Francisco Toledo presenta exposición en el MAM
Después de que el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué, anunciara el miércoles pasado la suspensión definitiva de las obras en el Cerro del Fortín para el Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca (CCCO), el artista y fundador del Patronato Pro Defensa y Conservación del Patrimonio Cultural y Natural (Pro Oax), Francisco Toledo con un rostro sereno y sin dar detalles sobre dicho anuncio, presentó ante medios de comunicación su nueva retrospectiva en el Museo de Arte Moderno (MAM), en la ciudad de México.
A través de su más reciente producción “Duelo. Francisco Toledo”, el artista oaxaqueño vuelve a pisar después de 35 años el recinto cultural, integrada por un centenar de obras inéditas -nuevo motivo de experimentación plástica- que revelan su fulgurante regreso a la cerámica de alta temperatura, apenas cumplidos los 75 años de edad.
Como uno de los artistas mexicanos que han dejado una mayor huella durante todo el siglo XX mexicano y principios del siglo XXI, calificó al artista juchiteco, el presidente del Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa. Agregó que Toledo es el artista mexicano más destacado con un reconocimiento internacional único, que lo convierte en una figura emblemática de la creatividad mexicana.
Señaló que la exposición es el resultado del trabajo variante de Toledo que ha hecho durante toda su vida, donde entrelaza la tipología, las leyendas, la magia, así como el sentido estético, entre otros elementos que hace única la obra del artista.
Agradeció la disposición del artista para presentar la exposición, así como su generosidad que tuvo hacia todos los mexicanos al donar el Museo del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO), que guarda cerca de 125 mil obras artísticas.
En las obras del autor, se muestra la técnica de alta temperatura, la cual implica un complejo proceso y quemas de hasta mil 400 grados centígrados en hornos fabricados con ladrillos, lo que garantiza la durabilidad de las piezas.
Toledo trabajó cada una de las obras en función de su volumen y atributos singulares. Nunca hizo dibujos preliminares, sino que a partir de soportes torneados y elementos básicos moldeados en dicho taller, imaginó, amasó y dio forma a figuras y motivos ornamentales, componiendo esculturas a las que pigmentó con engobes, vidriados y óxidos (el óxido de hierro da el rojo, el cromo el verde, el de manganeso el café, por ejemplo).
La gama de rojos enfatiza el tono dramático de este conjunto, que Toledo tituló “Duelo” y concibió como tributo a la víctimas de la violencia, la tortura y la injusticia en México y en el mundo.
Por otro lado, el artista, a mediados de año comenzó una campaña en defensa del Cerro del Fortín en el andador turístico de la Ciudad de Oaxaca, en donde se pretendía construir el Centro Cultural y de Convenciones de Oaxaca.
Por la creación de su frente en defensa del Cerro de Fortín, el juchiteco vivió desde violencia hacia su persona hasta amenazas de muerte por redes sociales. A pesar de ello, Toledo jamás se retiró de su lucha para generar conciencia en la ciudadanía para proteger la reserva ecológica, a la vez que cuestionaba las obras que el gobierno realizaba en el estado.


