Fueron identificados los dos autores del atentado suicida que acabó con la vida de al menos 97 personas el sábado pasado en Ankara, de acuerdo con el diario Hürriyet, y que se logró dar con ellos a través de las muestras de ADN comparadas con otras obtenidas de familiares de los terroristas.

Los dos terroristas habían sido entrenados en Siria y formaban parte de una red de apoyo al grupo yihadista Estado Islámico (EI); el primero de ellos era unos de los líderes en el sureste de Turquía, Yunus Emre Alogöz, hermano mayor de Şeyh Abdurrahman Alagöz, persona bien conocida por las autoridades turcas señalado de ejecutar un atentado suicida en al ciudad de Suruc, cerca de la frontera con siria, el 20 de julio.

El ataque de Suruc dejó 33 muertos y de acuerdo con la línea de investigación abierta existen similitudes entre las bombas empleadas en ambos casos.

El segundo de los identificados es Ömer Deniz Dündar; su padre declaró ante la prensa que se siente destrozado por el destino de su hijo y recordó que ya había alertado a la policía de su comportamiento extremista, incluso, pidió que lo detuvieran y lo metieran en la cárcel pero después de que fue interrogado lo dejaron el libertad y se le perdió la pista en Siria; una tercera persona con las iniciales Y.S., fue detenida como cómplice.

El diario agrega que también se conoce sobre los vehículos empleados por los terroristas en los que viajaron desde la ciudad de Gaziantep, en el sureste del país y donde tienen sus instalaciones diversos grupos armados sirios, incluido el EI, hasta Ankara, la capital turca.

Fuentes oficiales citadas por el periódico, afirman que los autores de la matanza eran personas conocidas por los servicios de inteligencia y se sospechaba que podrían cometer en cualquier momento un atentado en nombre del EI.

El atentado terrorista ha provocado gran descontento en los partidos de oposición: el líder socialdemócrata, Kemal Kiliçdaroglu, exigió al gobierno turco que aclare si los dos terroristas formaban parte de una lista de posibles suicidas manejada por las fuerzas de seguridad.

Sobre los datos dados a conocer por la prensa, el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, no se ha pronunciado pero insiste en que no debe descartarse la línea de investigación kurda, además, señaló que algunos de los posibles responsables que están siendo investigados han pasado meses en Siria por lo que pueden ser vinculados tanto al Estado Islámico como al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

Las primeras destituciones se han llevado a cabo después de las numerosas críticas que ha recibido el presidente turco por la falta de seguridad el día del ataque y por su respuesta ante el hecho; se trata del director general de la policía de la provincia de Ankara, su responsable de información y su responsable de seguridad pública, precisó el ministerio de Interior turco.

Información de El País y ABC, España