Un portavoz del gobierno saudí declaró el pasado 23 de noviembre que el reino negociará con las grandes compañías petroleras para mantener la estabilidad en los precios del petróleo.
Aunque el reino saudí busque la estabilidad lo que realmente quieren los productores es que el precio del crudo se incremente. Actualmente el Brent se vende en 45 dólares por barril cuando apenas un par de años se cotizó a más del doble.
La estabilidad en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) podría verse afectada si las dos potencias del Medio Oriente —Arabia Saudí e Irán— no logran ponerse de acuerdo dados los conflictos geopolíticos en la región.
La misiva, de tener éxito, deberá contemplar a Irán como parte del acuerdo y la posibilidad de abrir la llave al flujo de más barriles en el mercado del crudo. El bajo rendimiento y el sacrificio económico de la OPEP por mantener los precios estables han colocado a otros países productores como Rusia y Estados Unidos en la cabeza del mercado.
Algunos analistas leen entre líneas que esta declaración del reino saudí significa que ese pacto de estabilidad petrolera ya está en camino.
Reuters
oag