Confrontado con el Congreso, con 26 gobernadores republicanos que cuestionan y lo intentan complotear sus decisiones, y una lucha intensa en defensa de las minorías, de los derechos civiles, la economía y un control efectivo de las armas, hoy Barack Obama rinde su último informe de gobierno.

23 invitados especiales y una silla vacía, reflejan algunos de los temas que el presidente de la otrora nación más poderosa del mundo, abordará en el que es llamado el discurso sobre el Estado de la Unión.

Especialistas internacionales han dedicado largos análisis sobre el contenido del documento que presentará este día uno de los presidentes de mayor impacto en la vida de los norteamericanos, en el que abordará la condición de Estados Unidos tanto a nivel nacional como internacional.

Afirman que será la economía el tema dominante en esta comparecencia ante las Cámaras del Congreso de los Estados Unidos, aunque también esperan una posición más clara sobre la inminente elección presidencial y el perfil de quien podría sucederlo en el trono.

Hay quienes no pierden la esperanza de un tercer mandato del afroamericano. Y aunque la Constitución de los Estados Unidos impide, de entrada, la reelección presidencial por más de dos periodos, también, la 22ª Enmienda hace una excepción cuando la pretensión del interesado es respaldada por tres cuartas partes del Poder Legislativo.

Politólogos afirman que el informe presidencial dejará de lado el tradicional discurso donde se aborden las prioridades legislativas para el último año en funciones del actual gobierno y que en cambio, se enfocará a temas más populistas, como la defensa de la clase media, y la recuperación de la economía, tan lastimada y colapsada en los últimos tiempos, con una tasa de desempleo superior al 8.5 por ciento.

El último informe de Barack Obama estará salpimentado por esos detalles que le han valido al abogado cantidad de puntos positivos frente al electorado, como los 23 invitados especiales y la silla vacía que incluirá en el foro de esta noche.

Y entre los 23 invitados, vía la primera dama, Michelle Obama, destaca Óscar Vázquez, hijo de indocumentados mexicanos, alumno destacado en ciencias exactas e integrante del equipo de la preparatoria Carl Hayden, que venció al equipo de robótica del Instituto Tecnológico de Massachusetts. De ahí, continuó su educación hasta graduarse en ingeniería mecánica en la Universidad de Arizona.

Óscar Vázquez, indocumentado, regresó a México y luego buscó retornar legalmente a Estados Unidos, contando para ello con el respaldo de algunos políticos como el senador de Illinois, Dick Durbin, gran promotor de la reforma migratoria. La suya, es una de esas historias de lucha, lágrimas y éxito, la del sueño americano hecho realidad, lo que Barack Obama quiere demostrar: que es posible el progreso para todos.

Como Óscar, otros invitados que representan la lucha por la inclusión, la paz, la tolerancia y el progreso, estarán presentes en este informe, como el refugiado sirio Refaai Hamo, y otros personajes y activistas sociales.

La silla vacía en tanto, representará a las víctimas de la violencia, las víctimas de las armas, y para recordarle a los legisladores su responsabilidad en el tema, el mismo que ha sido una de las causas de los grandes enfrentamientos que ha sostenido el presidente de los Estados Unidos con su Congreso.