo es que esto no vaya a ser la solución y nos vaya a dejar peor.